Estamos en la semana o década de la «amenaza existencial». Hojeando al azar y la necesidad el NYT surge esteartículo: Francia ve una amenaza existencial en los campus estadounidenses, con este subtítulo: «Destacados políticos e intelectuales dicen que las teorías sociales de Estados Unidos sobre raza, género y poscolonialismo están socavando su sociedad.»
Tras el éxito de Borrell, jefe de la diplomacia europea (si la hubiera), que acuñó la frase hablando de que Rusia ve una amenaza existencial en la democracia, el meme se expande a USA. ¿Borrell es un influencer global o copiapega por ahí?
Borrell está on air porque le han trolleado chez Putin. Pero Putin trollea a todos, es su forma de no ser. Navalny el disidente está en el trullo. Es un sobreviviente del Novichok calzoncillero. Y su encierro cuestiona al propio Putin. Se va a armar un Myanmar.
Macron emite su propia guerra cultural, prohíbe el certificado de virginidad en Francia, defiende sus valores tricoleurs, que ya nadie sabe cuáles son (aparte de los de Amazon), la ilustración sigue abierta, cuestionada por esos supermemes que ya salieron de Francia (postFrancia) y rebotan desde USA.
La palabra «guerras» aplicada a «culturales» no es muy excesiva porque hay víctimas cada día, caídos por la cancelación. Y ante este fenómeno, que es una fórmula extrema para luchar por la supervivencia y el pan, se rebela el macronerío. Todo empezó con Foucault y por ay.
El artículo de Norimitsu Onishi en el NYT repasa todo esto en Francia (más artículos suyos).
«France Sees an Existential Threat From American Campuses
Prominent politicians and intellectuals say social theories from the United States on race, gender and post-colonialism are undermining their society.»
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Las amenazas asistenciales se dan en países donde ha habido alguna vez cierta asistencia, como en España. O sea, países en sentido estricto. Los que no proveen asistencia a sus ciudadanos no son países propiamente dichos: serían estados fallidos, sucedáneos, fingimientos.