Mira la foto y levanta el pulgar como un César: ¿día o noche? Lo que de día está bien, de noche puede ser fantástico. ¿De día espectacular? De noche, un paraíso absolutamente arrebatador. No es magia, sino luz.

Por eso hoy te voy a contar algunas posibilidades técnicas y estéticas que podrían convertir tu jardín, tu patio, tu parcela o simplemente el exterior de tu casa, en una obra de arte completamente nueva y formidable. ¡Ah! Y si en lugar de un jardín tienes una coqueta terracita o un balcón al que quieres sacarle todo el provecho, este jueves haremos lo mismo con espacios más pequeños pero igualmente llenos de potencial con un poco de luz.

Para todo ello he hablado con mi amigo y compañero Jesús Redondo, que es un gran experto electricista en Reparalia. Él sabe bien que la iluminación es tan importante fuera como dentro de casa, y embellece tanto una parcela como una buena labor de jardinería. Es un elemento fundamental de seguridad, que además de mejorar la visibilidad y ahuyentar las intrusiones, evita los accidentes en zonas de paso peligrosas como rampas y escalones.

PASILLOS Y ZONAS DE PASO

Para estos lugares en los que necesitamos transitar sobre el suelo con seguridad, señalizaremos el camino con balizas y sobremuros. En las imágenes que acompañan al post hemos seleccionado algunos modelos y sus posibles aplicaciones para que te hagas una idea de hasta qué punto pueden realzar tus espacios exteriores.

Una buena decisión es colocar en las balizas luces de led, ya que consumen muy poco y su vida útil es mucho más larga que las luces convencionales. Dan un tono lumínico limpio, claro y muy bonito. Son algo más caras, pero la inversión merece la pena.

Otra opción más económica es colocar en su interior lámparas de bajo consumo. Y si no tienes preparada en tu jardín una preinstalación eléctrica o puntos de luz a mano, también se pueden colocar balizas con alimentación solar, unos dispositivos que poco a poco irán invadiendo nuestros hogares porque son cómodos y muy rentables: se cargan por el día a través de sus células solares y se encienden automáticamente por la noche, dándole un respiro a nuestras facturas eléctricas.

Además, casi es más preciso hablar de “colocación” en lugar de “instalación”, puesto que hay modelos solares tipo “pincho” que, al no llevar cables, podrás mover y clavar en distintos puntos tantas veces como te apetezca. Y como muchas de estas luces tienen gran variedad de colores, podrás además crear ambientes a tu gusto jugando con el cromatismo de su luz. Estos apliques son perfectos para señalizar, por ejemplo, el contorno de una piscina.

ILUMINACIÓN GENERAL DEL JARDÍN

Tener una buena vista general del perímetro es importante, sobre todo, por seguridad. Para este cometido instalaremos farolas de una potencia mayor que los anteriores dispositivos, equipadas con lámparas de halogenuros metálicos.

Piensa también que estos dispositivos necesitarán más potencia para cumplir su cometido, por lo que te sugiero que valores la posibilidad de instalarlos con lámparas led, que reducirán notablemente el consumo.

ÁRBOLES, FACHADAS O PORCHES

Para este tipo de iluminación intermedia emplearemos focos empotrables de suelo que pueden incorporar lámparas halógenas fluorescentes o de led, o proyectores con lámpara halógena para conseguir efectos más ornamentales.

CONSEJOS PARA UNA BUENA INSTALACIÓN DE ILUMINACIÓN EN EL JARDÍN

Jesús me recuerda en este punto que dar vida a una superficie como esta no es cosa de broma: toda instalación debe ser realizada y verificada por un profesional cualificado, instalada a un cuadro eléctrico adicional al de la casa, con sus propios diferenciales y magnetotérmicos de protección individuales para los distintos focos, y materiales de calidad desde los propios dispositivos hasta los relojes temporizadores para encendido y apagado, interruptores crepusculares que detectan la “hora de trabajar”, etc.

POR ÚLTIMO Y ANTES DE COMPRAR: COMPRUEBA LA PROTECCIÓN IP

No, no hablamos ahora del Internet Protocol gracias al cual lees esta entrada. El IP es un índice que señala la protección contra los elementos (polvo, agua…), la corrosión o la presión que ofrece cada dispositivo de iluminación. Por norma general, a mayor IP, mayor resistencia de estos dispositivos en la intemperie.

Primera cifra: resistencia al polvo. Segunda cifra: resistencia a los líquidos. Así que si ese bonito modelo te ofrece un discreto 54, no se te ocurra enfrentarlo a la lluvia. Te servirá, como mucho, para colgarlo bajo un porche y en lugar siempre seco. Un 67, sin embargo, será bastante resistente y se las podrá ver con rayos y centellas ahí fuera.

No olvides esto, porque el 90% de los cortocircuitos y derivaciones en jardines se debe a una falta de aislamiento por una mala elección de materiales (o a la degradación excesiva de los mismos).

Ya estás listo para asomarte a tu espacio y concebir un mundo nuevo de luces y colores. Tienes mucho más jardín y mucho más bonito de lo que habías imaginado. Y con la ayuda de profesionales como Jesús, nada es imposible.

Nos vemos de nuevo este próximo jueves, y así te contaré cómo reinventar balcones, terrazas y otros espacios exteriores más pequeños aplicando la iluminación adecuada. ¡Aquí te espero!