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El 'happy place' de las series de televisión

Archivo de la categoría ‘género negro’

‘Narcos’: Javier Cámara ensaya el famoso «hijueputa, malparido» para su debut en la serie de Netflix

NarcosNo hay duda de que es un momento excelente para los actores españoles en la teleficción internacional. Miguel Ángel Silvestre en Sense8, Juan Diego Botto en Buena conducta, Antonio de la Torre y Marta Torné en El infiltrado, Verónica Echegui en Fortitude… Hace unos días conocimos una noticia a este respecto que nos hace especial ilusión, ya que involucra a un intérprete muy querido, que protagonizó además una de nuestras grandes series, 7 vidas. Javier Cámara ha fichado por la tercera temporada de Narcos, después de haber participado en la serie The Young Pope; en ella interpretará, como podemos esperar, a uno de los peligrosos narcotraficantes que heredan el imperio del tráfico de drogas nacido en Colombia en los 80.

Netflix ha aprovechado el calor de la reciente noticia para dar algo de bombo al comienzo de la producción de la tercera temporada, y ha preparado un vídeo en el que Javier Cámara ensaya su acento colombiano. Compartida hace unas horas en redes sociales, en la cuenta de Netflix España, la pieza de 30 segundos nos muestra a Javier Cámara practicando el ya famosísimo «hijueputa, malparido», la expresión con la que Pablo Escobar (en este caso Wagner Moura) firma sus mejores frases de guion. ¿Le veis preparado? Seguro que estará a la altura del resto del reparto, y esperamos también que le dejen algún momento cómico para lucirse como lo hiciera en 7 vidas, la mítica telecomedia que le convirtió en todo un fenómeno hace unos años.

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‘Breaking Bad’: Bryan Cranston revela su escena más dura en un libro biográfico

Breaking BadEl pasado 29 de septiembre se cumplieron tres años del desenlace de Breaking Bad. Tres años sin la oscura compañía de Walter White, tres años sin la cáustica adicción a las que nos condenaron Vince Gilligan y su equipo, y aún hoy es difícil concebir una televisión sin ellos. La actualidad nos ha devuelto la serie de AMC en las últimas semanas, debido a la publicación de A Life in Parts, un audiolibro autobiográfico en el que Bryan Cranston repasa su vida y sus papeles más importantes. Heisenberg ocupa un lugar de excepción en su trayectoria y en su recuerdo. El actor californiano, conocido anteriormente por su participación en Malcolm, recibió a los 52 años el personaje del profesor metido a emperador de la droga, todo un caramelo para un veterano del gremio. No solo consagró uno de los antihéroes más fascinantes de la pequeña pantalla, también se convirtió en un profesional de cabecera para los que amamos las series.

¡SPOILERS! Si aún no has visto Breaking Bad, no continúes leyendo.

El medio norteamericano Entertainment Weekly publicó hace unos días un extracto exclusivo del audiolibro de Bryan Cranston, en el que narra «la escena más desgarradora» que protagonizó en Breaking Bad. ¿Os animáis a lanzar alguna apuesta? La mía era Ozymandias, el capítulo más memorable de la serie, en la quinta y última temporada, cuando los traficantes con los que se halla involucrado Walter White asesinan a su cuñado Hank. Sin embargo, la seleccionada por el actor se trata de la muerte de Jane (Krysten Ritter), la novia de Jesse Pinkman, a la que ve asfixiarse con su propio vómito en Abiquiu, en la recta final de la segunda entrega. La elección cobra sentido si analizamos otro de los episodios de A Life in Parts, en el que cuenta su relación sentimental con una mujer adicta a las drogas, víctima de una sobredosis en la que, por suerte, no murió. Al parecer, vivió incluso una ensoñación en la que él mismo acababa con la vida de ella.

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‘Luke Cage’, de Netflix y Marvel: el superhéroe que llegó de Harlem

Luke CageHay quien dice que los títulos de Netflix a partir de las creaciones de Marvel son ficciones de superhéroes para aquellos a los que no les gustan los superhéroes, y algo de razón no les falta. La intención de este encuentro televisivo marvelita es desmitologizar el género, rebuscar entre sus fábulas para dar con el componente más humano. No es que desde las mismas páginas de la franquicia no lo hayan hecho, pero la pretensión adulta de estas series es prácticamente su carta de presentación. El enfoque social y moderno es un elemento imprescindible de su propuesta. Si en Daredevil el fantasma de la corrupción institucional estaba más que presente, y Jessica Jones abordó desde las coordenadas superheroicas la huella de la violencia machista, Luke Cage debía encargarse de otro debate de actualidad, como imagináis, la cuestión racial.

El dilema que muchos ponen sobre la mesa, sin embargo, es otro: una cosa es que estas series hayan rescatado ciertas polémicas en el disparadero de la teleficción y otra que su tratamiento sea más o menos acertado. El caso de Luke Cage es muy curioso e interesante, pues encara los mismos retos a los que se enfrentó su nacimiento en Marvel en los años 70, cuando el afán de los creadores por incluir contextos y personajes del colectivo negro alumbró la blaxploitation. ¿A qué nos referimos con este término? A un género cultural de aquellas décadas (el ejemplo más popular es Shaft) que creó sus propios estereotipos, según los más críticos basados solo en la imagen que los blancos tenían de ellos. ¿Logra el Luke Cage de Netflix superar la exploitation de la comunidad que retrata o relega la lucha de su personaje a la moda progre del momento?
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¿Cuáles son las mejores series de televisión de la historia?

Los SimpsonHay preguntas que nunca pasan de moda, y para las que nunca tenemos una respuesta infalible, como cuál es el sentido de la vida o de qué planeta venimos los autónomos. La de cuáles son las mejores series de la televisión nunca falla, y eso que, en el panorama actual, pasada la edad de oro que consagraron Los Soprano, The Wire o Mad Men, la teleficción es un fenómeno inabarcable. Dos publicaciones de las últimas semanas han rescatado la polémica: TV (The Book), un ranking-ensayo de los más grandes títulos norteamericanos, de dos críticos muy populares en Estados Unidos, Alan Sepinwall y Matt Zoller Seitz, y la lista que la revista Rolling Stone concedió al mismo tema, pero con amplitud internacional. Entonces, ¿cuál es la mejor serie de la historia? Los Simpson en el primer caso, Los Soprano en el segundo.

Recupero esta cuestión para la primera entrada del blog porque precisamente es más interesante el debate que el resultado. Hoy que cientos de proyectos televisivos se estrenan anualmente en Estados Unidos, que el empuje de la ficción europea y de otras latitudes es incuestionable, que géneros antes marginados tienen por fin su legitimación, que estamos condicionados por la actualidad y las modas del momento, es imposible lanzar una respuesta segura a la eterna duda catódica. Sirva esta entrada como declaración de intenciones: a Smelly Cat le gusta la televisión, la buena televisión, pero pasa de cánones y prejuicios. Y como carta de presentación, mi lista de las 10 mejores series de televisión de la historia. Pero no os fieis demasiado porque mañana tal vez serán otras; es más interesante el debate que el resultado.

10. Crematorio
Comenzamos con la concesión nacional. Las dos últimas temporadas han sido estimulantes para la televisión española, como seriazas como El ministerio del tiempo o Vis a vis, pero me quedo con Crematorio. La serie que estrenó Canal + en 2011, creada por los hermanos Jorge y Alberto Sánchez-Cabezudo, es la única capaz de batirse en duelo con lo mejor del cable y la televisión pública extranjera. Elegante, inteligente y muy española: el progreso y la corrupción.

Crematorio
9. Borgen
No ha sido cosa de una noche, pero la teleficción europea (más allá de la británica) por fin va alcanzando el status que merece, no solo entre los rankings de calidad, también en las cadenas españolas e incluso entre la opinión pública. Borgen es la gran serie europea del siglo XXI, un fenómeno que ha superado las fronteras danesas para insuflar vida y pedagogía a un género muy complejo: existen políticos buenos como Birgitte Nyborg que pueden enseñarnos algo.

Borgen


8. Sherlock

Lo mío con Sherlock es debilidad. La televisión británica, guiada por el modelo público de BBC que han seguido cadenas como ITV o Channel 4, presume de una excelente media de calidad-cantidad (aunque a nosotros siempre nos llega lo bueno, claro). Sherlock es el exponente elemental (guiño-guiño) de las glorias catódicas de aquella tierra: actualiza con acierto una de las grandes leyendas de su cultura y tiene ideas narrativas y visuales brillantes. Es pura épica.

Sherlock

7. Los Simpson
El título preferido de los autores de TV (The Book) se ha colado finalmente en el top. No voy a negar que los últimos años de mi relación con la familia amarilla han sido bastante difíciles, ya que todas las series tienen una vida y esta está estirando vilmente la suya. Los Simpson no es lo que era, eso es cierto, pero también que durante años ha sabido trascender la comedia y la animación para convertirse en la gran sátira de la sociedad estadounidense, y en eso es única.

Los Simpson

6. Expediente X
No es fácil encontrar una serie de ciencia ficción en las listas canónicas de lo mejor de ningún ámbito en la cultura popular, pero a Expediente X le quedan pequeñas todas las etiquetas que le podamos poner. La ficción de Fox y Chris Carter es el ejemplar paradigmático de la fórmula a la que pertenece, pero también un monumento a la televisión en abierto y a los míticos casos de la semana. Todo lo que podamos ver en las series de network, Expediente X lo hizo antes.

Expediente X

5. Twin Peaks
En 1990, años antes de la explosión de las series del cable norteamericano, fue una cadena en abierto, ABC, la que se atrevió a concederle lugar en su prime time al siempre particular David Lynch. El cineasta, por entonces, de El hombre elefante y Terciopelo azul, y el guionista Mark Frost (que hizo el trabajo duro pero no se llevó el mérito) firmaron la insólita Twin Peaks, hito de la tele de autor. Su evolución fue irregular, su final WTF, pero nunca deja de ser hipnótica.

Twin Peaks

4. Mad Men
La zona caliente de la lista la inaugura Mad Men, uno de los grandes relatos sobre la condición humana y la mejor crónica de los revolucionarios años 60 en Estados Unidos que se puede ver en televisión. No en vano a Matt Weiner, curtido en el equipo de David Chase en Los Soprano, se le considera uno de los autores más difíciles por su perfeccionismo extremo, pero también de los más lúcidos. El ascenso y caída de Don Draper son la historia de la misma Norteamérica.

Mad Men

3. The Wire
Es imposible comprender la televisión contemporánea sin The Wire. David Simon, periodista kamikaze y escaldado de las penurias de su ciudad, Baltimore, perfeccionó en HBO una de las fórmulas catódicas más influyentes hoy, el policíaco de compromiso social que él mismo ya había puesto en práctica en Homicidio y The Corner. Esta, su gran obra maestra, se convirtió en la radiografía de la delincuencia y el racismo estructural en cada rincón de Estados Unidos.

The Wire

2. Breaking Bad
La maniobra de Breaking Bad fue la contraria: hizo de otra lacra social, el implacable sistema sanitario estadounidense, una muestra de puro género negro. En la ficción de AMC se reúnen Sam Peckinpah y Scarface, aunque es a Vince Gilligan, guionista de la escuela de Expediente X que aquí firmó su primera creación propia, a quien le debemos el tour de force entre Walter White y su despiadado Heisenberg. Una serie dolorosísima, un puzle prácticamente perfecto.

Breaking Bad

1. Los Soprano
Tu serie preferida y la que para ti es la mejor no tienen por qué ser necesariamente la misma, pero en este caso, en mi caso, sí es así. No solo es que Los Soprano me parezca el gran título bisagra entre las series y LAS SERIES, sino que además es una historia apasionante y divertida con personajes tan míticos como humanos. La suerte de Tony Soprano es la de todos nosotros, la fábula final sobre la familia, el deseo y la responsabilidad, sobre el hombre y sus miserias.

Y para concluir la lectura, sed bienvenidos a Smelly Cat; espero que sea para vosotros el happy place que es para mí. Nos leemos en próximas entradas y en @VictorMGonz, ¡y comentad lo que queráis!

Los Soprano