¿Qué pedimos? ¿Compramos un pollo asado para llevar?
Seguro que esa pregunta se ha repetido alguna vez en tu casa cuando llega la hora de comer un fin de semana. Los establecimientos de pollo asado se caracterizan por ese olor tan delicioso que inunda las calles en las que se ubican.
Algunos de estos locales forman parte de una franquicia de pollos asados, una muy buena opción de negocio para montar tu próximo proyecto como una franquicia de hostelería.
Montar una franquicia de pollos asados puede ser un gran éxito, ya que por suerte para franquiciador, franquiciado y clientes, se suelen ofrecer otros productos. La comida preparada para llevarse a casa suele ser un gran reclamo.
En nuestro directorio de franquicias podrás encontrar una amplia oferta de franquicias en el sector de la restauración. Y sí, también hay espacio para un alimento tan delicioso como pueden ser los pollos asados.
Franquicias de pollos asados
Seguro que en tu barrio hay algún local que vende pollos asados y otros productos que ofertan como comida preparada. Entre ellos, ensaladilla rusa, paella, croquetas, pescado o algún guiso.
Eso es precisamente lo que ofrece la franquicia Rostisseria Ramirez, dedicada a la elaboración y venta de comida preparada desde hace más de 27 años. Si principal seña es el uso de ingredientes de primera calidad, dando lugar a una propuesta gastronómica casera y tradicional, con los mejores sabores. Los pollos asados, la comida tradicional en formato take-away y el servicio de bodega son sus especialidades.
Para abrir una franquicia Rostisseria Ramirez se requiere una inversión mínima inicial desde 71.000€, además de un canon de entrada de 10.000€ y un 5% en calidad de royalty de la franquicia. El contrato en principio es de cinco años, siempre con la opción de prorrogar este tiempo y ampliarlo al consensuado entre ambas partes.
Si el franquiciador acepta las condiciones y superas sus requisitos, debes saber que entrarás a formar parte de una gran familia. La marca cuenta con instalaciones propias donde se elaboran todos sus productos, lo que evita cualquier dependencia de proveedores externos en los procesos. Eso es un punto a su favor, además de apostar por la cercanía con sus clientes, en locales a pie de calle con impacto visual y gran accesibilidad.
Entre sus ventajas, una campaña de marketing y comunicación a nivel local y global, que permitirá el afianzamiento del negocio a los pocos meses de abrirlo. Además, hay una formación continua y asesoramiento por parte de la marca. Así mismo, se traspasa el sistema de gestión y el software empleado en el resto de locales de la enseña, por lo que todo irá sobre ruedas con una facilidad increíble.
Los precios asequibles de sus productos, logran que la clientela confíe en esta franquicia de pollos asados, logrando que se convierta en una de las franquicias rentables de nuestro directorio de franquicias.
Si es realmente lo que estás buscando, te esperamos en Comprar Franquicia para lograr un acuerdo entre ambas partes y ayudarte a conseguir tu objetivo: montar una franquicia de pollos asados.