Si eres uno de esos suertudos que tienen terraza o balcón, tienes una deuda implícita con la gran mayoría del mundo que vive de puertas y ventanas para adentro: DISFRUTARLA.

 

Y para ello, hoy nos hemos fijado en un post de La Buhardilla que nos invita a experimentar con fantásticas ideas para darle un aire nuevo a este espacio privilegiado: tu propio y exclusivo pedazo de cielo abierto y privado.

Nosotros, además, hemos sumado nuestro pequeño granito de arena al final, con un ejemplo real para sacarle todo el partido hasta al último rayo de Sol (¡y de Luna!).

Apunta, porque hoy vamos a aprender cómo decorar y preparar tu balcón o tu terraza con poco dinero y mucha imaginación:

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1. Coloca estantes para aprovechar el espacio

Probablemente hay mucho sitio desaprovechado, al que puedas sacar el máximo partido a través de muebles óptimos para la organización del espacio.

Las baldas y las estanterías son perfectas para estos lugares. En ellas puedes colocar macetas, objetos decorativos, accesorios para el exterior como iluminación (faroles resistentes a la intemperie o incluso recargables con luz solar).

Además, si no tienes muy claro cómo colocar un estante, en este otro post con vídeo te lo explicamos paso a paso. ¡Verás cuánto espacio ganas y qué poquito tiempo necesitas para ello!
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2. Flower up! Coloca flores

Y mejor aún, si son de temporada. Conseguirás que duren más tiempo y con mejor aspecto.

Piensa que hay multitud de macetas y maceteros muy bonitos en las tiendas en esta época del año, y puedes decorarlos a mano con pintura si tienes don para el dibujo o si sigues patrones de tendencia, como las coloridas calaveras mexicanas.
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Además, puedes ahorrar espacio colocando maceteros en la misma barandilla, que se convertirán en el centro de todas las miradas.
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Apuesta por un modelo espectacular, como este Elho Corsica Flower Bridge Planter, y te convertirás en la envidia cochina de todos los vecinos.
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3. Añade textiles coloridos

¡Y resistentes al Sol! Plantéate qué gama cromática deseas que impere en tu balcón o terraza y apuesta por añadir cojines y colchonetas en sillas y banquetas.

El objetivo: hacer de tu rinconcito exterior un lugar cómodo en el que relajarse al sol con un buen libro o mejor compañía.
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4. Un banco de esquina, tu aliado para fiestas

Los rincones suelen ser los lugares más desaprovechados. Rebélate y multiplica su funcionalidad añadiendo banquitos y rinconeras que te ayuden a agrandar las posibilidades de tu terracita (y los invitados que caben en ella).
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5. La luz: el sueño de una noche de verano

Si durante la noche miras arriba en la ciudad, encontrarás que este año se ha producido el boom de las guirnaldas. Casi todas las terrazas tienen ahora sus tiras de lucecitas, y casi todas están alimentadas por plaquitas solares que recogen la energía directa y económicamente del Sol.

Eso sí, si quieres una iluminación más funcional y práctica que solo estética, haz pruebas para combinar potencias lumínicas y unidades mejor provistas, pues muchos modelos solares no son suficientes aún para iluminar una cena como esperas.
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6. Velas y faroles, un toque vintage

No menosprecies la capacidad para decorar, iluminar, inspirar y romantizar un espacio de unas buenas velas en un farolillo retro.

Además, existe una vasta variedad de velas aromáticas con funciones muy útiles, como la de ahuyentar a los mosquitos y otros insectos de tus reuniones íntimas.

Por cierto, ¿quieres aprender el truco ecológico y económico para ahuyentar a las hormigas?
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7. Un suelo que te ayude a escapar

¿Te imaginas pisando césped, aunque sea artifical? ¿O prefieres unas planchas de madera para darle un toque rústico?

Sea como sea, colocar un material más disfrutable sobre tu viejo piso de terraza es una gran idea, y puede resultar muy ecónomico.

 

EXTRA: Mira cómo transformar tu terraza sin taladrar ni pintar

Como diría Steve Jobs, “oh, and one more thing…”

Vas a alucinar cuando conozcas este proyecto de decoración de terraza de alquiler, que se centró en respectar esas normas estrictas y fastidiosas que suelen conllevar los contratos de renta:

Nada de taladrar / Nada de pintar / Y después… ¡te lo llevas!

¿Qué te parece? ¿Transformamos tu terraza en tu propio Edén particular este verano?