Si tu anécdota merece un premio, tienes hasta las 23:59 de hoy para demostrarlo

Seguro que los hermanos Grimm no eran ni la mitad de mañosos que tú... Hoy es 20 de septiembre y hace exactamente 149 años falleció Jacob Grimm, el mayor de los hermanos más cuentistas de la literatura universal. Es, por tanto, un buen día para recordar nuestra mayor aventura como manitas, sentarnos delante del ordenador, y compartirla con el resto de aquellos que disfrutamos reparando cuanto nos rodea con nuestras propias manos.

El premio más importante lo disfrutaste cuando tu pareja, tus hijos, tus amigos o tú mismo os sentisteis orgullosos de tu talento y tu destreza. Pero hoy puedes llevarte algo más: nuestro aplauso y admiración, un estupendo atornillador eléctrico Black&Decker, un Servicio Club Hogar de Reparalia que incluye las reparaciones urgentes de tu hogar (desplazamiento y 2 horas de mano de obra en cristalería, fontanería, electricidad y cerrajería), y 2 Servicios de Manitas al año de 2 horas cada uno, o un Servicio de Reparaciones Urgentes de Reparalia, del que podrás disfrutar durante todo 1 año.

¡Consigue este atornillador de fábula compartiendo tu reparación más ocurrente!No está mal, ¿verdad? Entra en el post donde te contábamos las bases del concurso y déjanos tu historia en un comentario: es el último día para participar en nuestro concurso de verano y tienes muchas posibilidades de llevarte uno de los regalos que Reparalia ha preparado para nuestros manitas más cuentistas.

Una anécdota. Un recuerdo imborrable. Y varios regalos sensacionales para que sigas cuidando de tu hogar y de los tuyos con la misma maña que te caracteriza.

¡Cuéntanos tu historia y llévate tu regalo!

 

Foto: Bildindex.de

1 comentario

  1. Dice ser Teresa

    Yo sin lugar a dudas recuerdo con muchísimo cariño los dos últimos muebles que he montado en mi casa, en concreto una mesa de oficina y un mueble zapatero porque me ha ayudado con toda su ilusion mi hija de año y medio. Tengo que reconocer que a mi me relaja el bricolaje en general, pero en esta ocasion ha sido especialmente divertido.

    Cuando monté la mesa, ella tenia un año y poco. Yo que estaba tan ilusionada montando la mesa de mi futuro despacho, la dejé al lado mío en su amaca para que me viera mientras trasteaba con maderas y demás, y de pronto ella salió corriendo a su habitación y volvió con un palito de plástico de uno de sus juguetes y se me quedó mirando, como diciendo ¿puedo ayudarte mamá? jajaja, se me caian las lágrimas de la risa. Así que se puso a repasar con su palito todos los huecos donde yo había ido atornillando. Nos quedó fantástica!!!!!!

    Y con el zapatero sucedió otro tanto. Supongo que en esta ocasion ya había olvidado el montaje de la mesa, porque para un bebé unos meses son siglos. Una mañana estaba yo metida en faena con el nuevo zapatero y ella estaba por allí armando escándalo con un xilófono que tiene un martillito para hacer sonar las diferentes placas. En esto que estaba yo enfrascada con las instrucciones porque había una pieza que no aparecía por ningún lado, ella decidió que la solución para terminar el zapatero era a martillazo limpio, jajaja, menos mal que su martillito era de madera.

    20 septiembre 2012 | 18:49

Los comentarios están cerrados.