Dos fallos no se perdonan a los servicios secretos: que no se enteren de las conjuras de los enemigos y que les pillen espiando.
Suponiendo que haya servicios secretos. Replay Perote, Amedo, Villarejo… la poli patriótica de Fdez Díaz / Rajoy.
No es fácil saber algo o nada, tampoco conviene intentarlo. Quizá nos gobierna Marruecos por whatsapp. (A fin de cuentas Marruecos es USA e Israel, patria del NSO Group que incubó el programilla Pegasus).
Dos fallos no se perdonan a unos servicios secretos…
Los dos han pasado aquí (podría ser una forma retorcida de demostrar que en efecto tenemos servicio(s) secreto(s)).
Pero la life sigue y casi todo está available.
El gob esp sanchero se relame sus rasguños, embarulla el caso para tapar otros más graves o viceversa. Sus enemigos, casi todos, creen que lo tienen pillado por fin, a Sx: esta vez sí, acorralado. Pero él siempre se escabulle.
¿Por dónde escapará ahora?
Cuando le cercan, él ya es otro. Y está en otra parte, o en ninguna. La velocidad de Sx es cosa de chamanes. Tal vez Javier Bardem en Perdita Durango.
Saoko papi saoko.
Lo anterior nefasto fue la carta que hizo pública Marruecos y el lío que se armó, y que colea, con Argelia, bla bla. El cambio de bando rápido, ya olvidado. Lo de Ghali, el del Polisario, reparado en Logroño. (El sanchazgo incurre en estos vuelos secretos –¿de servicios secretos?–, como el que inauguró su mandato, la vicepresi de Venezuela en Barajas…
A Sx, que es un sobreviviente (o sobremuriente), nada le roza ni le alcanza.
Le hackean el móvil y él sigue en sus secretos de altos vuelos.
Y si le roza algo le da igual, es como esos terminators cuya aleación se recompone mil veces. Y este fenómeno humano o sobrehumanoide, lo que sea, escapa siempre a todas las celadas, incluyendo a las que se tiende él a sí msmo/a.
Es un mutante tan elemental que descoloca a la ciencia, a la cuántica (incipiente en España), a la clásica y hasta a sus propios edecanes, que se saben efímeros. Ha pulverizado ministros y asesores aúlicos.
Nadie está quieto en la corte sancheril. Tiemblan los espías prietas las filas. No pasará nada.
Si no fuera presi del gob (¡de Esp!) sería caso de estudio. Pero al ser cargo máximus solo es caso de derribo y sujeto de múltiples conjuras, como es normal en una democracia ya muy autohackeada y a punto de consolidarse.
Sx se acerca al próximo giro, siempre empuñando el título de aquella peli de Álex de la Iglesia: Acción mutante.
Las encuestas le dan perdedor pero él encarna al hombre de su agónico tiempo, que huye de su sombra y ni ella le alcanza.
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Cirac y el ordenador cuántico: el que lo consiga…