El hombre que mató a Lucky Luke

Por Pablo Lozano es director del Festival Internacional de Cómic Europeo (en Facebook,  Twitter e Instagram) y colaborador especializado en cómic histórico en XX Siglos. Le podéis seguir en Twitter, Facebook e Instagram, y escuchar en el podcast de cómic La buhardilla de Venger.

En el último programa de La Buhardilla de Venger estuvimos comentando largo y tendido el cómic El hombre que mató a Lucky Luke. La verdad es que disfrutamos tanto hablando de él que pensé que estaría muy bien dedicarle un artículo en nuestro habitual apartado de personajes clásicos de la sección en XX Siglos. Son ya un par de artículos los que le hemos dedicado al conocido vaquero del cómic franco-belga. En anteriores ocasiones hablamos sobre sus duros comienzos en las primeras aventuras y también del último álbum aparecido en 2021, Un cowboy entre algodones.

Mi debilidad hacia este personaje hace que de vez en cuando le dedique unas palabras. Pero de cara a este verano también volverán personajes como Astérix, Blueberry o Corto Maltés. Ya estoy preparando algunas sorpresitas vinculadas con ellos.

Por el momento os voy a presentar el primer número de la serie  creada por el autor parisino Matthieu Bonhomme.

Todo empezó con un homenaje

Matthieu Bonhomme es el creador de este álbum que salió publicado en abril de 2016 y con el que el autor quiso rendir un homenaje al personaje de Morris. Todo ello con el beneplácito de la editorial que atesora los derechos del personaje.

El álbum tuvo un éxito muy rápido logrando obtener grandes ventas en el mercado europeo, recibiendo gran cantidad de críticas positivas. Pronto se hizo, entre otros, con el Prix Saint-Michel 2016 como mejor álbum otorgado por la ciudad de Bruselas y en la selección del Festival de Angulema 2017 ganó el premio del público.

La verdad es que no era nada fácil tener que abordar por su 70 cumpleaños a un personaje que todos conocemos y del que ya se habían publicado por aquel entonces 83 aventuras. Pero Matthieu tenía claro que quería ofrecer al público algo diferente, pero sin faltar al espíritu del personaje, cosa que ha logrado conseguir y que ha provocado, incluso, que tenga su propia serie con su firma tanto en los guiones como en el dibujo.

Tal es el éxito conseguido con su particular visión que en el mes de abril apareció un segundo volumen en el mercado franco-belga que sigue la estela de la que hoy estamos comentando. El nombre de la nueva aventura se llama Wanted Lucky Luke y esperamos que ediciones Kraken (actual propietaria de los derechos del cowboy en España) la saque pronto para que podamos disfrutarla.

El hombre que mató a Lucky Luke

Solamente el título ya es todo un reclamo para el público. Te asaltan las preguntas como ¿que Lucky Luke muere?, ¿quién es capaz de acabar con el cowboy más rápido del Oeste?, y ¿cómo?. El gancho desde luego es innegable. El mismo título es ya en si un impacto directo en el orden del cómic europeo. Además, acompañado de una portada sombría y con el fondo de una gran tormenta. Está claro que lo que vamos a encontrar dentro no puede ser bueno.

En contraportada solo encontramos lo siguiente “!He acabado con la leyenda! ¡He matado a Lucky Luke!”. Desde luego eso parece al abrir la primera pagina del cómic y encontrarlo sangrando hundido en el barro y boca abajo a nuestro querido vaquero. En las páginas siguientes nos harán un flash-back para explicarnos como se ha llegado a esta situación.

La historia nos cuenta la llegada de nuestro solitario vaquero a la población de Froggy Town. En ella están teniendo lugar problemas, ya que un indio forajido está asaltando a los viajeros de la zona. En uno de sus últimos asaltos, el forajido ha asaltado una diligencia, matando, incluso, a uno de los cocheros.

Al llegar tan afamado vaquero a la población, los ciudadanos no dudan en pedirle ayuda para acabar y detener de una vez por todas al misterioso asaltante. Pero parece que el sheriff de la ciudad y sus hermanos no están muy por la labor.

Con este argumento Bonhonme nos presenta la historia más seria y madura que por el momento conozco del personaje. Con un estilo narrativo y un dibujo actualizados y cercano a nuestras tendencias del siglo XXI, un Lucky Luke más humano que, incluso, pierde los papeles por culpa del tabaco, entre otras cosas.

Efectivamente, el vaquero de Bonhonme fuma. Vicio que en el año 1983 Morris hizo desaparecer del personaje y que la Organización Mundial de la Salud quiso reconocer con un premio al propio autor. Que un icono de la viñeta dejase de fumar era un gran ejemplo para las nuevas generaciones. Lo mismo ocurrió en muchos otros personajes como Lobezno, Nick Furia o La Cosa de Los 4 Fantásticos. Este álbum que se sitúa entre las historias de Daisy Town y Dedos mágicos aparecidas en 1983 coincide con el momento en el que nuestro personaje deja la nicotina.

También el cómic está plagado a nivel visual de claras referencias cinematográficas de películas como El hombre que mató a Liberty Valance (1962) o Sin perdón (1992).

Lo que ya no está presente es la capacidad de hablar de su famoso caballo Jolly Jumper o el fiel perro Rantanplán; tampoco aparecen los hermanos Dalton; o referencias a otras historias del personaje, lo cual convierte el cómic en algo atemporal.

Aun así la trama nos atrapa rápidamente en su búsqueda del indio forajido y los pormenores de Froggy Town.

Doc Holliday

Uno de los personajes que hace aparición en esta historia es Doc Wednesday. Un claro homenaje por parte del autor a la figura histórica de Doc Holliday. No queda lugar a dudas por su presentación, carácter y enfermedad.

John Henry Holliday fue un tahúr, pistolero y dentista del Viejo Oeste que pasaría a la historia como Doc Holliday.

A Holliday le diagnosticaron una tuberculosis desde temprana edad probablemente asumida por herencia materna. El dentista atendía a sus pacientes parece ser con una tos inquietante que le reducía cada vez más la clientela. Eso le llevó cada vez más al saloon que a su consulta, donde se percató que las apuestas eran una fuente de ingresos mucho más rentable que la extracción de muelas cariadas.

En su ascendente carrera fuera de la ley se granjeó una reputación de peligroso pistolero ambidiestro. Finalmente trabó amistad con el legendario sheriff Wyatt Earp, con quien compartiría tiroteo en el famoso O.K. Corral, celebérrimo enfrentamiento que ha sido llevado a la gran pantalla en numerosas ocasiones y que podemos disfrutar en películas como Wyatt Earp (1994) dirigida por Lawrence Kasdan y Tombstone (1993), de George P. Cosmatos.

Refugiado en Colorado Springs para huir de las condenas estatales que le perseguían, Doc Holliday intentó paliar con alcohol y láudano la tuberculosis. Doc fue irreversiblemente desarmado por la enfermedad, en su cama y con las botas quitadas, el único enemigo que le venció en duelo.

Como siempre no podían faltar los guiños históricos en las aventuras de nuestro vaquero.

Por todo lo anteriormente mencionado nos encontramos ante un cómic imprescindible para los seguidores de Lucky Luke. Mattieu Bonhomme ha cumplido desde mi punto de vista y con creces el objetivo marcado. No debemos de perderle la pista ya que está claro que lo que comenzó como un homenaje se va a convertir en una serie regular.

Por mi parte estoy deseando leer el segundo álbum, del que ya os hablé cuando se publicó en Francia.

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1 comentario

  1. Adoro este album. Muchas muchas gracias por el artículo.

    29 junio 2021 | 12:03

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