La expedición Balmis, la vacuna de la viruela y el por qué debería haber más ciencia en la novela histórica

Corbeta María Pita

Corbeta María Pita

El 30 de noviembre de 1803 —tal día como hoy, hace 212 años— zarpaba del puerto de La Coruña una corbeta llamada María Pita hacia el continente americano. Enviados por el rey Carlos VI, los médicos Francisco Javier Balmis y José Salvany y la rectora del orfanato de ciudad gallega, Isabel Zendal, portaban, gracias a 22 niños anónimos, la vacuna de la viruela a América y las Filipinas. Aquella expedición se conoció como Real Expedición Filantrópica de la Vacuna o Expedición Balmis. Algunos no han dudado en calificar esa odisea como la mayor hazaña sanitaria de la Historia.

Como suele pasar con la Historia y la ficción histórica, las guerras, los procesos políticos y económicos suelen eclipsar, injustamente, a las grandes aventuras científicas, artísticas o sociales. Por fortuna eso parece estar cambiando. ¿Por qué no deberían tener más interés literario esos hechos que cambiaron realmente la faz de la Historia y la humanidad? La viruela, en el siglo XVIII, era una enfermedad ciertamente letal que causaba miles de muertes al año. A día de hoy, gracias a ese proceso que se inició a comienzo del siglo XIX, la Organización Mundial de la Salud (OMS) afirma que esta enfermedad fue completamente erradicada en 1980.

Mapa del viaje de la vacuna de la viruela (WIKIPEDIA)

Mapa del viaje de la vacuna de la viruela (WIKIPEDIA)

Javier Moro, periodista y escritor, autor de grandes éxitos como Pasión India (Seix Barral, 2005), El sari Rojo (Seix Barral, 2008) o el merecedor del Premio Planeta El imperio eres tú (Planeta, 2011), decidió este año lanzar una novela que narraba esa absoluta hazaña con A flor de piel (Seix Barral, 2015).

 Busto de Francisco Javier Balmis en la Facultad de Medicina de la UMH en San Juan de Alicante.

Busto de Francisco Javier Balmis en la Facultad de Medicina de la UMH en San Juan de Alicante (Wikipedia).

Hay en la novela de Moro un intento justiciero de rescatar a Balmis y, sobre todo, a Isabel Zendal del olvido con el que en este país solemos premiar a nuestros héroes. La Zendal de A flor de piel, es una heroína con la que es fácil, para el lector, empatizar. Balmis, para mí el gran acierto del novelista, es un personaje obsesionado con la ciencia y la gloria, que llega a lo mezquino. Demuestra la grandeza de lo que realizó, pero también su falta de humanidad, de sensibilidad, su frialdad ¿Habría tenido éxito si él hubiera sido mejor persona? parece preguntarse la historia. La novela se lee con gusto y sus personajes están bien trazados, aunque la vena periodística del autor parezca empujarle a dar muchos datos y explicaciones sobre los hechos de la expedición, lastrando, en ocasiones, la narración.

Esa pareja de personajes históricos (el tándem Balmis-Zendal) muestra los sacrificios de los auténticos héroes, la batalla entre la humanidad y la ciencia; su titánica lucha contra la estupidez, la corrupción y la estrechez de miras que tuvieron que librar para salvar al mundo de una enfermedad letal.

Hoy creo que es un buen día para recordar a esos Balmis, Zendal, Salvany, a esos niños anónimos que portaron el virus de la viruela de las vacas descubierto por Edward Jenner como vacuna y el servicio que nos hicieron. Y también para aplaudir a Javier Moro y pedir que la ficción histórica dedique más espacio a esos héroes de las ciencias, la medicina y el arte que transformaron y transforman nuestro mundo. El mundo científico, técnico y artístico también es Historia y es, como podemos observar en nuestro tecnológico presente es el auténtico motor de nuestra especie. ¿Se necesitan más alicientes para la ficción?

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8 comentarios

  1. Dice ser Soroski

    Ese tema para una novela no es nuevo, pues ya en 2010 Luis Miguel Ariza publicó una novela basada en la expedición de Balmis, cuyo título es «LOS HIJOS DEL CIELO». ¿Por qué no se cita este antecedente?

    30 noviembre 2015 | 07:44

  2. xx-siglos

    Hola Soroski. No la cito porque desconocía la existencia de la novela que citas. Gracias a ti y a tu comentario por recordarla¡ Por lo que veo ‘Los hijos del cielo’ está más centrada en la segunda parte de la expedición de Balmis, la asiática, así que pueden ser dos lecturas complementarias, ¿verdad? Gracias por tu aporte¡

    30 noviembre 2015 | 07:51

  3. Dice ser armandofontan

    La misma historia está novelada con anterioridad por Almudena Grandes en su obra Angeles Custodios.

    30 noviembre 2015 | 09:24

  4. xx-siglos

    Gracias por el aporte, armandofontan. Ángeles custodios, sí la conocía, pero está escrita por Almudena de Arteaga, no de Grandes. No la he leído, ¿opiniones?

    30 noviembre 2015 | 09:27

  5. Dice ser Nemigo

    hace años se intentó hacer una película sobre la historia que es espeluznante. Alguien se imagina lo que es un viaje de meses cruzando el mar con niños alguno de los cuales tenía cuatro años? y al cargo de todos ellos Isabel, que merece varios monumentos y mejor reconocimiento. Recordemos que en 1950 la ONU la reconoció como la primera enfermera de la historia de la humanidad en misión internacional. Algún día sabremos más de su vida y la de los huérfanos que quedaron en Puebla, México.

    30 noviembre 2015 | 11:08

  6. Dice ser jmlb

    Angeles Custodios de Almudena de Arteaga es una novela impresionante que relata con mucha delicadeza y gran maestría esta epopeya.

    Está publicada en 2010 y por lo tanto es muy anterior a ésta que comentas.

    De todas formas es importante que se retome este tema con frecuencia para que seamos conscientes de lo que supone esta gran aventura y esfuerzo científico, aunque desde el punto de vista actual podamos tener algún reparo ético por utilizar a niños huérfanos como laboratorios o conejillos de indias. En aquella época no se hubiera podido hacer de otra manera.

    30 noviembre 2015 | 11:35

  7. Dice ser David Ramírez Cossío

    A mi juicio, una de las Expediciones que trajo Salud a México y a toda la América que eran azotados por una de las mas feas y mortíferas enfermedades del hombre, misma que fué derrotada por el hombre.¡ Mis mejores pensamientos para Balmis, la rectora Isabel Cendala Gomez y los niños héroes españoles !

    01 diciembre 2015 | 23:07

  8. Dice ser Nicasio Cayero

    Es raro encontrar una novela histórica que una épica y ciencia. Lo normal es encontrar solo lo primero.
    Sin embargo, el siglo XVIII español es proíifico en personajes con ambas cualidades, que se merecen ser protagonistas de su novela histórica. Pienso en Jorge Juan, marino, cieníifico e ingeniero naval, que combatió a las ordenes del legendario Blas de Lezo(«medio hombre»), que estuvo con Antonio de Ulloa, en la expedición francesa que midió un grado del meridiano en Quito, de la cual se dedujo que La Tierra no era una esfera perfecta, sino que estaba achatada por lo polos. Con una faceta de lo que hoy llamriamos espionaje industrial, para la construcción naval en Inglaterra. En fin, colaborador y amigo del Marques de la Ensenada, otra figura que , por si sola, se merece su novela histórica.
    Toda una cura para la gente que en la redes sociales gusta de repetir una y otra vez aquello de «me avegüenzo de ser español»

    03 diciembre 2015 | 09:10

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