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Me deniegan la beca por no ser… ¿una estudiante de provecho?

Por Laura Martínez Quintana

Soy una estudiante de Ciencias Ambientales de la Universidad de Barcelona. Este año he pedido la beca general y de movilidad, ya que vivo a 60 kilómetros aproximadamente de la universidad, lo que conlleva un gasto de unos 300 euros por cada t-jove, que dura 3 meses. Además mis padres están parados y somos 4 personas en casa. Los únicos ingresos que tenemos son los 380 euros que gano yo por trabajar los fines de semana y el dinero que puede proporcionarnos mi abuela por viudedad. No obstante, la beca me ha sido denegada, a pesar de que por mi situación económica es más que evidente que la necesito para poder estudiar. Examen en la universidad

¿Por qué entonces no puedo recibir la beca y personas que están en condiciones económicas superiores a la mía sí pueden recibirla? Muy sencillo, por una norma irracional e ilógica. El año pasado cursé en la Universidad Pompeu Fabra el grado de Enfermería. Esta universidad, al contrario que otras, funciona por trimestres no como otras. Por eso me matriculé del primer trimestre que son 20 créditos. No obstante, me di cuenta de que no me gustaba y no quería dedicarme a este oficio. Porque supongo que las personas humanas podemos equivocarnos al elegir aquello que queremos estudiar y más teniendo en cuenta la edad a la que tenemos que escoger nuestros estudios superiores. Así que dejé la universidad habiendo aprobado y con buenas calificaciones los 20 créditos.

Ahora me dicen que una de las normas del Ministerio de Educación para conceder becas es que el alumno haya superado 30 créditos, ya que este organismo debe de garantizar que el dinero será destinado a un alumno «de provecho». Señores ministros, ¿a caso están queriendo decir que yo no soy una alumna de provecho por no haber cursado simplemente 10 créditos más? ¿Me están diciendo que, a pesar de que la carrera no me gustase y consiguiera excelentes calificaciones, no soy una alumna de provecho? ¿Tengo que renunciar a estudiar, que es lo que más he deseado en mi vida, porque una norma injusta dice que tengo que superar 30 créditos? Me parece que es excesivo por su parte, y que hay situaciones en particular que deberían  ser analizadas detenidamente.

«Norma injusta»

Pero es más sencillo dar becas a «diestro y siniestro» sin saber lo que realmente está pasando en su sociedad y a sus ciudadanos. Me parece lamentable esta situación. La verdad es que no me extraña que las cosas vayan así en este país. Pero no creo que nadie vaya a quedarse de brazos cruzados delante de estas situaciones. Creo que merezco una explicación razonable sobre esta norma injusta e irracional y por supuesto una posible solución.

Financiación ilegal

Por José María Diago

La crisis, o los intentos de solucionarla más bien, se están llevando por delante lo que nosotros creíamos que era el estado del bienestar: sanidad, educación, igualdad, pensiones o dependencia. Se recortan partidas a diestro y siniestro sin dar muchas explicaciones pero siempre bajo el paraguas de «no es sostenible».

Sin embargo, hay algo de lo que los partidos políticos no hablan ni en sede judicial pero que parece a todas luces insostenible: los propios partidos políticos. No se trata de cuestionar su existencia, faltaría más, pero algo no debe funcionar muy bien cuando la mayoría están fuertemente endeudados e incluso se han visto implicados en caso de financiación ilegal.

«Hemos vivido por encima de nuestras posibilidades» es otra de la frases-mantra de los políticos que nos recortan, pero no se dan por aludidos: PSOE y PP mantienen créditos impagados desde tiempo inmemorial con las entidades bancarias, pero a diferencia de los ciudadanos que no pueden optar ni a la dación en pago, éstos son directamente condonados por las entidades que deben considerarlos poco menos que «activos tóxicos».

Aún así, con este perdón de deudas millonarias, los partidos no llegan a fin de mes por lo que optan por obtener dinero a través de otras vías: donaciones anónimas (desinteresadas, por supuesto) y adjudicación de contratos por servicios nunca prestados o falsos.

 La financiación ilegal de partidos ha saltado otra vez a la palestra a costa de Unió Democrática de Catalunya y el caso «Palau», pero antes fue el caso «Filesa» vinculado al PSOE, y mucho antes el caso «Naseiro» vinculado al PP, y están en fase judicial los casos del PP valenciano y balear…

Claro que con la agilidad de la Justicia en España no sería raro que prescribieran…

 

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