Se conoce como hostilidad al conflicto (ya sea armado o por enemistad) que pude producirse entre países, grupos, personas, pueblos…
El término procede del vocablo ‘hostil’ (contrario, enemigo) y éste llegó al castellano desde el latín ‘hostīlis’ formado por el sufijo –ilis y el vocablo ‘hostis’ el cual se utilizaba en la Antigua Roma para designar al ‘enemigo extranjero’.
Cuando un ejército declaraba la guerra a un país extranjero automáticamente se convertía en un hostis (también usado para señalar al enemigo público del pueblo e incluso de aquel que traicionaba a su propia nación).
Con el tiempo, los términos hostil u hostilidad pasaron a designar cualquier tipo de enemistad, desacuerdo o agresión ya fuese con un foráneo o compatriota.
Lee y descubre el curioso origen de otras conocidas palabras y expresiones
Fuente de consulta: etimologias.dechile / RAE / Etimologías Grecolatinas de Jorge Barragán
Fuente de la imagen: pixabay
Ya que estamos… no vendrá también de ahí el término «hostia», ¿verdad?
03 agosto 2018 | 9:20
@Wright ‘hostilidad’ (hostil) y ‘hostia’ son términos que tienen diferentes procedencias etimológicas y, por tanto, no están conectadas.
En breve publicaré un post sobre el origen del término hostia y sus diferentes significados: como oblea que se ofrece para comulgar en la misa, como bofetada y como interjección (además de aclarar si es correcto escribirla sin hache)
Un cordial saludo
03 agosto 2018 | 9:32
Ya, pero se uno le dice a otro: «Oye, hostil, si no paras te voy a dar un par de hostias» seguro que es un asturiano que se ha peleado o con un cantabro, o un gallego o un leonés. jajajaja😂😂😂😂😂😂😂
03 agosto 2018 | 10:41