Ataque de un yihadista fanático en Algeciras, sacristán muerto a machetazos. Horror.
La novela de Houelebecq «Sumision». La entrevista de 45 páginas de Houellebecq con Michel Onfray hizo que se enfadara la jerarquía islámica de Francia, ojo, y que demandaran al escritor por dos párrafos.
Houellebecq mantuvo una reunión con el jefe de la mezquita de París y va a remodelar esos párrafos. Podrían matarlo por esa licencia. Podrían decretar una fatua o fetua –orden universal de asesinato– como a Salman Rushdie, así que…
Todo lo que ocurre le da la razón al escritor, que sin embargo, y por eso mismo, con el miedo razonable a que lo maten, ha decidido parlamentar, rectificar.
Charlie Hebdo en cada casa.
El sacristán ha muerto. Hay heridos.
Yasin, el atacante, estaba pendiente de expulsión.
País colapsado…
El caso de las mujeres que han denunciado malos tratos y que no hay poli suficiente para protegerlas ni para seguir a los presuntos ni para ponerles pulseras, el caso de la sanidad desbordada, el caso de las residencias de ancianos sin instituciones que controle el negocio a costa de la dignidad y de la vida, el caso de la seguridad social colapsada por falta de personal que bloquea la vida de decenas de miles de personas…
Si sanidad, seg social, judicial, seguridad… no funcionan por falta de gente y quizá de medios el país se bloquea. Boquea.