Veinte Segundos Veinte Segundos

El big data del alma

Zizek libro

Zizek es un semicrack porque intenta contar chistes malos, que son mucho más difíciles que los buenos (los buenos hace años que desaparecieron, sería un buen tema saber por qué o a dónde fueron: el objeto o género «chiste» voló. Pero queda el submeme impagable «chiste malo», que es mucho mejor que el bueno porque el bueno se extinguió, etc).

Zizek ha sacado libro —Hegel y el cerebro conectado— y bombea entrevistas, aquí una en Clarín, que es top dejá vu puesto que… al final ves que ya la habías leído/olvidado pues ya salió hace días en La Vanguardia, lo que no deja de ser un chiste malo zizekiano, un matrix reloaded que encaja con sus delirios. Entre Zizek y Houellebecq su majestad escoja.

Aquí hay un resumen del pensamiento de Zizek en diez puntos.

Zizek siempre trae algo del mundo, se mete, rebusca, incluso piensa, si es posible. Lacan de uñans. Chiste peor que malo. El que mejores chistes malos hacía era Eloy, fallecido hace pocos días (y no asumido), Eloy Fernández Clemente: como Zizek, gran lector de cultura popular y de todas las artes, Eloy, san Eluá.

Ay.

Expulsado del concurso de chistes malos por presentar uno demasiado malo.

Los chistes –también los buenos, cuando los hubo (o quizá nunca los hubo)–, combaten o al menos hacen llevaderas las dictaduras, los poderes omnípotens, las plenipotencias.

Si no es Zizek que alguien tenga y ponga una idea, alguna espiral, aire, energía barata sencilla… (ayer leí lo del hidrógeno, madre mía que lío), a ver.

La ciencia lúgubre.

A lo mejor el gob podría aprender algo del anuncio de fuga de Ferrovial. Aprender algo o sacar algo: los mismos votos que entran por un lado salen por otro.

Zizek y los chips de Elon Musk insertados en el brain: nos quieren chupar la poca info que nos queda. ¿Queda algo que no sepan?

Las gallinas ponen motes a sus cuidadores (De una entrevista de hace unos meses).

He traído el guión largo, la raya: – )

A ver si dura.

–– – –

 

Los comentarios están cerrados.