Siempre se dice que la política es un poco el arte de engañar, como lo es el oficio del teatro. Con la pequeña diferencia de que lo que vemos sobre las tablas sabemos que es mentira y lo que cuentan desde hemiciclos, agrupaciones regionales y sedes nacionales quieren colárnoslo por verdadero. En el fondo es también una farsa, una bonita representación teatral.
En estas están todos (casi todos) los políticos, pero los socialistas de Madrid llevan años haciendo de títere del Retiro. Bonita presencia, estupendas palabras e ingeniosas tramas, pero con manos ocultas que manejan los monigotes al antojo de lo que el público quiere ver.
Lo que pasa es que el respetable, niños y mayores, están ya cansado de siempre lo mismo, de tanta pantomima, de tanta gracieta sin sentido.
Señores del PSOE madrileño, quítense la careta, déjense de teatrillos y de luchas intestinas y pónganse de verdad a trabajar por los madrileños.