«Crono… Crono… ¡Buenos días, Crono!», con esas palabras se abren las puertas de un RPG legendario, con esas palabras comienza una de las aventuras más emocionantes de la historia de los videojuegos.
Chrono Trigger se convirtió en uno de los principales referentes del género, en uno de los títulos más memorables de la Super Nintendo incluso en Europa, donde nunca vio la luz.
Recuerdo que yo pude jugarlo gracias a una pequeña tienda especializada de mi barrio en la que siempre había valiosos cartuchos de importación. Chrono Trigger era uno de ellos. Con el juego por un lado y uno de aquellos adaptadores en los que había que insertar un juego PAL (para que funcionase el americano) por otro, me dispuse a probar el que se iba a convertir en uno de mis videojuegos favoritos de todos los tiempos.
Todo en este RPG resultaba admirable, desde los gráficos hasta el argumento, el dinámico sistema de combates por turnos o los espectaculares ataques combinados. No se podía esperar menos de un trío de genios como Hironobu Sakaguchi, Akira Toriyama y Nobuo Uematsu.
Sakaguchi ideó una apasionante aventura de viajes en el tiempo, con múltiples finales, gran variedad de situaciones y momentos emotivos como pocos. Toriyama se encargó del diseño de una serie de fantásticos y carismáticos personajes: Crono, Marle, Lucca, Robo, Ayla, Frog y el genial Magus. Y Uematsu puso la guinda al pastel con una soberbia banda sonora de temas épicos y melancólicos.
Este RPG de Squaresoft se ha convertido en una reliquia de tal calibre que una copia precintada del mismo ha llegado a venderse en eBay por más de 800 euros.
Ahora, para los que no se pueden dejar esa pasta en eBay ni lo jugaron de importación, ni en emuladores, ni en el remake que se lanzó hace años para la PlayStation original, Square Enix ha anunciado que Chrono Trigger renacerá en Nintendo DS.
Habrá que ver qué tipo de cambios introducen. Por mi parte, casi prefiero que lo dejen tal cual era en SNES, con las secuencias animadas de PS como mucho. Chrono Trigger ya es redondo, espero que no lo mancillen intentando redondearlo aún más.