Queridos lectores, antes de dar paso a la primera gran conversación de las muchas que poblarán nuestra nueva sección “Entrevistamos a”, quiero confesar que es un auténtico lujazo estrenar este rincón de sabiduría con gente del nivel profesional y humano como Arquitectura Sin Fronteras.

Su incansable trabajo persigue defender el derecho a un hábitat digno, tanto en países en vías de desarrollo como en nuestra propia sociedad. Por eso, entre sus muchos campos de trabajo, permanecen vigilantes a cada situación en la que se pone en peligro el derecho a la Accesibilidad, tanto en entornos públicos como en el entorno del hogar privado.

Por eso, uno de sus grupos trabaja en este concepto de accesibilidad con la elaboración, entre otros desarrollos, de una Guía de Accesibilidad dirigida a sensibilizar a los arquitectos que están modelando el futuro de nuestros hogares.

Y hoy, precisamente, queremos acercarnos a la realidad de esos hogares que deben adaptarse para acoger a las personas con diversidad funcional.

Te invitamos a que conozcas un poco más de Arquitectura Sin Fronteras (en adelante ASF) y del problema de la accesibilidad en los hogares, a través de Ángel Martín, uno de los grandes voluntarios que trabajan con la asociación, actual Presidente de ASF y colaborador en el grupo de trabajo de accesibilidad en Madrid.

 

Salvador de la Casa (S.d.C): Ángel, bienvenido y gracias por inaugurar un espacio de conocimiento en el esperamos compartir ideas y reflexiones excepcionales. Antes de nada, por favor, cuéntanos un poco más sobre el trabajo de ASF en su proyecto de Accesibilidad.

Ángel Martín (A.M.): En ASF entendemos la Accesibilidad como un Derecho Humano Fundamental del cual son titulares en primera instancia las personas con diversidad funcional.

Pero su incumplimiento no afecta solo a este colectivo específico; todos podemos tener a lo largo de nuestra vida una lesión física, una enfermedad cognitiva y todos inevitablemente iremos envejeciendo. Garantizar la Accesibilidad Universal permite el desarrollo personal y la participación en la vida civil y social de todas las personas, independientemente de las posibles limitaciones funcionales que puedan tener.

La actividad del grupo de accesibilidad de ASF se ha centrado en la realización de asistencias técnicas para la mejora de la accesibilidad en viviendas particulares, en la organización de jornadas de sensibilización sobre la accesibilidad, en mapeos de zonas de la ciudad con dificultades de accesibilidad  y en establecer una red de contactos con otras organizaciones.

S.d.C: ¿Podrías ofrecernos una panorámica de cómo está este problema en nuestro país, con cifras?

A.M: La falta de Accesibilidad afecta el conjunto de la población, entre los cuales podemos distinguir de forma prioritaria tres grandes colectivos:

• Las personas que tienen discapacidades permanentes derivadas de deficiencias físicas, sensoriales, mentales, etc. ascienden a 3,5 millones y representan el 8,8% del total de la población española.
• Las personas de edad avanzada no discapacitadas (65 años o más). Son 4,4 millones de personas, y representan el 10,9% de la población.
• Las personas que tienen circunstancias transitorias derivadas de actividades o situaciones coyunturales que resultan discapacitantes.

Si consideramos que, según los datos oficiales, estos tres colectivos ascienden a cerca de 16 millones de personas, esto significa que casi el 40% del total de la población española podría considerarse como beneficiaria de una mejora de su entorno.

Para ASF, la falta de Accesibilidad provoca la exclusión social al vulnerar el Derecho al Hábitat y el Derecho a la Ciudad, ámbitos específicos de actuación de la organización.

S.d.C: ¿Y qué pasa cuando detectáis un caso concreto en el que resulta necesario intervenir para garantizar esos derechos? ¿Cómo es el proceso?

A.M: Una vez hemos identificado el caso en el que debemos intervenir, hacemos una visita para hacer una evaluación inicial de la adaptación en la que, junto con las personas beneficiarias, identificamos cuáles son sus principales necesidades y prioridades. Realizamos un análisis en detalle del estado de la vivienda y elaboramos un dossier detallado del proyecto de la obra a ejecutar. A partir de este análisis hacemos una propuesta de medidas correctoras mínimas y la revisamos con ellos.

Se selecciona conjuntamente la solución que mejor se adapte a sus necesidades básicas y al presupuesto. Una vez que está clara la acción a realizar, planificamos la intervención (materiales, mano de obra, voluntarios, etc).

Ponemos en marcha la intervención con un seguimiento permanente de la misma y terminamos el proceso con un informe de finalización de obra. A los pocos meses de terminar, hacemos visitas de seguimiento para comprobar que la calidad de vida de las personas beneficiarias realmente ha mejorado..

• ¿Conoces nuestras “Reparaciones Solidarias”? Echa un vistazo a una de las reformas que hemos sufragado de principio a fin para esta mujer mayor en riesgo de peligros derivados de la falta de accesibilidad en su hogar.
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S.d.C: ¿Y qué elementos del hogar deben modificarse cuando hay una persona con problemas de movilidad?

A.M: Las adaptaciones se dirigen en su mayor parte a mejoras en los cuartos de baño. Estas permiten cubrir uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las personas con limitaciones funcionales en el hogar: su aseo autónomo. Un ejemplo frecuente es la sustitución de la bañera por ducha o los cambios en la distribución de los elementos del cuarto de baño.

Aunque no debería olvidarse el recorrido de acceso desde el portal hasta la vivienda, incluyendo todas las escaleras que habitualmente es necesario salvar.
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S.d.C: ¿Cuáles son los problemas principales a los que se enfrentan las familias cuando tienen que adaptar su hogar para personas en situaciones de movilidad limitada?

A.M:  Las necesidades de adaptación de viviendas y edificios para que respondan estrictamente a la normativa actual y al enfoque del “Diseño para todos”, suelen ser costosas y de difícil actuación, algo que puede constituir una barrera más para aquellas personas que se encuentran en una situación económica precaria.

En ocasiones también nos encontramos con problemas con los propietarios, que ponen dificultades a las adaptaciones que necesitarían sus inquilinos.
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S.d.C: ¿Conocéis costes aproximados de estas adaptaciones?

A.M:  Cada caso es distinto y el coste variará en función de la intervención a realizar pero en un proyecto básico podríamos estar hablando de un coste medio de unos 3.500€.
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S.d.C: ¿Hay viviendas que se vendan ya adaptadas? ¿Existe una tendencia entre las constructoras e inmobiliarias para poner especial atención en esta problemática?

A.M:  En el caso de vivienda protegida hay un porcentaje de viviendas que deben estar adaptadas. Pero esta adaptación se limita prácticamente a un cumplimiento de dimensiones de ancho de puertas y maniobrabilidad de la silla de ruedas, sin contemplar otros aspectos ni tener en cuenta un sentido más amplio de la diversidad funcional.

Además, hay asociaciones como FAMMA que ayudan en la búsqueda y acceso a viviendas adaptadas.

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S.d.C: ¿A qué tipo de ayudas de las organizaciones públicas puede acudir una família para adaptar su hogar?

A.M: La ayuda institucional no es la más común para las famílias, pero se puede acudir a algunos ayuntamientos que tienen planes de mejora de la Accesibilidad, aunque suelen cubrir solo un porcentaje del coste total de la adaptación. Por ejemplo, en Madrid se ha puesto recientemente en marcha el PLAN MADRE 2016.

Es un Plan de Mejora de Viviendas centrado en unas Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana (APIRU) en el que se integra un plan de ayudas a la Accesibilidad para la instalación de ascensor, instalación de salva-escaleras, construcción de rampas, etc.
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S.d.C: ¿Existen alternativas de bajo coste para llevar a cabo la adaptación de una vivienda?

A.M:Un primer planteamiento es revisar el estado actual de la vivienda y ver qué cosas se pueden mejorar o eliminar. Por ejemplo, la retirada de obstáculos que dificultan la movilidad, como pueden ser algunos muebles.Tras este punto es posible buscar productos de apoyo que mejoren la funcionalidad sin necesidad de hacer una obra.

Por último, más que hablar de adaptaciones de bajo coste, podríamos hablar de intervenciones mínimas que, aunque no solucionen la totalidad del problema, mejoren la situación de partida sustancialmente.

S.d.C: Muchas gracias Ángel por dedicarnos este tiempo y compartir con nosotros esta aventura constante hacia unos hogares más disfrutables para todos. Por último, danos una pista, si alguien se anima… ¿cómo podría colaborar con vosotros?

A.M: Las tres formas posibles maneras de colabraor son haciéndote soci@, apoyando con una donación o postulándote como voluntari@. ¡Os esperamos!

Si durante la entrevista te ha invadido una sensación de inquietud con respecto a nuestros mayores y a aquellos con menos libertad de movimiento que nosotros en nuestro entorno más directo, es normal. Por eso te recomendamos tomar cartas en el asunto a través de los consejos que te ofrecemos en este post: Mayores en casa, las zonas de riesgo y las trampas del hogar.

Y si quieres conocer las motivaciones que llevaron a este gran profesional a una causa tan universal, y escuchar lo que piensa de la situación actual de la Accesibilidad en España, entra aquí en la parte más personal de esta entrevista a Ángel Martín de Arquitectura Sin Fronteras.