Veinte Segundos Veinte Segundos

El big data del alma

Sánchez suda sangre

Sánchez ha presentado sus 370 items sudando sangre. Es una impresión. O sudando tinta. Tinta de tienta. Sánchez quiere tentarnos con este pack salvífico. Y doblegar a UP et alii.

Sánchez ordenó apagar el aire acondicionado para dar ya idea de horno y de sufrimiento. Más delgado, como un sauno, con el traje dos tallas más ancho, y sudando a mares de refugiados. Cada ola es un barco lleno de votos.

Sánchez domina los medios oficiales, día y noche bombea sus 370 propuestas de resurrección. Quizá llegan un poco tarde porque el crack anual de agosto ha venido crecido y los datos del mundo, malditos putos datos, van a la contra.

Por si acaso Sánchez ha salido ya en trance de sacrificio, que es lo que nos va a pedir en cuando alcance el moncloato de firme. Ahora está en funciones y después estará en disfunciones.

Sánchez ha salido a rociarnos con sus 370 alivios de luto para los desastres de la década anterior justo cuando arrancan (a lo mejor es un error, insert plegaria) los desastres de hoy.

Sánchez ha salido a rociarnos con sus 370 decretos nonatos como DiCaprio enchufa el lanzallamas a los malvados, nazis o normales, en las buñueladas de Tarantino.

Por eso sudaba tanto en su sermón de la montaña. Ha bajado del Sinaí de Moncloa con las tablas del slideshare para que le invistamos como a un Rajoy que, ay, va a tener que aplicar las austeridades argentinas que acechan.

Hay que confiar en la hipervolatilidad de los tiempos, igual Alemania vuelve a facturar, igual Trump y Xi firman la paz, igual Londres recupera la cordura…

Ya veremos.

Entretanto Sánchez ha salido a licuarse en sudores, puro gasoil para septiembre.

 

______

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Los comentarios están cerrados.