Por Fernando Medina Donoso
Aprendí dos sabias lecciones de mi padre: Que la mentira deslegitima de por vida y que ser claro, directo y firme de convicción es básico para obtener respeto y autoridad. Nadie puede dirigir, ni pretenderlo siquiera, los destinos de una familia, empresa, institución o Estado cuando no comunica su proyecto de una manera comprensible y decidida. Nadie puede pedir apoyo sin ser relegado al ostracismo cuando miente.
Tengo la suerte de haber llegado a mi teórico ecuador biológico en plenitud, con familia, formación superior, cuatro idiomas y una dilatada experiencia profesional, los últimos diez años en el extranjero. Conozco las más diversas etnias, mentalidades, religiones y contextos políticos del mundo. Y me invade una gran desazón volver a España y sentirme estúpido. Un estúpido incapaz de comprender a toda la pléyade de actores y figurantes que pululan por los foros políticos y mediáticos, transformados ya en circos, quienes se despachan en público con diatribas sobre el significado de eufemismos ambiguos como el derecho a decidir, el estado propio, el federalismo asimétrico o el proceso de paz. O cuando contemplo estupefacto cómo sus señorías consagran un día, pagado de nuestros agujereados bolsillos, dietas incluidas, a intentar reprobar a un ministro por ser claro y coherente.
La supuesta libertad que nos han inculcado sufre sus más perversos efectos: hace libre y santo a quien incita alto y claro a la rebelión, y convierte en tirano, indigno y reprobable a quien pretende traer cordura y aplicar la ley. La solución, mentira disfrazada de balones a la grada, ambigüedad vestida de diplomacia, y esperar que las aguas vuelvan a su cauce, que ya se sabe que no será el caso. Pero mientras dure el momio… que dure. Y es que, Majestad, su copa “mola”, pero nuestra España, perdone que retome sus palabras, ciertamente da ganas de llorar.
Cuanta razón asiste al autor del post de hoy , dan ganas de llorar hasta reventar cuand piensas como esta deteriorandose el bienestar social de todos los españoles, menos los de las dinastias privilegiadas ,los banqueros y los politicos que no se recortan ni unpelo en sus beneficios aunque sobre sus cabezas penda la sombra de una orca o una guillotina, Y digo estas palabras tan inquietantes porque yo que ando hablando con unos y otros por la calle oigo estas cosas y algunas otras aún peores que no me atrevo a escribir aqui.
Clica sobre mi nombre
03 noviembre 2012 | 18:41
Fantástico. Para rematar un texto tan brillante, dos perlitas extraídas del diario Público, que se pregunta y pregunta qué ha sido de la canción protesta.
Un tal Rafa Pons, al parecer músico catalán, afirma que «si hablas de hacer botellón, también hablas del que no tiene dinero»…que hay que tenerlos cuadraos, vamos.
Pero lo mejor, lo insuperable, lo que dice el lidereso de una banda llamada Ska-P (No tengo el gusto) Lo pongo en párrafo aparte, porque se lo merece:
«Es cierto que la estafa financiera y las políticas de recortes de estos gobiernos neoliberales silencian de muchas formas a los más contestatarios. No hay conciertos. Y encima suben el IVA al 21% en las entradas, sólo van a poder disfrutar de la música en directo los seguidores de Norma Duval y de Bertín Osborne, que al final es lo que pretende este Gobierno»
A mí me preocupaban tantas y tantas mujeres que encontraron en sus pequeños negocios de peluquería una manera de ganarse la vida, y a quienes la descomunal y repentina subida del IVA ha hecho y hará tanto daño…los musiquillos con ínfulas, ya no tanto, porque bien podían echarse unos cánticos en el marco de un botellón, en plan amiguetes de los pobres, y luego pasar la gorra, no hay mejor manera de no hacerle el juego al capitalismo, a los grandes empresarios de la industria del ocio y al gobierno mismo, pero, ¡ya ves tú!, resulta que el gobierno quiere destrozarles la vida porque anda Rajoy empeñado en que nos hagamos fanses de Norma Duval y de Bertín Osborne.
Este es el nivel.
03 noviembre 2012 | 19:12
No hay libertad sin información, sin transparencia.
Carla
http://www.lasbolaschinas.com
03 noviembre 2012 | 19:18
Me gusta su carta, aunque, en mi opinión, sobra la referencia a la formación superior y los cuatro idiomas. Ello no concede más razón ni calidad al escrito.
03 noviembre 2012 | 20:07
Típico español, todos los doctores casi todos etc., se creen algo más que los demás, por tener trabajo y ser doctores, tratan a la gente normal, con o sin estudios como gente menor ,da vergüenza. Madrid Arena lo mismo. No ay responsabilidad en el poder, Si no controla el estado quien debe controlar al lo privado el dinero. Mas uno que se quiere independizar, con todo a su favor, porque siempre tuvo lo que quiso. La igualdad entre los españoles no existe por culpa de la clase política, Ni en lengua ni en calidad de vida ni en dinero. Lo peor que los políticos se gastan el dinero en poder .Tener poder y un puesto seguro en España, sea como sea si ay que cambiar historia realidad y decir que no son españoles.
04 noviembre 2012 | 9:11