Veinte Segundos Veinte Segundos

El big data del alma

Un 12-S cualquiera

El 12-S, día posterior al 11-S, está agotado de su día anterior. Es tan célebre que apenas le deja espacio para él. Pobre 12-S, que solo tiene efemérides.

Pero durante unas horas el 12-S es un hoy, vive algo, sestea, sonduerme, vibran las cuerdas o lo que sea que sostiene y anima o sufre el universo y sus epilíricos espasmos.

Aquí hay algo… de momento, el leve hoy de suspiros, un domingo de septiembre en el que, con suerte, no pasa nada… de momento. Todo es definitivo provisional.

Mañana si lo hubiera y lo viviéramos podríamos decir a ratos, ayer esto ayer lo otro. Y quizá está siendo un día superbonico dentro de su feliz modestia si no pasa nada.

Las fechas sin nada, los días sin espuma y sin ínfulas, los huecos detrás de los inmensos abismos donde brota siempre el horror.

Por un otro día vacío confundible en el que no pasa nada o incluso menos que nada.

Un apacible domingo

Con su cambio climático

De andar por casa

Los comentarios están cerrados.