La primera crisis del verano/gobierno es por la tele pública (es un decir). Por lo visto todavía queda alguien que ve la tele. El PP ha convertido TVE en un medio sectario, a mayor gloria del PP. Una especie de boletín interno para afiliados (que no pagan los 20 euros). Una visión partidista, etc. el Informe Semanal era kafkiano total.
Aquel infausto ZP llevó algo de pluralidad a la pública. Ahora, Sánchez, que está merkeleando por las alturas, entrega el juguete a Iglesias, con gran escándalo de la parroquia: es un bandazo notable. Hasta los propios trabajadores del ente se rebotan y se visten de negro (será porque como hay tantos programas de cocina, aprovechan los trajes).
El bandazo puede ser peligroso para la salud. Como esa tele ya solo la ve el público cautivo, cuando le llegue por sorpresa el primer telediario de la era Iglesias van a llevarse un susto de muerte. Hay que avisar antes: «Atención, esta tele ha cambiado de dueño».
El público cautivo del boletín peperil está desprevenido y con estos calores cualquier cambio brusco en la papilla cerebral que insufla el plasma puede provocar afecciones graves físicas y síquicas, que son lo mismo.
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PEW Research 19-junio-2018
Datos en español sobre algunas teles públicas en Europa.
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