Hace ya algún tiempo escribí un pequeño articulillo sobre la contratación de personajes famosos para anunciar consolas y videojuegos. David Hasselhoff promocionando, con mucho sentido del humor, el Red Alert 3; Kobe Bryant, Alex Rodriguez, Michael Phelps y Tony Hawk parodiando a Tom Cruise en la película Risky Business para anunciar el Guitar Hero World Tour; Heidi Klum haciendo lo mismo en plan sexy; Jean-Claude Van Damme, Mr. T y Willy Toledo, entre otros, promocionando World of Warcraft; Estopa, Nicole Kidman, Amparo Baró y Javier Cámara con la Nintendo DS…
Está claro que los famosos tienen un gran tirón a la hora de anunciar videojuegos, sobre todo en estos tiempos en los que el ocio interactivo ya ha dejado de ser una actividad marginal y llega a todo el mundo. En cuanto pueden, las compañías utilizan caras conocidas para hacer más populares sus productos, no sólo en anuncios televisivos sino en presentaciones o dentro de los mismo juegos.
Hace sólo unos días, Jaime Cantizano y la ex miss España Elisabeth Reyes hacían de anfitriones para el Active Personal Trainer de EA. Casos como este hay miles, el de Carmen Electra y Manel Fuentes en la presentación de Halo 3, por poner otro ejemplo. En cuanto a la incorporación de personajes famosos en los videojuegos, los ejemplos también son cuantiosos: Jean Reno en Onimusha 3, Vin Diesel en The Wheelman, Chow Yun-Fat en Stranglehold… y multitud de deportistas en los juegos de fútbol o tenis, donde además suelen adornar la carátula.
El caso es que acabo de descubrir una campaña publicitaria muy curiosa de Los Sims 3 que se aprovecha del tirón de una cara conocida para aparecer en los medios. La celebridad en cuestión es Susan Boyle, el último fenómeno televisivo de Gran Bretaña, una escocesa de 47 años que sorprendió a medio mundo con una voz prodigiosa que nadie esperaba oír en una persona de aspecto tan desaliñado.
En el vídeo, Electronic Arts covierte a Susan Boyle, como ya lo hizo con la Oreja de Van Gogh hace tiempo, en un Sim. Aplaudida y admirada por sus vecinos, la cantante recibe incluso una llamada del presidente de los EE UU, Barack Obama, al que en la vida real le ha rechazado una invitación.
Y hasta aquí la curiosidad del sábado… ¡Que ustedes tengan un muy buen fin de semana!