Putin ha metido a la cárcel al disidente al que intentó de matar con Novichok. Los militares de Myanmar / Birmania que han dado el golpe son lo peor.
La democracia está débil por todas partes, pero el que la pierde lo pasa fatal. Los países que la limitan o la eliminan son una ruina y una vergüenza para el mundo. Someter a los ciudadanos a una tiranía a estas alturas es horrible.
Las democracias podrían unirse en una entente mundial que pudiera emitir soflamas y panfletos contra la tiranía y el absolutismo.
Una especie de chiste de Gila en el que se repetía «alguien ha matado a alguien». Un organismo simbólico en el que una persona respetada y con autoridad mundial pudiera decir, en nombre de todas las democracias, que no está bien, a estas alturas, gobernar a tiros.
Las democracias, y USA la primera, se comportan mal en muchos aspectos, hacen cosas abominables y cometen errores tremendos que hacen sufrir a la gente en sus países y en muchos otros. Cuanto más poder tienen más gente padece por las arbitrariedades y las razones de estado. Pero… celebran elecciones. Hasta un loco como Trump ha caído. Cuando se habla de la debilidad y el retroceso de la democracia en el mundo hay que mencionar este hito: en Estados Unidos el sistema ha aguantado las embestidas de este chiflado peligrosísimo. Y puede rehacerse.
Todas cometen errores y abusos, pero es lo mejor que tenemos hasta la fecha. Se pueden ir mejorando. Lo que es un retroceso intolerable es que en tantos países un dictador se apodere de todo y actúe sin limitaciones.
Putin y el golpe de Myanmar/Birmania son el último desgarrón del mundo. Hay que combatir esa moda, fortalecer la democracia, mejorarla, en cada ayuntamiento y país, en cada casa. Y se podría forjar un ente mundial para defenderla, aunque solo fuera una especie de Papa laico que dijera que eso no se hace. Como en el chiste de Gila.