Me resulta evidente que Britney no se encuentra bien, pero también debo gritar alto y claro que la gente es muy ingrata, estúpida e hiriente. ¿Es normal que una persona famosa vaya a un restaurante y que no pueda hacer vida normal porque continuamente tiene a gente grabándole con sus móviles, haciéndole fotos, etc…? Pues no. No lo es.
Algunos dirán que es el precio que «tiene que pagar» por la fama y a esos yo les diría que se vayan a paseo. Brit, como el resto de personas públicas de deben a su público cuando están sobre el escenario pero que tienen derecho a una vida privada y a momentos de intimidad, como todo hijo de vecino, incluso estando en un sitio público. Es desesperante.
El pasado viernes por la noche Britney salió de cena con su marido Sam Asghari y acudieron a un restaurante en el que la gente se volvió bastante loca al percatarse de que entre los comensales estaba la princesa del pop. La peña comenzó a hacer fotos y más tarde a grabar vídeos de la pareja provocando la irritabilidad de Britney que, visiblemente incómoda les pidió que pararan. La gente seguía acosando a la pareja y el marido de la cantante terminó por levantarse de la mesa y salir del sitio dejando a Britney sola y hablando cosas que no se entendían demasiado y cubriéndose la cara con el menú.
Los problemas de salud mental son importantes. Protegernos, cuidarnos y respetar, también.
Si quieres una foto con un personaje público, busca el momento, encuentra el instante en el que no le molestes demasiado o interrumpas en medio de una conversación y pídesela amablemente. Es bastante probable que él se la haga y que te atienda con simpatía. Pero si te dice que no, o te pide que no le grabes… no le fastidies la vida.
Me da mucha pena todo esto y tengo miedo de que Britney, que tanto ha luchado por su libertad y por proteger su vida y su salud, acabe mal.