Por David Alba Arévalo
El día 30 de abril leo en este periódico una noticia relacionada con el derrumbe de una fábrica textil en Bangladesh; en ella se decía que la empresa irlandesa Primark “indemnizará económicamente y prestará ayuda alimentaria a las víctimas del derrumbe”. Y yo me pregunto: ¿Los directivos de esta o de otras multinacionales muy conocidas, que también se han visto implicadas en esta catástrofe, no se plantearon alguna vez en alguna de sus reuniones -en las que hacen números, cuentas y se enredan en grandes ideas para que sus productos sean los más vendidos- que lo barato les podría salir caro? Seguro que esa pregunta se la han hecho alguna vez y me disgusta enormemente saber que habrán llegado a la conclusión de que comprar la vida de un ser humano es mucho más barato de lo que pensamos.