Nadia Calviño tiene razón: sacar ahora la reforma de la reforma de la reforma laboral es un atraso.
La derogación de la derogación.
La vicepresidenta tercera (sic) y ministra de Asuntillos Económicos ha dicho que sacar ahora ese tema es «absurdo y contraproducente».
Pero Sánchez tiene que atender a los socios que le han aupado al sofá presidencial.
Los pobres del PP dicen que el presi no tiene palabra. Vaya noticia. Están superacabados. ¿Es que no tienen dinero para fichar creadores de memes?
Más acabados que el propio Sánchez, más que la reputación del CIS o de cualquier otro organismo colonizado por el sanchazgo. El SEPE no da a basto.
Mama mía mama mía mamma mía que distopía.
Sobresaltos nocturnos en el Congreso. Cosas rarísimas en medio del pandemónium (el pan del infierno).
El presi ha perdido el control, y aun así triunfa. Tal vez aparezca mañana en sus teles a dar la chapa.
Dos horas de chapa y superpaint.
Sánchez aguanta porque baja la curva y aun hay comida en los containers.
Nadia tiene razón porque sabe que la V de la recuperación es ya una L.
—
¿Por qué no cobran muchos sus ERTES?
Parece que el SEPE, como casi todo lo demás, incluyendo la sanidad, ha sido un poco desmantelado en este década terrorífica.
—
Escuchar avance de Mamma mía que distopía: