La carrera hacia las elecciones catalanas del 25N

El triángulo de las Bermudas: Corrupción-Recortes-Unión Europea

El llamado Triángulo de las Bermudas se asocia popularmente a la desaparición misteriosa de aviones y barcos. Ha dado pie a muchas suposiciones, a películas, libros, artículos… pero, científicamente, parece que no es tan fiero como se lo pinta. En cualquier caso, se asocia a esa sensación de vértigo de adentrarse en un lugar de dónde puede ser difícil salir.

En las últimas horas de la campaña de las elecciones catalanas se ha vivido también un especial Triángulo de las Bermudas. Por un lado, el vaivén de informaciones relacionadas con los presuntos casos de corrrupción y el borrador de ese informe policial que, a parte de si es o no fantasma, sí que ha generado muchos fantasmas que costará mucho disipar. Artur Mas ha lamentado que haya sido la campaña «más dura y sucia» que ha vivido. Él, que desde que fue investido President siempre ha utilizado mucho la metáfora del «timonel y el barco», ha vivido en sus carnes este primer vértice del particular Triángulo de las Bermudas de las elecciones catalanas.

Independientemente del resultado de este 25-N, la pregunta es si las heridas que se han abierto estos días van a permitir cualquier negociación Generalitat-Estado en el sentido que sean en los próximos meses. Los políticos han demostrado que no se entienden (o que no se quieren entender).

No ha habido ningún día en esta campaña que no haya habido alusiones a los recortes, tanto del Govern como del Gobierno español. Barcelona ha vivido una huelga de metro y de autobús como colofón del periodo electoral, que ya estuvo marcado por las protestas del 14-N. Este es el segundo vértice del Triángulo de las Bermudas de esta campaña.

Y el tercero es la Unión Europea, omnipresente también a lo largo de los discursos de los últimos 15 días. Se puede decir que aún hoy nadie tiene claro si una Catalunya independiente estaría o no dentro de la UE o si el Estado catalán sería mejor o peor para los catalanes. Cada partido dice una cosa diferente e incluso los economistas, aunque parece que hay un mar de fondo que apunta que España saldría peor parada que la propia Catalunya. Y, por si fuera poco, en el último día de la campaña también la Unión Europea ha estado en la palestra por las negociaciones del presupuesto europeo.

Con todo esto, el Triángulo de las Bermudas que parecía solo catalán, con la ecuación Corrupción-Recortes-Unión Europea que ha marcado la campaña electoral, se transforma en otro con tres vértices claros: Catalunya-España-Unión Europea. Los tres se han adentrado en un lugar de dónde va a ser difícil salir.

3 comentarios

  1. Dice ser Mas desastres

    Mas
    «Cataluña ha decidido que quiere hacerse responsable de su futuro» porque está en sus manos ganarlo para siempre, ha asegurado este viernes. Es lo que quieren los pueblos, hasta el español ya lo dices Mas. No los políticos y sus políticas. Cuantos millones para cosas que no son necesarias, la Lengua y todo lo que conlleva. Nación con poder, es el desastre de los desastres de Más. Una familia Catalana como la real. Será una hucha para los políticos menos pero bien pagada. Votar y ver después los desastres puede ser peligroso. Vale Mas lo malo vivido que lo bueno por vivir.

    23 noviembre 2012 | 16:57

  2. Dice ser ANTONIO LARROSA

    Mi voto secretisimo será contra el rompimiento de España a trozos , otro sería si el Señor Más hubiera hecho cosas que me hubierna convencido pues ateniendome al refrán que afirma que …Obras son amores y no buenas razones…. Sus obras no me parecen convincentes en absoluto…

    Clica sobre mi nombre

    23 noviembre 2012 | 16:58

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