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¿Por qué los números de la ruleta tienen esa disposición?

En las madrugadas televisivas de los últimos meses han proliferado los espacios dedicados al juego de la ruleta, en el que los espectadores, a través de una aplicación online, pueden jugar y apostar al mismo tiempo que un presentador va dando instrucciones de cómo jugar y cuáles han sido los números en los que la bolita ha caído.

La mayoría de esas ruletas son virtuales, siendo el propio programa web el que decide qué número sale en cada apuesta. A pesar de ser accionadas automáticamente, todos esos espacios televisivos y webs que lo gestionan suelen estar adscritos al programa ‘juego seguro’ del Ministerio de Industria, por lo que no cabe tener ninguna duda sobre la fiabilidad.

Pero si nos fijamos bien en la composición de la rueda de la ruleta, todas llevan dispuestos los números en el mismo orden aleatorio y de forma homologada.

Esa disposición no es caprichosa, sino que fue creada y diseñada de ese modo por el mismísimo Blaise Pascal, uno de los hombres que más aportó al campo de las ciencias y las humanidades, gracias a ser uno de los personajes que más disciplinas abarcó (matemáticas, filosofía, física, literatura, teología…).

En 1645, Pascal en su empeño de dar con una máquina de movimiento continuo acabó inventando la ruleta, algo que acabaría siendo el juego de azar y de apuestas más equilibrado que por entonces existía.

Decidió disponer los números de tal modo que tuviesen las mismas posibilidades de salir los altos y/o bajos en un mismo porcentaje de probabilidades y cuyas ganancias resultasen totalmente beneficiosas para el jugador.

De ahí que dicha disposición numérica, tanto en el tapete de juego como en la rueda giratoria, estén colocados de manera diferente y los números adyacentes de uno u otro quedan separados, teniendo que realizar diferentes apuestas en caso de querer apostar a un grupo de números que se encuentren juntos en la rueda.

Conocido es el caso de que, debido a algún pequeño y milimétrico desvío o mal calibrado de la mesa/ruleta puede existir la probabilidad de que la bola tenga tendencia a caer en un grupo determinado de números con más posibilidad que en otros (un hecho que utilizó Gonzalo García-Pelayo, quien utilizó esas pequeñas imperfecciones de fabricación para diseñar un perfecto método para ganar una buena millonada de dinero).

Pero la ruleta inventada por Blaise Pascal sólo tenía los números comprendidos entre el 1 y el 36, por lo que el juego era meramente de distracción, sin una ‘banca’ que tuviese un número con el que, en caso de salir, embolsarse la mitad del dinero de las apuestas sencillas realizadas a rojo/negro, par/impar, pasa/falta, al no considerarse el cero dentro de ninguna de estas categorías.

La aparición del número 0 llegó en 1843 de la mano de los hermanos Françoise y Louis Branc, tras legalizarse el juego en el Principado de Mónaco y poner éstos a disposición del Casino de Montecarlo el gran invento creado dos siglos atrás por Pascal.

Esa nueva disposición en la que hoy en día conocemos como ‘ruleta francesa’ dio la posibilidad de que hubiese un margen superior en las ganancias de la banca.

Con la proliferación del juego en Estados Unidos y sus ciudades casino como Las Vegas (Nevada) o Atlantic City (New Jersey) se añadió el ‘doble cero’ (00) a la ‘ruleta americana’, dando aun más probabilidades de ganar a la banca.

 

A raíz de una consulta realizada vía email por José Luis Mayor

Fuente de las imágenes: cain2143 y discopalace vía photopin cc