Soy humano

Ana Rosa anunciaba que su exclusiva iba a acabar con el procés. Y ha sido justo al revés.

El procés se alimenta de emociones (como explica la jueza Mercè Caso: «A mi madre la quiero y se ha vuelto independentista»).

Así que la captura de los mensajitos lacrimógenos entre Puigdemont y su exconseller ha servido para dar nuevo ímpetu al prófugo… que ya va por la Tercera República Fallida.

Nada más sublime que el héroe caído, en horas bajas. «Sòc humà, proclama Puigdemont tuiteramente: «y hay momentos en los que dudo«.

¡Ooooohhhhh!

Esta sencilla confesión ya reaviva el aparato emocional del indep Cat. El patetismo y el victimismo íntimo, televisados en horario de la máxima Ana Rosa.

¡Si parece un anuncio! Desde luego, si fuera un spot sería genial. (Y lo habría pagado la Generalitat antigua, que aún debe quedar algo de remanente no detectado por los 155 Soray-boys).

¡Soy humano! ¡No soy un robot! ¿Quién no se identificaría con ese maravilloso captcha?

Por lo demás, el Parlament sigue en su tiempo muerto o legislatura zombi gracias a la idea de Torrent.

Todo el System R’78 sigue zombificado por el procés: sin presupuestos, sin leyes, sin nada que hacer… El eTC o Tribunal Constitucional es el único Ente que trabaja cual repartidor de Amazon.

Y la Corona, que está metiendo horas extras a tope para emitir contenidos genuinos, para dar al mundo la sensación de que además de la tabarra tenemos muchas otras cosas que exportar.

Pero el procés siempre resucita.

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(Tal vez continuará… según…)

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La foto, de archivo, muestra a la vicep custodiando el tarro de las esencias del eTC…

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Enlace: Los reporteros que grabaron los mensajes de Puigdemont. Por Eduardo Fernández (El Mundo).

Enlace: Fuera caretas. Por Arcadi Espada (El Mundo).

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