Sin efectos especiales Sin efectos especiales

-No deberías llevar esa ropa. -¿Por qué? Sólo es una blusa y una falda. -Entonces no deberías llevar ese cuerpo. 'Fuego en el cuerpo', de Lawrence Kasdan

Entradas etiquetadas como ‘goyas’

¿La gran noche del cine español?

Hoy es el gran día, se entregan los premios más importantes del cine español: los Goya. Yo voy a intentar ver la ceremonia, no porque realmente me apetezca- lo siento, la gala me suele parecer bastante aburrida, solo la vis cómica de Rosa Mª Sardá logró engancharme hasta el final de la ceremonia, la echo de menos- si no por solidarizarme con el cine español, que está de luto.

Nadie quiere ir a verlo, nadie valora sus logros, a nadie le importa que deje de proyectarse. Hace unos días Icíar Bollaín se quejaba de que en España a la gente del cine se la veía como a chupópteros, al contrario de lo que pasaba con otras profesiones, como escritores o músicos, que sí eran valorados, y le echaba la culpa a la imagen que algunos medios de comunicación han transmitido sobre ese mundillo. Creo que tiene algo de razón, que muchas veces se frivoliza con el mundo del cine, porque para muchos son unos privilegiados que no se merecen la atención que tienen.

En mi entorno la gente sí sabe apreciar una buena película. Nos gusta el cine y reconocemos el talento y el esfuerzo que hay detrás, lo que pasa es que el cine español, por lo general, nos da pocas alegrías. Este año algunos de los buenos momentos nos los han proporcionado, Bollaín, con ‘Mataharis’, Bayona, con ‘El orfanato’, Gracia Querejeta con ‘Siete mesas de billar francés’ o Félix Viscarret con ‘Bajo las estrellas‘. ¿La gente sabe apreciar a estas películas y a sus autores? Pues yo creo que tanto como se aprecia a un buen escritor o a un buen pintor, es decir, más bien poco.

Esta noche cruzaré los dedos para que ganen premios algunas de mis estrellas preferidas, pero sobre todo, para no aburrirme y añorar, un año más, lo bien que se montan estos espectáculos los yanquis. Veré lo que pasa por la tele y seguiré las reacciones de los protagonistas, minuto a minuto, en 20 minutos. Isra y Rafa estarán ahí, al pie del cañón, trayéndonos las declaraciones de las estrellas. Que paséis una buena noche de cine.

P.D. Dicen que Javier Bardem irá a la ceremonia.¿Seguro? Eso le añadiría algo más de atractivo a los premios.

Socorro, periodista a la vista

Este fin de semana se celebró la tradicional gala de presentación de los nominados a los Goya, una cita organizada para que éstos tengan la oportunidad de charlar entre sí en un clima más relajado que el de la ceremonia de entrega de premios y hablen con la prensa. Yo he tenido la oportunidad de asistir un par de años y lo recuerdo como una experiencia divertida, pero sumamente estresante. ¿Por qué? Porque la mayoría de actores, el objetivo preferido de los periodistas, llegan a la fiesta más que hartos de promociones, entrevistas y sesiones fotográficas, y huyen como de la sarna de cualquiera que se les acerque con un micrófono en la mano.

El resultado es que te pasas media noche intentando enganchar a algún rostro conocido que quiera contestarte a tu batería de preguntas, aunque se suponga que han ido allí para eso. Así que, como siempre, te acaban atendiendo los más pacientes y simpáticos, los únicos que se han parado a hablar con todos los demás medios. Es decir, que tienes muchas posibilidades de que al día siguiente te encuentres una entrevista parecida a la tuya, al mismo personaje, sobre la misma película, en otro medio de la competencia. Todavía no he hablado con mi compañero Israel, que ha cubierto la gala este año, y no sé qué tal le habrá ido a él. Por el vídeo, parece que al menos se divirtió.

Y todo esto sin contar con que las estrellas que más brillan en el universo, ya sean actores o directores, generalmente pasan de asistir a este encuentro, alegando, cómo no, motivos profesionales. A veces echo de menos la profesionalidad de la que hacen gala las grandes estrellas de Hollywood durante las promociones. He tenido la suerte de entrevistar a unas cuantas y todas ellas se mostraron educadas y colaboradoras. Si llegaron a pensar que mis preguntas eran un rollo o que yo era un ser unicelular, lo disimularon con elegancia.

Yo, personalmente, nunca he tenido una mala experiencia con ningún actor español, incluso he conocido a gente bastante agradable (al contrario que algunos compañeros míos que me han contado anécdotas terribles); pero sí he acabado más de una entrevista con la sensación de que el entrevistado me había hecho el favor de mi vida al concederme cinco minutos de su valiosísimo tiempo.

Y tú ¿has tenido alguna mala experiencia con algún artista español?