Reflexiones sobre el discurso de Rajoy

Por José Antonio Pozo Maqueda

Rajoy se enfada

La agresividad desmesurada de Mariano Rajoy, sacándole de sus casillas y bordeando incluso el insulto, con el líder de la oposición, Pedro Sánchez, en el debate sobre el estado de la nación, puso claramente de manifiesto que éste puso el dedo en la llaga y le dio a Rajoy donde más le dolía.

El presidente del Gobierno perdió sus papeles, con cajas destempladas, llegó incluso a decirle a Pedro Sánchez que no volviera más por el Congreso de los Diputados y que carecía de entidad suficiente para ocupar el cargo que él ocupaba. En fin, que reaccionara así Rajoy demuestra que el jefe de la oposición estuvo muy acertado. La verdad es que Pedro Sánchez me sorprendió muy positivamente en el modo de enfrentarse al discurso triunfalista, autocomplaciente y poco realista de Rajoy.

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Por Jesús de Vega

Mariano Rajoy (EFE)

El país de jauja

Oyendo en debate sobre el (desastroso) estado de la nación, uno se pregunta: ¿Pero dónde vive el presidente del Gobierno? Pero, ¿de verdad se cree lo que dice?

En un país con más de cinco millones de parados, con casi dos millones de pobres pasando hambre y pidiendo comida en colas vergonzosas, con el 30% de los trabajadores cobrando 600 euros y la práctica totalidad del resto (menos unos privilegiados) cobrando menos de 1.000 €… ¿de qué mejoras habla?

Con los enfermos tirados en los pasillos, con miles de profesores menos y con tasas univeristarias para ricos, con una justicia hecha a medida de los mangantes y estafadores y con un partido –el suyo– donde no le caben ya más corruptos, ¿de verdad piensa este individuo que nos vamos a creer la hora y media de mentiras que nos contó? Pregunten a los 300.000 jóvenes que han emigrado al extrangero o pregunten al 55% de  jovenes preparados sin trabajo. Evidentemente en su «país del PP«, donde cobran tres, cuatro o más sueldos sí hay mejoras: en los bancos, en las empresas que pagan miserias… Ahí si hay mejoras, pero en el resto ¿dónde están? Señor Rajoy, su país de jauja no existe y desde luego no es este en el que usted vive.

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