El tercer Código sobre el Buen Gobierno de la sociedades cotizadas, cuyo primer borrador público conocimos esta semana, me ha parecido, tras una primera lectura rápida, excelente en su planteamiento, en su concisión y concreción, en su contenido y también por el procedimiento utilizado y por la presención formal. Participé en la elaboración de un documento semejante para la reforma de la televisión pública hace ahora un año y desde aquella experiencia me ha producido envidia la inteligencia y el buen sentido de este documento. !Cuanto mejor hubiera salido aquel con los procedimientos y conceptos de éste!
Es corto (33 páginas en total) y sintético, va al grano, precisa lo que recomienda, su voluntariedad y el compromiso de asumirlo. Las notas aclaratorias son claras y las referencias sólidas. Abre un período de consultas y propuestas y fija plazos de revisión y redacción definitiva.
Quienes han asumido y ejecutado este encargo lo han hecho muy bien, con responsabilidad, con humildad y con mucho criterio. Sin duda que habrá motivos d ediscrepancia y crñitica, algún ligero se lo tomar´ña a chacota sin haberlo leido y escribirá comentarios tan ingeniosos como futiles.
Si este elogio les parece desmesurado y les mueve a ver el detalle les facilito enlace al texto original . Estoy convencido que les puede interesar, aunque les pille de lejos. ¿Se imaginan que pudiera aplicarse a la dirigencia de los partidos políticos y de las entidades sociales y ciudadanas?
Prefiero que se apliquen sobre las empresas cotizadas pues tienen más poder, como también prefiero esperar al cuarto código de buen gobierno pues me da que este tercero se va aplicar tanto como los dos anteriores.
19 enero 2006 | 09:11
Pues como hagan tanto caso a este documento como le hicieron al anterior…
19 enero 2006 | 09:16