Yes, we camp… in the USA, por Violeta Barba Yes, we camp… in the USA, por Violeta Barba

Los sueños hay que pelearlos
para que sean menos sueños
y más realidad

Archivo de la categoría ‘California’

Mi primer (y descorazonador) discurso del Estado de la Unión


Apuramos nuestras últimas horas en San Diego (California) antes de hacer la siguiente parada en el viaje que nos llevará hasta Des Moines (Iowa). Allí vamos a hacer una inmersión en cómo se debaten y votan las leyes a nivel estatal en la Asamblea General de Iowa, compuesta por dos Cámaras: House of Representatives (lo que vendría a ser un Congreso) y el Senado.

Pero también podremos seguir hablando de políticas migratorias e integración, porque así como San Diego es una ciudad acostumbrada a la multiculturalidad -no en vano acoge a 4.500 refugiados y refugiadas al año de media- Iowa por su posición geográfica está menos acostumbrada a la inmigración. Aún con todo hay zonas que cuentan con un 35% de población latina, que espero nos trasladen sus inquietudes y qué entienden ellos como migrantes que es necesario para conseguir una integración real.

Estos últimos días en San Diego hemos seguido hablando de derechos fundamentales. Nos hemos reunido con la comunidad LGTBQ que nos ha relatado su lucha para ser escuchada hasta conseguir un importante desarrollo legislativo en materia de protección y de equiparación de derechos (y no solo una simple simpatía o normalización social de la homosexualidad o intersexualidad pero sin un respaldo legal suficiente). Como curiosidad os contaré que San Diego tiene al primer jefe de policía transexual del Estado y cuenta con baños públicos respetuosos con la identidad de género de cada cual.

Pero además de otros encuentros como los que os relato en el vídeo, también hemos coincidido con un gran evento (por llamarlo de alguna manera): el primer discurso del Estado de la Unión, que sería algo así como nuestro Debate sobre el Estado de la Nación.

En este discurso, el primero de Donald Trump, que tiene lugar en el Congreso americano y es televisado y bastante seguido, el presidente valora lo hecho hasta ahora y marca las líneas estratégicas para los próximos meses.

Lo seguí con mis compañeros del programa de jóvenes líderes europeos. Y después de escucharlo hablar sobre el aumento del armamento nuclear, la importancia de mantener abierta Guantánamo o lo contento que estaba por haber sacado a EE UU del acuerdo de París por el medioambiente, aún me dura la congoja (como a la mayor parte de los americanos, por otra parte, que lo vieron junto a nosotros y que también parecían consternados, pese a estar más acostumbrados a las salidas de tono .del presidente)

Bueno, os dejo que toca hacer maletas de nuevo.

¡Nos vemos en Iowa!

Del poder de las mujeres y de lo absurdo del muro

Bienvenidas y bienvenidos de nuevo a este trocito de experiencia que estoy viviendo en el programa para jóvenes líderes europeos, ahora desde San Diego (California).

Desde que llegamos de Washington D.C no solo ha cambiado el clima, sino también los temas de debate y estudio. Si la semana pasada conocíamos los Departamentos de Estado que diseñan las políticas federales (por ejemplo, las de inmigración, en la reunión que tuvimos con el Departamento de Salud y Servicios Sociales) hoy en San Diego hemos podido contactar con las personas que las viven en primera persona, gracias a un encuentro con asociaciones de inmigrantes.

Y ha sido especialmente provechoso porque hemos pasado de tener el punto de vista teórico al práctico, pudiendo comprobar si las medidas que nos explicaron y que ellas han vivido en sus propias carnes verdaderamente han sido bien diseñadas. Y digo “ellas” porque si hay algo que he descubierto es que la comunidad de mujeres está tremendamente empoderada, siendo las mujeres las que lideran los grupos de inmigrantes y refugiados que se han creado para asegurar que se respetan sus derechos y que tienen acceso a la prestaciones básicas.

Y en esa estela de empoderamiento femenino hemos continuado, porque acto seguido hemos acudido a una mesa redonda para relatar nuestras experiencias y preocupaciones en la que hemos intervenido varias personas del programa, todas nosotras mujeres. Y creo que esto resume bien lo que puede ser este 2018: el año de acabar de una vez por todas con la desigualdad y la brecha de género, devolviéndonos a las mujeres la voz y el lugar que nos corresponde en el espacio público.

El día, sin embargo, ha terminado de una forma menos amorosa de lo que prometía, aunque he de decir que también ha resultado interesante o útil. Nos hemos reunido con la oficina del Congresista Duncan Hunter, del partido Republicano, fiero defensor de la construcción de un muro con México de costa a costa para evitar la inmigración, así como de impedir la entrada de inmigrantes y refugiados en los EE UU, apelando a la seguridad nacional.

Y a pesar de que no hemos sido capaces de convencerlo, sí que ha sido muy esperanzador el haber visto a los 15 jóvenes que estábamos debatiendo con él aunar nuestras voces en contra de la construcción del muro, incluso a los provenientes de países europeos con políticas de migración más conservadoras en materia de refugiados.

Porque si una cosa nos ha demostrado la historia es que poner vallas y dejar fuera a quien busca ayuda, además de atentar contra la dignidad humana y la solidaridad, nunca funciona. Para cualquier país receptor resulta mucho mejor invertir en integración, garantizar la convivencia y sacar el máximo partido a la multiculturalidad.

Los próximos días prometen ser intensos porque seguiremos debatiendo sobre diferentes leyes californianas y distintas cuestiones, como los derechos LGTB en este Estado o el empoderamiento de los jóvenes en sus comunidades.

¡Os mantendré informados!