Yes, we camp… in the USA, por Violeta Barba Yes, we camp… in the USA, por Violeta Barba

Los sueños hay que pelearlos
para que sean menos sueños
y más realidad

Del poder de las mujeres y de lo absurdo del muro

Bienvenidas y bienvenidos de nuevo a este trocito de experiencia que estoy viviendo en el programa para jóvenes líderes europeos, ahora desde San Diego (California).

Desde que llegamos de Washington D.C no solo ha cambiado el clima, sino también los temas de debate y estudio. Si la semana pasada conocíamos los Departamentos de Estado que diseñan las políticas federales (por ejemplo, las de inmigración, en la reunión que tuvimos con el Departamento de Salud y Servicios Sociales) hoy en San Diego hemos podido contactar con las personas que las viven en primera persona, gracias a un encuentro con asociaciones de inmigrantes.

Y ha sido especialmente provechoso porque hemos pasado de tener el punto de vista teórico al práctico, pudiendo comprobar si las medidas que nos explicaron y que ellas han vivido en sus propias carnes verdaderamente han sido bien diseñadas. Y digo “ellas” porque si hay algo que he descubierto es que la comunidad de mujeres está tremendamente empoderada, siendo las mujeres las que lideran los grupos de inmigrantes y refugiados que se han creado para asegurar que se respetan sus derechos y que tienen acceso a la prestaciones básicas.

Y en esa estela de empoderamiento femenino hemos continuado, porque acto seguido hemos acudido a una mesa redonda para relatar nuestras experiencias y preocupaciones en la que hemos intervenido varias personas del programa, todas nosotras mujeres. Y creo que esto resume bien lo que puede ser este 2018: el año de acabar de una vez por todas con la desigualdad y la brecha de género, devolviéndonos a las mujeres la voz y el lugar que nos corresponde en el espacio público.

El día, sin embargo, ha terminado de una forma menos amorosa de lo que prometía, aunque he de decir que también ha resultado interesante o útil. Nos hemos reunido con la oficina del Congresista Duncan Hunter, del partido Republicano, fiero defensor de la construcción de un muro con México de costa a costa para evitar la inmigración, así como de impedir la entrada de inmigrantes y refugiados en los EE UU, apelando a la seguridad nacional.

Y a pesar de que no hemos sido capaces de convencerlo, sí que ha sido muy esperanzador el haber visto a los 15 jóvenes que estábamos debatiendo con él aunar nuestras voces en contra de la construcción del muro, incluso a los provenientes de países europeos con políticas de migración más conservadoras en materia de refugiados.

Porque si una cosa nos ha demostrado la historia es que poner vallas y dejar fuera a quien busca ayuda, además de atentar contra la dignidad humana y la solidaridad, nunca funciona. Para cualquier país receptor resulta mucho mejor invertir en integración, garantizar la convivencia y sacar el máximo partido a la multiculturalidad.

Los próximos días prometen ser intensos porque seguiremos debatiendo sobre diferentes leyes californianas y distintas cuestiones, como los derechos LGTB en este Estado o el empoderamiento de los jóvenes en sus comunidades.

¡Os mantendré informados!

3 comentarios · Escribe aquí tu comentario

  1. Dice ser cuesta mucho cambiarnos por dentro pero se puede

    Cambiar el mundo parece ser tarea más senclla ahora que estamos más interconectados y somo smás conocedores de otras realidades humanas, de otras culturas, de otros modos de pensar.
    Es muy difícil eliminar vestigios de tradiciones depensamiento que se hunden entre miedos en las infancias en sociedades donde no se ha dado la oportunidad de escuchar a quienes piensan diferente a como lo hace el resto, o mejor dicho, como tiene que hacer el resto, o simplemente como no es capaz de hacer el resto. La imposibilidad de pensar distitno también está atada a la falta de gimnasia del espíritu crítico. Puede conseguirse ejercitarlo contemplanod otras realidades, incluso dejando escapar la imaginación ante un suceso que despierta en un momento determinado en el cerebro como injusto o falto de rigor razonado. Pero es muy complicado que la gente cambie, y menos aún cuando existen intereses encontrados. El ser humano puede hundir todo un habitat, incluso un país, si existe una promesa que alimente su vanidad. Lasinrazón, el miedo al futuro, la acumulación de riquezas sin sentido… No todxs somos iguales. No todxs damos el mismo sentido a la existencia. El bienestar general puede quedar destrozado si se pone en manos de quienes no perciben la existencia de un modo generoso. El poder es necesario,la riqueza también, los bancos, las empresas, los trabajadores. Pero cuando el mundo cambia todo cambia con él. Quien vence es quien se adapta. Enrocarse en una idea por propio interés o por la enfermiza creencia de que la ideología que se defiende ha de ser la legítima, la perfecta… eso no acabará nunca bien. Si buscamos un mundo más justo habrá de nacer de diálogos entre distintos, por muy diferentes que sean, porqeu si no se consigue unir criterios y buscar soluciones en relación a una nueva concepción del mundo,no se conseguiráa jamás ese mundo justo globalmente. Si no somo scapaces de extraer enseñanzas y acuerdos a partir de experiencias y todo ello untado en deseos de prosperidad, cuanto ma samplia, más enriquecedora, siempre quedará el muro, y no sólo el físico, entre partes del mundo. Se están limando diferencias entre géneros sexuales, auqneu esa diferenciación tal vez se esté quedando desfasada en favor de uan igualdad humana, sin más. Las diferenciaciones excesivas pueden generar movimientos que provoquen resultados contrarios alos que pretendían en un principio. Un himbre, una mujer, sea el género que sea, no han de renegar de su realidad corporal para supuestamente alcanzar un estado mental dignísimo. Me merece el mismo respeto como ser humano una modelo de pasarela que una arquitecta, lo mismo una actriz erótica que una lienciada en física cuántica. Del mismo modo que me lo merece un astronauta, un arquitecto o un actor porno, aunque no lo vea. Las segregaciones, las estigmatizaiones, los malos rollos para con el cuerpo… esa es otra rémora de pensamiento tradicional qu eno pueden crear mundo diferente. Del mismo modo no respeto a quien insulta, a quien veja, a quien muerde antes que hablar, a quien violenta… El vive y deja vivir que tanto cuesta aceptar.
    Hay mucha tradición de pensamiento que anula el aprecio a la ventaja de reconocer la realidad humana tal y como es y no camuflarla ni deformarla atendiendo al medio de turno al que le interese marginarla. Un mundo de señalados por su cuerpo no puede aspirar a ser mentalmente sano, ni libre, ni justo. Cuerpo y mente, un sólo ser. Si se despoja de la parte corporal se crean las diferencias; las distancias se incrementan. Hombre y mujer, lesbianas, homosexuales, géneros nuevos… Somos humanxs. Hay hombres que ayudan más a las mujeres que alguans mujeres que dicen defender a las mujeres, del mismo modo que hay mujeres que defienden más a lso hombres que los hombres que dicen ser hombres por pensar a lo besia como siempre para tener razón. Me pongo a pensar y no paro y al final no sabré lo que he expresado, así que mejor me bajo del carro ya.
    Hace falta gente inteligente para cambiar el mundo y si lo eres como muy bien lo pareces, pues ya estamos en buenas manos. Ojalá en esos coloquios de intercambio y penamiento ejerciendo comprension y espíritu crítico, pueda avanzarse de manera enriquecedora lo más globalmente posible. Es bueno ver qeu aceptan ideas propias y también lo es ceder en las nuestras si entendemos, después de razonarlas en contraste con otras, que andan equivocadas.
    Que va,así no es fundamento. ¿Ves?, esto son divagaciones, auqneu vayan de muy buena fe, pero si no hay concreciones en leyes y modelos educacionales en favor de eso scambios, poca cosa han de medrar de pensamientos así.
    Mucha suerte y que con tus compis logres encontrar llaves que abran campos donde vibren mejores humanos deseos.

    30 enero 2018 | 4:43 pm

  2. Dice ser AZULMARINOCASINEGRO

    Buah……. otra vez las mujeres en el centro de todo. La inmigración en EEUU lo sufren principalmente los hombres que son los que tienen la obligación (en general) de llevar dinero a sus hogares.

    30 enero 2018 | 5:23 pm

  3. Dice ser Terelu

    Estoy hecha un mar de dudas: qué es el «empoderamiento» (aparte de una mala traducción literal)? Qué opina la multiculturalidad islámica acerca de los derechos LGTB? Por qué se borran comentarios críticos de los blogs?

    31 enero 2018 | 10:11 pm

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