Veinte Segundos Veinte Segundos

El big data del alma

El subsuelo

El estudio que encontró muestras del virus en las aguas residuales de Valencia y de Murcia alienta el proyecto de usar esa vía para detectar focos de infección.

El gob va a hacer estudios más minuciosos.

De modo que vuelven las cloacas a la vida española. Justo el día que se publica que se va a juzgar a aquel semiolvidado ex comisario Villarejo, que tiene tanta info y tantos bienes y que espió fuera de horas de oficina para tantas entidades.

Villarejo venía de una larga tradición de cloacas del Estado.

En tiempos de Rajoy, tan recientes y tan idos, desde Interior se montaron presuntamente algunas buenas cloacas. Es una tradición.

Desde Watergate, Fouché, Calomarde…

Ahora el gob va a probar una experiencia piloto en Valencia, donde llevan años investigando las aguas residuales y donde han encontrado restos del pernicioso ARN del malvado virus que nos llena la no-vida.

Siempre han sido muy llamativos esos estudios, en tiempos fuimos campeones de Europa de medicamentos en las cloacas. Y de cocaína en los billetes, ya que estamos. Eso, lo de los billetes y la coca, debió de ser antes del CRACK del año 8, que aún colea.

A ver si van a analizar demasiado las cloacas y sale algo inasumible.

Y así van pasando los días y las terribles noches, con tantos muertos que ya no sabemos por cuál llorar porque se nos llena la memoria y el ánimo de conturba. Y los allegados que llevan más de cuarenta días en esas ucis donde los sanitarios sudan bajo capas de batas que no transpiran.

Sudar mientras curan y cuidan es su forma de llorar. Llorar con todo el cuerpo.

Todos estamos en la cloaca, haciendo de tripas corazón, esperando la vacuna o la medicina, y amenizando estos infiernos que ya son la rutina.

Ánimo y adelante.

 

 

Lo del TC alemán de los hombres y mujeres de rojo ha traído cola de novia: Lagarde & De Guindos han respondido que el BCE es independiente. Ya veremos si se puede ser independiente de Alemania. A ver Merkel qué dice. Y la presi simbólica, Ursula van der Leyen.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

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