Entradas etiquetadas como ‘proyector’

¿Debería Fernando Torres ver la Eurocopa desde su casa en un buen proyector? ¿Deberías tú? ¿Pues a qué esperas?

No sé, no sé… Holanda está muy fuerte, el partido contra China me dejó algo frío y, no quiero reparar donde no me llaman, pero ¿Torres? ¿EN SERIO, VICENTE? Está bien, aun así seré el primero en ponerme “la roja”, e invitar a mi pandilla a ver todos los partidos con mi nuevo proyector. No sé cómo describir qué gustazo es ver cine, motos, baloncesto y a Iniesta de mi vida like a boss, en un buen pantallón.

Por eso os recomiendo que también vosotros disfrutéis de este equipamiento que será la envidia de vuestros amiguetes.

Vamos por pasos:

1. Lo primero es decidir dónde colocarás el equipo (pantalla y proyector) y realizar todas las medidas oportunas del espacio de que dispones (diagonal de la pantalla, distancia entre el proyector y la superficie de proyección, altura, etc). Mejor, dibuja un buen plano para no perder detalle y llévatelo al establecimiento donde lo vayas a comprar.

2. Compra el proyector y la pantalla juntos. Así te asegurarás de que son completamente compatibles en formato y no te llevarás sorpresas desagradables en casa (como que juegue Torres de titular). Asesórate en el establecimiento sobre esto, y también asegúrate de que te llevas todo el cableado necesario. ¿Quieres conectar accesorios extra al proyector como una videoconsola? Pregunta por el cable que necesitarás (HDMI de una calidad decente, no seas rata en este punto pues ese cablecito transporta tu querida imagen y, créeme, no quieres llevarte ninguno de los dos más baratos).

Hazte también con el soporte para el techo (igual: pregunta por su compatibilidad con el proyector que hayas elegido), unos embellecedores para ocultar cables, y pregunta si tienen bolsas llenas con grandes dosis de paciencia.

3. Lo primero es instalar la pantalla de proyección. Normalmente, a menos que optemos por un modelo barato con trípode (¿hemos ganado una Eurocopa y un Mundial para que ahora elijas ese modelo digno de… de… ¿de Alemania?), el cajetín de la pantalla suele ser bastante voluminoso y pesado, por lo que habrás de pedir ayuda a otra persona. Ese amigo que te llena el sofá de panchitos cuando marca Silva te servirá. Bien: con ayuda de un nivel, lo colocamos en horizontal a la altura elegida. Marcamos los lugares donde hemos de realizar los taladros. Ojo, existe la posibilidad de fijarlas en la pared o en el techo, con un accesorio que debe ir incluido. Tú decides (no, lo de Torres ya no tiene remedio, ¡y no insistas más!).

Una vez hechos los taladros, utilizamos tacos que puedan soportar grandes pesos. En cualquier ferretería pueden orientarte en esta elección, y deberías también tener en cuenta el grosor y dureza de la pared, ya que van a soportar un peso considerable. Ahora tan sólo queda colocarlo y comprobar que es posible desplegar el lienzo sin encontrarnos con ningún obstáculo. Si fuese necesario alejarlo un poco de la pared para salvar algún mueble, podemos hacernos con unas guías de acero y fijar el cajetín en ellas de la misma manera.

La mejor manera de colocar el proyector de vídeo es colgado del techo mediante un soporte universal diseñado para estos menesteres. Comprueba que el soporte es compatible con nuestro proyector (¿soy muy pesado con esto? Está bien, hablemos de Torres…). Una vez hecho esto, hemos de fijar el punto exacto de la pared donde lo vamos a colgar, y para ello deberemos consultar el manual, donde explican las distancias exactas a las que debería estar el aparato dependiendo de las dimensiones de la pantalla. Toma los famosos apuntes de distancias que hiciste antes y deléitate con tu arte y tu capacidad volumétrica.

Otra opción es elevarlo y probar con una imagen o vídeo directamente. Realizamos los taladros necesarios en el techo, colocamos el soporte y a continuación el vídeo proyector. Hemos de dejar una salida a los cables que conectaremos a continuación con unos centímetros de más para dar espacio al embellecedor.

El último paso, muy sencillo pero quizás el más engorroso, es ocultar todo el cableado. Si optamos por fijarlo al techo, necesitaremos comprar cables extralargos para llegar a la fuente de vídeo y de alimentación. Estos cables se venden en tiendas especializadas de electrónica, y hemos de tener muy en cuenta también el grosor, ya que necesitaremos ocultar dos cables en un mismo embellecedor. Puedes pegar ahora el cableado por los lugares más discretos de la habitación con cinta aislante y fijar el embellecedor (¡ojo, del mismo color que las paredes!), con un pegamento especial para el yeso. Después de hacer las comprobaciones oportunas (ya sabes: fecha, canal, estadio y selecciones…) tan sólo queda recordar a tus amigos que aunque son bienvenidos, no se les ocurra poner un pie en tu casa sin el consiguiente arsenal de aperitivos y bebidas.

¡Hale, ya está! Ahora solo queda esperar unas horas para que comience lo bueno. Mientras tanto, es turno para las apuestas, las porras y las discusiones sobre si los leones llegarán demasiado cansados tras su temporadón o si deberían estar Adrián o Soldado (por favor, Fernando, nada me haría más feliz que me quitases la razón con un buen saco de goles estas semanas… ¡escribiría un post enterito para reparar mis palabras!).

¿Qué os parece, amiguetes? Eurocopa a lo grande, ¿sí o sí?