La situación de la ficción nacional es más que preocupante. No es normal que en dos meses que llevamos de 2014 todas las que se hayan estrenado tengan una retahíla de carencias que les restan toda la calidad, con la consecuente dificultad para soportarlas. Además de su duración interminable, con episodios que en muchos casos superan la hora y media en temporadas de trece capítulos.
Han sido cuatro los grandes estrenos en este inicio de año: Bienvenidos al Lolita, El Príncipe, B&B y Velvet (El Corazón del Océano no se merece ni estar en esta lista). Una ya ha sido retirada de la parrilla, otra va por el mismo camino, y el resto están contando con un gran respaldo por parte de la audiencia. Eso no significa nada, que ya sabemos que en este país nos gusta la telebasura al máximo y regalamos share a Sálvame y otros programas del estilo. Desde mi punto de vista, que entiendo la ficción como un entretenimiento que te debe sugerir algo, ya sea alegría, empatía o angustia, en España eso no se consigue. Y quizá ni se busque.
Cuando pongo a parir a una serie nacional me dicen siempre que es una cuestión personal, de gustos, y que debería defender más a nuestra ficción por el simple hecho de estar hecha aquí. Bueno, lo siento, pero soy poco chauvinista (eso para empezar). Segundo, sí, los gustos son subjetivos; pero la calidad no (esto lo aprendí gracias a un lector), y hay algunas series que no me han gustado pero que están muy bien hechas, y si no reconociese su calidad sería imbécil. Lo mismo con las de aquí: no me suelen gustar el 90%, pero si estuviesen bien hechas o las interpretaciones de los actores fueran buenas, lo diría.
No me vale la excusa de que en España todas las series tienen que ser «para toda la familia», porque si se hacen especializadas «no se verían» al no poder verlas «todos juntos a la hora de la cena». Menuda hipocresía. Eso lo debió decir algún día un directivo de Globomedia, y por eso se empeñan en hacer las mismas bobadas siempre. Sea quien sea el que lo dijese, su discurso caló y muchos se lo creyeron. Pero Internet lo refuta por completo; Breaking Bad y Juego de Tronos no son para toda la familia. Ni The Walking Dead. Y miles de españoles las siguen. Incluso los que tienen familia.
Pero es que eso no pasa: ni los actores, ni el montaje, ni las tramas, ni los escenarios… Estas cuatro características, por mencionar unas pocas, suelen ser en las que más fallan los que hacen series en España. No puede ser que con la cantidad de intérpretes que tenemos, un gran porcentaje de ellos en el paro, se coja a los de siempre por su fama y no por su buen hacer ante la cámara. Tampoco debería admitirse que las escenas se atropellen entre sí y no tengan ningún nexo, o que la historia sea predecible y de poca enjundia. Ni que se noten los cromas.
Y por supuesto, habría que darle una vuelta a la duración de los episodios. No es normal sobrepasar los 90 minutos. Aquí nos han engañado y nos han mal acostumbrado, y con esa duración es fácil perderse. Aparte de que muchas escenas son superfluas. El año pasado tampoco fue excesivamente bueno. Tuvimos una que se salió de la norma habitual de mediocridad, que fue El Tiempo entre Costuras. No recuerdo ninguna más. Y sin embargo, seguiré escribiendo de ficción española, porque muchos de los que me leéis las seguís.
Dado que mi postura está más que clara, he vuelto a pedir a amigos y profesionales que me contasen si a su parecer las series españolas son malas, o si en esa burra estamos solo unos pocos. El primero de ellos es Alberto Rey, del blog Asesino en serie de El Mundo, que me inspiró para este post tras uno muy interesante que escribió en el que anunciaba que hablaría cada vez menos de series españolas. ¿Son malas a su juicio? Esta es su respuesta:
Como Jessica Rabbit, las series españolas no son malas, las dibujaron así. Allá por los noventa, con la llegada de la televisión privada a nuestro país y de la obsesión por el share, se generó y popularizó un modelo de serie en España que perdura hasta hoy. Y lo que te rondaré morena. A mí las series españolas pueden parecerme largas, ñoñas, repetitivas y técnicamente mediocres, pero el mercado manda y se las lleva tragando desde hace veinte años. Y la televisión, antes que un arte, es un negocio. Un millón de espectadores valen más que un crítico de televisión. Es lo justo. El consumo de ficción televisiva española es altísimo. El sector quizá no esté pasando por su mejor momento, pero no será por falta de demanda. El espectador (y más el espectador medio, la famosa “señora de Cuenca”) quiere series españolas. De hecho, quiere ESAS series españolas. Y nuestras cadenas se las dan encantadas. Que lo hagan a costa de la calidad, la evolución o el compromiso con algo más allá del vil metal… ésa es otra historia. Que las televisiones públicas entren en ese mismo juego, también. A mí sí me parece que series españolas son malas. Por eso no las veo. Ojo con estas dos últimas frases, porque son más importantes de lo que parecen.
También he solicitado a mi compañero Isra Álvarez, en su condición de observador catódico de 20minutos, su opinión al respecto:
Las series españolas no son malas, son como pueden ser. En España, con solo 47 millones de habitantes (de los que menos de la mitad ven la tele cada noche en prime time) y una cultura seriéfila bastante restringida, las cadenas no pueden permitirse el lujo de hacer series para minorías: no son rentables y por lo general no se hace tele para perder dinero. Así, la industria española se centra en crear ficciones con todos los ingredientes que saben que engancharán a la gente y a cuantos más tipos de gente mejor. Ingredientes que desvirtúan cualquier historia o intento de hacer algo que merezca la pena. En España se han hecho muy buenas series, pero casi nadie las recuerda, porque casi nadie las vio.
Una amiga de este blog, Mar Guerrero (Series a la parrilla), que además es estudiante de doctorado en la Universidad Pompeu Fabra con una tesis sobre narrativa transmedia y fan fiction, pone el foco en otro aspecto del tema que nos ocupa. Esto es un fragmento de su texto, que podéis leer al completo aquí:
Contamos con una configuración demencial de los bloques publicitarios que afecta a la duración y ritmo de los capítulos, y por otro, existe una reticencia en los productores y cadenas a entender al espectador español como alguien capaz de apreciar otros tipo de series más allá del modelo Globomedia de «vamos a hacer que salga hasta el perro de la familia en pantalla». Tampoco debemos olvidar que todo esto no hace más que alimentar esquemas mentales en donde la ficción televisiva es percibida como algo por debajo de la ficción cinematográfica, o un mero trampolín, sobre todo, por parte de los actores y sus mentores. Es sintomático que nuestra televisión no alumbre más jóvenes talentos que sean solventes frente a las cámaras.
Miriam Lagoa, de En Terra de Series, abunda en la famosa «señora de Cuenca»:
A las series españolas actuales les obligan a ser regulares, en el mejor de los casos. Hay talento y hay buenas ideas en busca de una oportunidad pero mientras las cadenas de televisión se empeñen en hacer series que gusten a toda la familia, incluida la señora de Cuenca, con fórmulas saturadas de tópicos y que tengan que estirar por obligación los capítulos por encima de los 70 minutos, la ficción española seguirá llegando con 20 años de retraso.
Y por último, el amigo periodista de 20minutos y escritor David Yagüe (que acaba de sacar novela, por cierto), lamenta la situación de la ficción patria:
Como en botica, en las series españolas hay de todo. Sin embargo, la ficción televisiva española es ‘mala’, en gran parte porque quiere: cualquier buena idea, cuente con medios y buenos actores, acaba convertida, por norma general, en un contenedor para todos los públicos que hace imposible mantener un tono, una coherencia y una cierta profundidad. Es una pena, porque potencial hay y no sé si el problema está en las cadenas, en el público o en las productoras.
¿Qué opináis vosotros? El debate queda abierto.
Si.
27 febrero 2014 | 11:17
Os recomiendo esta carta abierta de @fatynap «Querida Señora de Cuenca» http://innovacionaudiovisual.com/2014/02/19/querida-senora-de-cuenca-deje-de-dominar-la-programacion/
27 febrero 2014 | 11:27
No es que sean malas, es que buscan contentar a todo el mundo, por lo que al final acaban siendo mediocres y cayendo todas en el mismo error: tópicos, argumentos que no hagan pensar, humor chabacano y facilón (Aída, LQSA, ANHQV, etc.).
Las que son menos genéricas han conseguido ser mejores.
Aunque no he seguido muchas series, actualmente ninguna sustituye a mi favorita: Crematorio.
E Isabel, aunque no cuenta con muchos medios, está muy bien narrada: me encanta.
27 febrero 2014 | 11:29
¿Malas? No, sólo aburridas y predecibles. Los productores y guionistas cogen siempre la misma fórmula: culos, tetas, violencia, gente histerica, vecinos chillones, gritos, el typical spain, corrupción, celos, cuernos, caspa…..Y con eso pretenden que algo triunfe. A eso les sumas lo que has dicho tú (los mismos actores y las mismas caras guapas e inexpresivas) y un guion y trama inexistente o aburridas y tienes ¡¡ tachán ¡¡ La Fórmula del Exito…ohhhhhh…..
27 febrero 2014 | 11:34
Es cierto que hay series que se ven porque no hay nada mejor en esa franja horaria. Por ejemplo, Aida, ejemplo de gritos, textos absurdos… dudo que tuviese ese tirón televisivo de existir algún buen producto a la misma hora. Pero no lo hay. LQSA es humor fácil y repetitivo, hay escenas que son calcos de otros capítulos, rayan lo burdo, pero bueno, te ríes un rato y lo mismo: no hay competencia. Dentro de lo malo, lo mejor. De series copia burdas de películas americanas, tipo Luna de Calenda -mezcla de Crepúsculo y la historia del hombre lobo- ni hablo, era ridículo.
Quizás se salvan Isabel, porque es difícil que una serie histórica -con el presupuesto que requiere- enganche y guste como lo ha hecho. El Príncipe me gusta porque es diferente, al menos evita el cliché: gritos/sexo fácil sin venir a cuento/ tacos /
27 febrero 2014 | 11:38
También es importante recalcar que la calidad no va acorde con el presupuesto, al menos en las series generalistas. Por ejemplo «El Barco», una serie cara y de pésima calidad, diálogos lamentables y nada creíbles pero que triunfa porque el espectador o está acostumbrado o espera exactamente le que le dan, la historia de siempre, «chico quiere a chica o viceversa». Sin embargo grandes series como «A dos metros bajo tierra» o «Los Sopranos» han fracasado en la tv generalista en nuestro país.
Aquí se saben hacer grandes series, Juncal, Crematorio, Qué fue de Jorge Sanz…… pero es más rentable clonar una y otra vez o la risa fácil (cacaculopedipis) o el drama casi de telenovela porque es lo que funciona. Pero la pregunta es ¿la gente está aborregada y no quiere ver más allá o las cadenas no quieren arriesgar y apostar por la calidad? Porque series que prometían mucho, «Tiempo entre costuras» empezó de maravilla y se «españolizó» al final. Y «Cuéntame», pufff, mejor no decir nada.
27 febrero 2014 | 11:50
Mi pregunta es, sino te gusta, no paras de criticar (sin aportar nada nuevo post tras post) porque no te dedicas a escribir una??? De vez en cuando viene bien tener gente proactiva que proponga cosas nuevas pero con fundamento no nada de divagaciones…Saludos!
27 febrero 2014 | 11:58
Por cierto, he conocido gente como «la señora de Cuenca», y cuando les dices que no te gustan sus favoritas como Aída, te miran mal y te sueltan, ¿entonces qué te gusta, esas aburridas que te hacen pensar?
Ah, por cierto, añado otra serie que me gustó bastante: Homicidios, con Noriega.
27 febrero 2014 | 12:03
Estoy totalmente de acuerdo contigo, no sé si soy yo que me he vuelto exigente o que seré rara, pero no puedo evitar dormirme en estas congregaciones familiares de las 22:30 delante de la tele viendo estas series que cada vez me parecen peores, mi familia se las traga todas yo sin embargo siento que estoy perdiendo un valiosísimo tiempo en ellas. También es cierto lo que dices de las cadenas, al final se publica lo que vende, nada más, pero me da rabia que esto sea lo que contente a todo el mundo. Lo de las ñoñadas en los guiones sí que es lo peor de lo peor.
¡¡Un saludo!!
Muy buen artículo
27 febrero 2014 | 12:04
El Barco por ejemplo, comenzó siendo una serie interesante y al final cada episodio era un 10% referente a la trama original y el 90% restante a los rollos senti-sexuales entre los protagonistas, con desnudos y semidesnudos para captar a los y las adolescentes cachondos. Vamos, que fueron a lo facilón.
27 febrero 2014 | 12:09
Son malas de solemnidad. Desde los Serrano, ya no ha salido ninguna buena y divertida.
27 febrero 2014 | 12:15
Acusados con Blanca Portillo en el papel de jueza y José Coronado como líder político fue otra gran serie que ahondaba de pleno en la corrupción política y sus mas oscuros poderes.
27 febrero 2014 | 12:16
La que se avecina…
Me gusta, por además critica a la sociedad y a los políticos sin pelos en la lengua.
27 febrero 2014 | 12:17
Aida ha sido una magnífica serie de humor, «La que se avecina» también. Magnificas «Una carta para Evita» y «El tiempo entre costuras». Pero los últimos estrenos son insufribles. Malísimos guiones, malos directores y malas interpretaciones. Y es que no todo vale, porque ahora cualquier amiguete del productor es guionista y cualquier cara bonita o cuerpo gym sirven para la actuación. el resultado de todo este desmadre es el que vemos: Productos que no valen el dinero que han costado y una audiencia que se pregunta si la están tomando por tonta con historias que no hay quien se las crea.
27 febrero 2014 | 12:25
¿Son malas las series españolas? En su mayoría, si. Y ahora, matizaré porqué lo digo. Hay algunas que empiezan con premisas interesantes, pero se las cargan con la excesiva duración de los episodios (nunca, nunca, nunca un episodio de una serie debería durar más de una hora), el uso generoso de topicazos ya insoportables a éstas alturas las lastra, que intenten estirar el chicle durante miles de temporadas hasta que la serie se quema sin remedio, la presión por conseguir/mantener audiencia a costa de lo que sea, la contraprogramación, que pongan a competir dos series a machete en el prime time por lo cual ambas salen perjudicadas, un prime time que empieza a las 22.30 h y acaba cerca de las 00.30 h, con lo cual es imposible engancharse a nada si quieres dormir lo suficiente como para levantarte sin problemas a las 7.00 h de la mañana… La tv española no mima sus series. Y ahí está el problema.
27 febrero 2014 | 12:30
De las de ahora para mi la unica que se salva es Isabel y de las antiguas, acusados y motivos personales, el resto más de lo mismo
27 febrero 2014 | 12:33
Son un horror, las pensadas para hacer reir, groseras y chabacanas y las que van en serio, plagadas de niñatas y niñatos que son pésimos actores, solo las salva el buen hacer del actor/actriz veterano que añaden al casting de caritas monas.
27 febrero 2014 | 12:39
Son pésimas. Solo hacemos culebrones. Los actores muchas veces parecen elegidos por amigos no por méritos.
27 febrero 2014 | 12:40
Malas no.Lo siguiente.
27 febrero 2014 | 12:43
malas no… ¡¡ pésimas !!
27 febrero 2014 | 13:06
Veamos y analicemos la situación. Hace unos pocos años, hubo un boom de programas bazofia de escasísimo presupuesto que triunfaba en televisión. Y la alternativa a éstos eran otros exactamente iguales dirigidos a descerebrados encantados de ver a Belén Esteban, Tamara la Mala y gente del estilo. Era lo que había y salía más que rentable.
Como alternativa a estos programas, algunas cadenas volvieron a apostar por series. ¿Malas? Puede ser. ¿Más saludables que estos programas? Eso seguro. Ahora bien, por barata que sea una serie, nunca lo será tanto como uno de los mencionados programas, por lo que los beneficios que se sacarán de ellas estarán más limitados. La única forma de aumentar la rentabilidad es aumentar el target y la duración, ya que a más duración, más publicidad pueden poner.
En resumen, ¿podrían ser mejores? Obviamente. ¿Podríamos ver cosas peores? Por supuesto, no hay más que poner telecinco por las tardes.
27 febrero 2014 | 13:06
los ladrones van a la oficina eso era una serie y lo de ahora chorradas
27 febrero 2014 | 13:06
En este país últimamente hemos podido ver buenísimas series («El tiempo entre costuras», «Gran Hotel», «Gran reserva», etc) donde se prima la producción y las interpretaciones de los personajes.
La pena pena es que eso no pasa siempre, y en la mayoría de casos tenemos que tragar (si queremos ver alguna serie nacional) con series con decorados de cartón piedra, que además se basan en gritar para provocar la risa ya que gastan menos en guiones que los políticos en ocultar su falta de vergüenza (por ejemplo: «Aida», «Siete Vidas», «La que se avecina», «Ahí no hay quien viva»,etc.)
De todo hay en la viña de nuestras carteleras….
Hemos Visto
http://hemosvisto.blogspot.com
27 febrero 2014 | 13:08
No hombre no, como van a ser malas, eso sería ser demasiado generoso, son malísimas, pésimas, aburridas, soporíferas, insulsas…
27 febrero 2014 | 13:16
En España son una puta mierda xq como todo en este pais son mafias, mismas empresas, mismos actores mismos guionistas en los mismos canales= misma mierda de siempre
27 febrero 2014 | 13:19
Pero si lo hacen por nosotros,¿ no lo entendeis ? Yo al menos, cuando pongo la tele por la noche y veo que no dan nada de calidad en ninguna cadena (la de Cuatro tenía buenas series extranjeras pero la compraron otros y se fué al garete) inmediatamente la apago y me pongo a leer.
Ultimamente ni me molesto en encenderla, asi que me estoy leyendo un montón de libros que tenía pendientes…¡¡ cómo nos quieren los de la tele ¡¡..ains…
27 febrero 2014 | 13:20
Para @yoMisma
Yo no opino que necesariamente una serie larga tenga que ser mala (vease Sherlock) en duración de capítulos (Dr. Who) en duración de temporadas.
Que pasa entonces? en España solemos caer en los tópicos e intentamos contentar a todo el mundo. En mi opinión, y también la he leído por arriba, esto es un error. Las series dirigidas a un público en concreto suelen ser mejores (Breacking Bad, American Horror Hystory, TWD…) no creo que sean series para todos los públicos y sin embargo son buenas.
Otras series ya nacionales (Aguila Roja, Hispania, El comisario / policias…) me parecieron bastante mejores que los temas que van saliendo ahora, que como ya comentaron siguen siempre el mismo hilo.
Ya se que este comentario parece incoherente, pero ahora no tengo tiempo de centrarme mas… si eso, otro rato vuelvo y me completo ^^
Un saludo
27 febrero 2014 | 13:38
Si. Son muy malas todas.
En los USA el nivel es muchisimo más alto en todos los aspectos.
27 febrero 2014 | 13:38
SON MALAS DEL CARAJO., ADEMÁS QUE LOS COMERCIALES DURAN MUCHO Y LOS ACTORES MALÍSIMOS!
LA ÚNICA QUE SE SALVA ES LA QUE SE AVECINA, LAS DEMÁS, PODRÍAN PONERLAS PARA TORTURAR A ALGUIEN.
27 febrero 2014 | 13:41
Cuando hubo una huelga de guionistas en Estados Unidos, la televisión era un caos, claramente a los guionistas buenos hay que pagarles, estoy viendo Velvet porque a esta hora no hay nada que me parezca mas interesante, pero aunque la puesta en escena es impecable, la historia es flogilla y se eterniza con el subo a la terraza, bajo al taller. Esperemos que mejore.
De B&B (la de tele5) es terrorificamente mala, mucho ruido y poca claridad, sólo vi el primer capitulo y no le daré una segunda oportunidad, (aparte de tele5, rellenando con gente en plan mamachicho)
Estoy de acuerdo El tiempo entre costuras, buena novela, buena adaptación, por tanto buenas audiencias
Tb veo Los misterios de Laura, una serie sin grandes pretensiones, pero que a mi familia nos entretiene.
27 febrero 2014 | 13:56
Si una fórmula funciona ¿para qué cambiarla? Cuando la gente se hastíe de verla ya buscaremos solución.
Si una cadena descubre que emitiendo un zurullo estático tiene audiencia ¿para qué va a hacer nada mejor? Mínimo coste, máximo beneficio. El riesgo no sirve más que para especular y fracasar.
Las cadenas del país se han instalado en la comodidad de tener un público fiel. Funcionó Gran Hotel, pues todas las series de A3 bien igualitas. Pones cachas en una serie de T5, pues en todas hay que contratar jóvenes con tableta de chocolate que se quiten la camisa a la menor excusa.
En USA y UK la competencia es tan feroz que sólo quien innove se lleva el gato al agua. Allí también repiten fórmulas trilladas hasta la saciedad, pero algunos guionistas, directores o productoras piensan que el público no es tonto y que les deben dar algo más. Cuando te acostumbras a ver series de grandísima calidad, el producto de aquí está evidentemente destinado a la señora de Cuenca, la que jamás verá las series USA a menos que las emita T5, que se ríe con Matrimoniadas, se emociona con Gran Hotel y que lamenta el final de Aída.
Con todo, tampoco entiendo por qué cuando una fórmula ya no funciona, insisten en emitirla una y otra vez. ¿Alguien se acuerda que Resines tenía un piloto de una serie de gemelos? Hasta Vasile la prohibió cuando vio el desastre habitual.
Está claro que no le enseñaron el piloto de B&b.
27 febrero 2014 | 13:57
Una servidora no piensa ver ni una sola en la televisión por buena que sea mientras haya más tiempo de anuncios que de serie. Es insoportable que cada quince minutos te corten la serie para ver diez minutos de anuncios, ¿se piensan que somos imbéciles o que nuestro tiempo no vale nada?
El problema de las series españolas, salvando unas pocas, es que todas tienen la misma temática: humor absurdo, investigación o historias de amor imposibles. Desde mi punto de vista se salvan las de humor absurdo porque al menos critican nuestra sociedad, el resto aburren a las ovejas.
Entiendo perfectamente que triunfen las de historias de amores imposibles porque sencillamente vivimos en una sociedad más preocupada por lo que hacen los demás que de su propia vida. Es imposible que no triunfen esas series cuando el programa más visto es Sálvame, y cuando las revistas más leídas son las del corazón. Mismamente cuando vas a la consulta de un médico, en el 90% de los sitios sólo habrá revistas basura. Nuestra sociedad está podrida, y las series que le llaman la atención igual.
27 febrero 2014 | 14:00
Sí.
27 febrero 2014 | 14:09
Sobre gustos no hay nada escrito. A mí Los Serrano me pareció infumable, con unos actores pésimos (sobre todo Fran Perea y Verónica Sánchez) y unos guiones inverosímiles. Yo era de Aquí no hay quién viva, que digan lo que digan fue una de las mejores series españolas. Ahora está Lo que se avecina y aunque es todo disparatado y con unos guiones flojos y hasta malos, está salvada por los actores y además, te ríes y es lo que importa. Eso sí: dura demasiado (hasta 2 horas entre anuncios y demás).
Respecto a las series nuevas, sólo veo Velvet, que es una mala imitación de El tiempo entre costuras y Gran Hotel (gran serie pero con demasiadas tramas). Me entretiene y bueno, si no hay otra cosa… (me encanta leer, pero claro, tento k ir a mi habitación y no estoy cómoda).
El Principe no me gusta. Es una serie de trama y no me engancha y me aburre. Los misterios de Laura ultimamente está muy aburrida y no me entero como antes. Así que a leer, aunque esté incómoda.
Así que sólo veo Velvet y Lo que se avecina (prefiero esta última, sin duda).
¿Son malas las series españolas? Yo recuerdo mucho Compañeros, una esepecie de Al salir de clase, que casi no ví, asi que no puedo opinar. Tb Farmacia de guardia (que ya nadie recuerda, pero fue la primera serie que se hizo).
Es cierto que son todas iguales, que los actores son forracarpetas más que otra cosa. Pero bueno, tampoco hay que echar por tierrra nuestro producto. Una muy mala fue El don de Alba, por ejemplo. Vive cantando era pésima pero los actores salvaron la situación (se tiene que hacer otra temporada a petición del público).
Yo creo que con la situación que tenemos tampoco hay que desmerecer tanto lo que se hace. La gente quiere entretenimiento. Y si no te gusta, no lo veas.
27 febrero 2014 | 14:29
Malas no…LO SIGUIENTE
27 febrero 2014 | 14:41
‘Pepa y Pepe’ la mejor serie española de la historia
27 febrero 2014 | 14:44
Además de que las series son malas, ponerlas a las 22:30 tampoco ayuda mucho.
27 febrero 2014 | 14:44
Sin lugar a dudas las que he visto son malas , aburridas y llenas de estereotipos. Eso las de humor que suelen ser las mas pasables. Luego estás serias que son aun peor son patéticas con sobreactuaciones y actuaciones que me dan hasta verguenza ajena. Eso si siempre están los iluminados que pedazo de serie y demas que solo les falta ir vestidos a lo pelicula de berlanga y cantando el americanos.
27 febrero 2014 | 14:49
Pues si, son rematadamente malas.
Pero mucha gente se las sigue tragando a cucharadas. Pasa lo mismo que las inacabables ediciones de Gran Hermano. Vas por la calle y nadie reconocer verlo, todo el mundo echa pestes. Pero luego tiene una audiencia de millones.
Si es que en el fondo nos mola la basura.
No está hecha la miel para la boca del asno y para nuestra desgracia en España somos asnos.
27 febrero 2014 | 14:55
Son horrorosas.
27 febrero 2014 | 15:37
No son malas, son malísimas. Menos mal que puedo decidir que sereis ver y nadie me obliga a ver las españolas.
27 febrero 2014 | 16:35
Para empezar en España, se hacen series de gurú (espero que se me entienda) y no hay quién les tosa. Cuando empiezas a ver el proceso creativo de una serie y ves como empieza a ser manoseado por un productor ejecutivo casi ajeno al proyecto te das cuenta de como va a evolucionar el engendro. Ese productor ejecutivo que se ha tragado dos millones de series americanas enciende el cerebro- thermomix y empieza a cocinar. De ahí viene la repetición, el corta pega, los personajes ramplones (maldito sea el eneagrama, si, hay quien lo usa para crear biblias) y más defectos de la ficción española.
La señora de Cuenca no tiene culpa de nada, seguro que su tiempo disfrutó con «Los gozos y las sombras» o «Juncal». Las series españolas no han sido malas siempre, pero alguien llegó y lo consiguió. Eso si luego le invitaran al festival de TV de Vitoria o a Málaga a dar clases «majistrales» de majo y tal.
27 febrero 2014 | 19:14
Del mismo nivel que lo que se produce en Europa
http://miaholger.over-blog.com/2014/02/juste-pour-le-fun-2%C2%BA-partie.html
27 febrero 2014 | 19:58
Malísimas, pero ¿a quién le importa mientras no las hagan con nuestro dinero? ¿Ah, que sí las hacen? fufufufufuuuuuuuu
27 febrero 2014 | 20:01
No hay que pasar por alto un dato: las productoras NO trabajan para las cadenas, ni mucho menos para el espectador. Las cadenas tampoco trabajan para el espectador.
Trabajan para Danone, l’Oreal, Procter, Unilever, Seat, Coca Cola, etc, etc…
Eso de que las prpductoras, las teles deben dar productos de calidad, de donde lo habeis sacado ?
No son obras de arte, no son series de autor, esto no es cine de arte y ensayo.
Deben dar audiencia, puntos de share a sus anunciantes, que son los que les dan la pasta. SIn ellos, ni tele ni cadena, ni series ni ostias.
Y si a este pais le gusta la mortadela con aceitunas y no el ibérico 5 Jotas, pues habrá que darle mortadela con aceitunas.
O acaso alguien se acuerda de «El Grupo» ?. La mejor serie, de lejos, de… Globomedia !. Excelente, adelantada a su tiempo, no apta para todos los publicos… pues duró un telediario.
27 febrero 2014 | 20:35
Me encanta la parte en la que comentas que seguirás hablando de series españolas que aborreces… porque la gente las sigue. Pues ya tardas en hablar de «Sálvame», Paquirrín y Pesteban, total, la gente los sigue…
Ahora en serio, pocas series españolas has visto. Vale que esto va en cuanto a gustos, pero yo no soy de series españolas por todos los motivos que has expuesto, y más, y recuerdo muchas bastante potables a muchos niveles.
«Siete vidas», por ejemplo. Ahora ven y dime que Javier Camara lo hacía mal 😛
«Gran Hotel» estaba bastante bien, sobre todo cuando quitas a la pareja protagonista.
¿No estaba bien «Farmacia de guardia»?
¿Y «Películas para no dormir»?
A ver si es que nos han educado mal desde fuera y queremos que todo sea «Breaking Bad». Hasta todo lo de fuera queremos que sea lo de «Breaking Bad».
Y sí, las señoras de Cuenca necesitan sus propias series. Que puedes elegir no ver, faltaría más. Ya sabes, por aquello del target y eso…
Por cierto, no sé en qué familia hasta los niños verán «Breaking Bad» pero el día que un padre le comentó a Aaron Paul que su hijo veía la serie, al actor casi le da algo.
27 febrero 2014 | 20:48
Son malas y todas se basan en mezclar la fórmula de «Los Serrano» con alguna otra temática (policías, bomberos, médicos, periodistas, alumnos de un internado…). Es siempre el mismo perro con distinto collar. Eso o comedias casposas del tipo a las de José Luis Moreno.
Recomiendo este artículo con el que estoy al 100% de acuerdo al respecto de este tema: http://bocabit.elcomercio.es/cine-y-tv/lios-de-faldas-ninjas-y-nazis-en-el-sotano
27 febrero 2014 | 21:13
Creo que el autor de la opinión no conoce la realidad completamente diferente sociológica de Estados Unidos y España. Comparar series de la HBO con la ficción española es atroz. En España no hay canales de pago donde la audiencia es más fragmentada y donde el share no importa tanto. Comparar «Juego de tronos» o «Breaking Bad» con la ficción que se realiza en España es como comparar la carne de ternera con la de pollo. Nada más ver que cita como primera referencia a Alberto Rey ya, personalmente, se pierde la credibilidad del bloguero. ¿Tener en cuenta la opinión de un crítico abiertamente escéptico con las series nacionales y que las insulta abiertamente, sea cual sea, poniendo por las nubes casi toda serie anglófona? La ficción española no se puede comparar con la estadounidense y viceversa.
Además, en España hay exquisita ficción española más allá de «El tiempo entre costuras» como lo son «Isabel», «Gran Hotel», «Gran reserva» y «Los misterios de Laura». Que, por cierto, su target no es la señora de Cuenca porque en las series que he nombrado no se cumplen los cánones de Globomedia. ¿Por qué el bloguero no cita la mejor ficción española que se ha creado a día de hoy que es «Crematorio» de Canal+?
«Crematorio», única serie creada por un medio de pago, es una calidad incuestionable y ahonda en temas
donde las ficciones españolas no se han atrevido a entrar.
Sí, es verdad que hay bazofias en España, pero, ¿acaso en EE.UU. no las hay? ¿el país donde reinan los realities show sobre petardas que van a comprar a Beverly Hills? Además, comparar a un país que físicamente es más grande que el continente europeo con un país que cabe en casi cualquier estado estadounidense es algo que, en fin…
Lo siento pero este post es demasiado parcial.
27 febrero 2014 | 23:28
Sinceramente, cuando acaba El Intermedio me acuesto y no pierdo un minuto de rico sueño con esas series tan tediosas, predecibles y con unas interpretaciones tan lamentables. No soy capaz de aguantarlos ni 5 minutos.
28 febrero 2014 | 10:19
no os entiendo, de verdad.
nadie obliga a ver una serie o un programa que no gusta y ese formato que decís tan casposo y antiguo sigue triunfando así que respetad a la gente que le gusta.
además tengo que decir que esas series de las que habláis que son tan buenas, extranjeras y con tan buenos actores y tramas muchas veces han salido en la televisión española y nunca lograron triunfar.
con esto no quiero que penséis que soy una señora de cuenca si no que soy un hombre de Galicia jaja
28 febrero 2014 | 11:55
cuando una serie tiene buena audiencia y triunfa (LQSA, Los serrano…) no queda más remedio que reconocer que algo ha hecho bien y dejarse de criticar.
respetad los gustos de la gente y no llaméis mierda a las series que son mucho mas vistas que la vuestras que por algo será….
28 febrero 2014 | 11:59
Las series españolas son igual que nuestros políticos, malas, malas, malas. Y lo que es peor nos quieren hacer comulgar con ruedas de molino, y hacerlas pasar por grandes obras, vamos igual que los políticos. Empecé a ver «El Príncipe», y a los dos minutos la quité. Nada más ver al protagonista, tan guapo que no «parece real», corriendo tras un niño para salvarlo de un atropello, en una escena tan patética que daba vergüenza ajena, y que para más inri, acaba con el agradecimiento de la familiar del niño (hermana supongo, y por supuesto guapisisima) al policía, y esa caidita de ojos que ya te está diciendo todo lo que va a pasar, es realmente la-men-ta-ble. Ah, y en una escena, también aparecían los que supongo que eran los malos, y eran todos también guapisisimos, que más que una serie, parece un concurso de belleza. En fin que no puedo más que acordarme de Tony Soprano, con su barriga, su mal gusto, la hortera de su mujer, y todo el ambiente macarra que lo rodea, en fin, creo que optaré por volver a ver Los Soprano, que aunque ya la haya visto seguro que me sorprende más que todas estas series españolas.
28 febrero 2014 | 12:51
Velvet es una copia de la inglesia PARADISE. La versión inglesa transcurre a finales del XIX / principios del XX… Y hasta se puede entender que los empleados vivieran dentro de los almacanes. Ahora, que Galerías Preciados o El Corte Inglés tuvieran un internado en los 50, pues no lo sabía. Como tampoco entiendo que la dueña de un cabaret utilice su propio hotel en plena Gran Vía de Madrid para alojar a su tropue antes de ponerlo a funcionar para salir de los números rojos. Y es que esto de andar de «conventillo» ahorra mucho en decorados. Tampoco entiendo que ningún vecino de ninguna serie española tenga vida privada: se pasan la vida fisgoneando en las ajenas. Tampoco entiendo que los personajes no prosperen: ¿EL cookie de LQSA no era director de un banco? ¿Por qué el portero de ANQV no pudo terminar derecho? ¿la gente no estudia o trabajo y tiene vidas normales?
En fin…
28 febrero 2014 | 13:07
Estoy muy de acuerdo con todo lo que has dicho de las series españolas. Sin embargo, se te ha olvidado mencionar un factor que nos impide competir con series norteamericanas: el DINERO.
En Estados Unidos invierten en cada episodio, de series como Juego de Tronos o Breaking Bad, lo que aquí en España nos gastamos en una película (4 millones de dólares).
Y aunque una mayor inversión no garantiza mejores resultados, la realidad es que ayuda; tal como ha demostrado «El tiempo entre costuras», con un presupuesto de 500.000€ por episodio.
28 febrero 2014 | 14:13
Me parecen absurdas muchas de las cosas que se vierten en este artículo. Para empezar es muy sencillo echar tierra al trabajo de muchos profesionales y quedarte tan ancho, simplemente para que cuatro que te leen te toquen las palmas y te hagan vítores. Tendemos a defender y divinizar lo que nos viene, principalmente, del mercado estadounidense y rechazamos desde un primer momento cualquier producto nacional, tachándolo de mediocre. Parece ser que si no salen zombis, vampiros, hombres lobo o historias surrealistas no merece la pena de ser visto. Tanto que ensalzamos el estilo americano, que alguien me explique por qué muchas series extranjeras han terminado desinflándose en audiencia mientras que otras españolas cada día crecen más. Se nos olvida que la tele es negocio, y no se ofrece otra cosa mas la que se demanda.
28 febrero 2014 | 18:22
Estoy de acuerdo en parte de lo que dices.
Yo sí creo que las cadenas de tv no van a arriesgar su dinero para hacer una serie dirigida a dos millones de persones aunque sea una obra de arte.
Al final, la carrera del share y los cinco millones de seguidores los han enloquecido y solo buscan más y más. Ahora, también pienso que quizá a nosotros también nos falta algo de educación en televisión y no caer delante de la caja tonta y tragarse la caspa con tal de no ponerse a pensar.
Por otro lado, las series españolas (aunque no sean las mejores) alimentan a un montón de personas en este país y tampoco está el tema para hacerles boicot.
01 marzo 2014 | 00:18
La verdad es que me encantan las series, pero no veo series españolas, alguna vez he visto «Aguila roja» me llevo cada decepción, con cada capitulo, y me parece que es una gran idea y los guionistas no saben sacar partido a esta idea.
01 marzo 2014 | 10:57
No suelo verlas, me aburren al ver los tópicos… además soy de una generación que vio a muy buenos actores españoles, series, novelas… muchas menospreciadas por ser anteriores a 1977, es que a los actores de ahora no me los creo, los veo lineales… por lo menos en lo tocante a series dramáticas, las comedias pueden ser otra cosa, por lo menos cumplen el objetivo de hacerte pasar un buen rato, aunque no todas. Ni me imagino un intento de «the big bang theory» «Dexter» «Modern Family» etc. a la española… y ¡ojo!, que los anglosajones cuando les sale algo malo, es malo pero de verdad… Resumiendo, ahora hay una generación de actores que me los puedo encontrar con la misma conversación de «guays pijos» que en la serie que interpretan, por eso no me llega el personaje, no transmite nada, los actores de toda la vida que les ponen al lado se los comen con sopas.
05 marzo 2014 | 14:58
Pullas, en vez de puyas.
Ahonda, en lugar de abunda.
Fallos que un periodista no debería permitirse si quiere ser buen profesional.
14 marzo 2014 | 14:18
Aparte de todo lo comentado… el problema también está en el tono interpretativo. Las series españolas son en general malas, porque se sobreactúa demasiado, se abusa del intentar dar dramatismo en base a unos tonos de voz, una manera de hablar que no son creíbles. Ves el equipo A y ningun actor parece que esté actuando, tienen tonos de voz normales… pero aquí da lástima ver a actorazos, realizando interpretaciones lamentables y la culpa no es de ellos, es el tono que les «obligan» a realizar. Aparte se nota que están hechas con prisas porque muchas tomas son reálmente mejorables.
Si hiciesen (por citar de nuevo) el Equipo A versión española, solo tendría dos tonos, o el cómico jocoso a lo Segura, o un tono sobreactuado que resultaría totálmente no-creíble a lo Aguila Roja. Es una lástima, pero es lo que hay.
18 marzo 2014 | 11:40