Un cuento corriente Un cuento corriente

Se llama a la Economía (más aún en estos tiempos de crisis) la "ciencia lúgubre". Aquí trato de mostrar que además es una de nuestras mejores herramientas para lograr un mundo mejor

La Grecia de Tsipras, entre la reestructuración ordenada de la deuda y la amenaza de abandonar el euro

«En realidad, Grecia tiene poco donde elegir: Puede cumplir con la Troika o salir del euro«. Quien dice esto no soy yo. Lo dice Steen Jakobsen, economista jefe del banco de inversión danés Saxo Bank. Con esta aparente rudeza se han despachado tanto los analistas como todos aquellos miembros del mercado que han dado su opinion al respecto: No se contempla otra opción a que Grecia siga aceptando el rescate tal cual fue fijado. Y si al nuevo Gobierno no le gusta, no le quedará otro remedio que hacer un impago desordenado y, por lo tanto, abandonar la moneda única.  tsipras

La verdad es que aparentemente el desencuentro entre los intereses de los electores griegos (hartos de la austeridad) y los alemanes (que se niegan a costear ningún rescate a los países periféricos) no tiene una solución fácil. Y es que tanto el acuerdo de Tsipras con la formación derechista-nacionalista Griegos Independientes como sus acercamientos con Rusia apuntan a adoptar una posición amenazante en cualquier negociación (en el sentido de que pueden salirse del euro con un plan B ya trazado). En el otro lado de la balanza, los alemanes llevan meses (¿años?) asumiendo que el desastre griego les va a salir caro, y ya no son tan reacios a una posible salida de Grecia del euro, bajo el argumento de que eliminando el eslabón más débil la unión monetaria será más fuerte. Tan es así que incluso el prestigioso instituto económico alemán IFO publicó una breve nota en la que, según sus cálculos, llegaba a la conclusión de que el coste de una reestructuración de la deuda griega sería menos caro si Grecia se salía del euro. Otros no piensan lo mismo.

Pero yo soy relativamente optimista. Primero porque sería malísimo para Grecia (vuelta a la recesión, devaluación brutal del dracma…) y segundo porque tanto los inversores internacionales como los tecnócratas en Bruselas saben que el actual nivel de endeudamiento en Grecia es prácticamente insostenible. Aunque tal como recuerda Miquel Roig en su último post, en realidad los tipos de interés del rescate son tan bajos —gracias a las favorables condiciones del rescate— que España (con menos de un 100% de deuda/PIB) paga más por sus bonos que Grecia (170% deuda/PIB). Pero aún así es un nivel extraordinariamente alto y la experiencia y los académicos nos cuentan que lo más práctico es asumirlo, reestructurar y empezar a crecer con menos lastre. No es agradable y desde luego que tiene costes tanto para los inversores privados como para los contribuyentes europeos, pero lo que dicen muchos analistas independientes es que cualquier otra opción también tiene costes, quizás mayores.

Además, tal como muestran Zsolt Darvas y Pia Hüttl, investigadores pertenecientes al Think Tank Bruegel, hay opciones para reducir considerablemente el coste para Grecia de su deuda sin que ello suponga pérdidas para sus acreedores. Así, proponen reducir la tasa de interés de los créditos del rescate griego, extender la vida media de la deuda del rescate griego para pagar menos intereses en el presente, recomprar los propios bonos soberanos griegos por medio de un préstamo del Mecanismo Europeo de Estabilidad, cambiar los préstamos a tipo variable por préstamos a tipo fijo, indexar los préstamos al crecimiento del PIB (es decir, que solo se pagarían si la economía crece) o incluso comprar empresas estatales griegas con fondos del Banco Europeo de Inversiones (BEI). Si se aplicaran estas medidas, los analistas de Bruegel sostienen que el ratio de deuda pública sobre PIB bajaría hasta el entorno del 40% para el año 2050.

deuda griega

 

Hay pocas posibilidades de que en la práctica un nivel de endeudamiento tan alto como el de Grecia sea sostenible. Pero es posible. En otro paper, el propio Darvas apunta la clave: «Cualquier nivel de deuda es sostenible si tiene unos tipos de interés muy bajos. Japón es un ejemplo perfecto: Deuda pública de casi un 250% del PIB mientras el interés promedio es del 0,9% anual», señala. No es el caso, por el momento, de Grecia, que a sus altos pagos en intereses hay que sumar un quinquenio de caída del PIB, lo que en la práctica ha incrementado el ratio de endeudamiento y deprimido la demanda nacional. No es de extrañar que así sean cada vez más los economistas críticos con Alemania, favorables a una reestructuración ordenada de la deuda pública griega unida a una flexibilización de la política fiscal para que la economía helena tenga algo de margen presupuestario para invertir en crecer. No será agradable y tendrá efectos negativos en los países acreedores, pero como recuerdan académicos como Guntram Wolff, «esto se ha hecho muchas veces antes». El problema es que hay que negociar y renunciar a posiciones maximalistas tanto unos como otros.

2 comentarios

  1. Dice ser ollines

    lo mejor que puede hacer grecia es abandonar la union europea..abandpnar el euro y toda la basura alemana que solo trajo pobreza para nosotros y riqueza para ellos ..

    28 enero 2015 | 06:19

  2. Como medianamente funcionen sus reformas, que me da que si, se termina de caer el chiringuito a los «trincones» tradicionales. Otra cosa es que les dejen…

    http://cuandofuimoslosmejores.com/el-escandalo-de-banca-catalana/

    28 enero 2015 | 08:56

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