La brasa continúa. Una semana más, mientras la OMS, sea lo que sea, no entiende qué pasa en España.
Nadie entiende España y sus regiones, nacionalismos de facto y de iure (privilegios vascos y navarros) que compiten con los simbólicos. IndepSimbol Cat.
Nadie entiende España, y a nadie le interesa desvelar cómo funciona, pues salen enseguida los discos duros de Bárcenas y los EREs del psoe-a, etc.
Aquella exigencia o propuesta de científicos para que se evaluara la respuesta a la pandemia el gob la aplazó sine die. Ni caso.
Lo más aproximado a un método científico o analítico que admite el enigma España es el Corpus Villarejo, cuya jerga van destripando los jueces, académicos, etc.
A los científicos que solicitaron revisión de la respuesta ante el covisimo el ministro los recibirá un día de estos. Hasta puede que les ofrezca un cargo. Eso es lo que no entiende la OMS, sea lo que sea.
¡Si el tipo que enviamos a presidir el FMI era Rato!
El capitalismo de amigotes, la puertagirancia, la corrupción sistémica: demasiado estructural como para caer o ser reformada.
Nadie propone ya una regeneración. Qué risa.
La palabra está desacreditada. Aznar la usó algo hacia el 96. Y luego ya vimos. Pactó con Pujol, como todos, con los nacionalismos.
Ahora estamos en hoy, con el pluripartidísimo caviar troceando el hemiciclo hemipléjico, el 15M en casa.
La casta, expandida, naturalizada. Amigotes al power. Todo esto que veis os daré si me votáis este pge.
Ni la OMS nos entiende.
A ver los fondos UE, los fabulosos euromillonazos que irrigarán el sanchazgo.
Ancha es la Sanchería, rancho texmex en plena era covídea.
Ahora el problema es vox, que crece tanto como mengua el pp, su padrastro o madrastra, que amamantó de mamandurrias esperancistas al líder, experto en abombar el pecholobo. La flatulencia de vox hipertensiona al pp barcenado (ayer lo explicaba Juliana), al que solo le queda un puñado de jueces. Y la Sanchería se los va a quitar.
La Sanchería, ya se irá definiendo poco a poco (es un autodefinido) ya anuncia reformas para refrescar el cgpj, que es como aquellos yogures que se zampaba Arias Cañete.
La OMS no entiende nada porque la corrupción es invisible al turista-consultor, o sea que mantenemos las apariencias para que no nos rebajen las ratios en los rankings, que ya estamos bastante abajo.
La última gran herida al orgullo patrio autohinflaccionado hispano fue la de las agencias de calificación de riesgos, el trío lalalá del dolor, y los hombres de negro aquellos, que tampoco sirvieron para frenar el agio, eran pura fachada, pues el megapufo de Bankia, las preferentes y toda clase de estafas de élite se pudieron hacer sin que los reguladores parpadearan.
En fin, a ver mañana qué inventos trae el presi a su finca, la Sanchería. (Cfrt la peli Comanchería)
Doc:
Este doc: «Cinco propuestas para una mejor absorción de los Fondos Europeos», de Manuel Hidalgo Pérez.