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«El abogado del Lincoln»: Tramas apretadas personajes huecos

Alicientes de la devorable serie de Netflix El abogado del Lincoln: tramas secundarias, enigmas y misterios apilados, personajes, familia, densidad… El título es pretexto tonto, por poner algo. Las tramas y los enigmas desembocan en embrollos, se solucionan más o menos. Es difícil.

El actor, Manuel García Rulfo, me recuerda a veces en gestos y posturas a Rock Hudson, una cierta blandura de huesos, casi bondad, una presencia borrosa, al filo del no ser, muy adecuada a la serie. El carácter del protagonista, si lo tuviera, vendría dado por el coche que usa, por el forzado recuerdo de su padre… Nada aguanta una mirada… excepto el propio hastío mortal, que encaja como funda de muela en este culebrón.

El abogado es didáctico/pelmazo, va explicando a su choferesa y a los telespectadores los casos y lo que ha de hacer un defensor.

Las mujeres, las dos ex, la hija adolescente, más madura que los padres, todo con guiones forzados, tópicos, la choferesa, en desintoxicación aparente, como el propio abogado; los polis buenos y los polis corruptos, todos los elementos de la educación sentimental obligatoria del poder blando de USA/Hollywood y las series de las teles. Y está ok. Se ve bien, te tragas capítulos. Hasta los Ángeles del Infierno imitación salen un poco. (La ref es El inocente, 2011, y su serie). Funciona.

Lasegunda ex mujer es ayudante del fiscal. La hija juega al fútbol. Cromos y momentos superfluos, ni siquiera suspense, solo sustos y subtramas.

Se pasan buenos ratos sin pensar en nada, las tramas se ofuscan unas a otras y obligan al olvido de los propios intramundos, que es de lo que se trata. No es Chandler, ni Bogart, ni siquiera LA Confidential… no tiene las mismas luces… los paisajes urbanos de recurso aburren, siempre el mismo, cientos de veces, dos edificios anodinos.

Le falta grandeza, conflicto interior: se plantea ya como subproducto de relleno barato, sin fotografía, sin héroes, una rutina industrial de ir y venir, como a mala gana. Aun así, es el mérito del largo oficio, funciona y ayuda a pasar el tiempo ya muerto sin remedio. El tiempo ido en que cualquier cosa te consuela.

 

Para des-compensar, series con muertos que vuelven y bisontes o búfalos que regresan y un agujero redondo perdido en el campo, en medio del pasto (un agujero que va y viene)… Fuera de rango, en Amazon Prime, tipo Lost comprimida, pero en el oeste.

 

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