Entradas etiquetadas como ‘equilibrio’

Por qué necesitas decantar la balanza hacia el ser

Hoy conversaba con una amiga a quién le han ocurrido un conjunto de despropósitos mayores uno detrás de otro, y todo en medio del covid. Hasta hace nada, la encantadora Veronica – le voy a llamar – solía ser una súper mujer, trabajando a tope y llegando a todas partes con gracia, tesón y a menudo… a punto del burnout. Ahora en las antípodas de su ritmo habitual, me decía, “después de todo lo ocurrido quiero contentarme con lo que tengo. No pienso en el mañana, me fijo en el día a día. Me alimentan las pequeñas alegrías cotidianas. Ir a comprar, preparar la cena, conversar como ahora estamos haciendo”. Le dije que mi impresión era que más allá de su situación, la crisis del covid había inclinado la balanza personal y colectiva hacia el ser. A lo que me leyó dos citas del monje vietnamita Thich Nhat Hanh, fallecido el mes pasado:

“Hacemos tanto, corremos tan rápido, la situación es difícil y mucha gente dice: ‘No te quedes ahí sentado, haz algo’. Pero hacer más cosas puede empeorar la situación. Así que deberías decir: «No hagas nada más, siéntate ahí». Siéntate ahí, detente, sé tú mismo primero y comienza desde allí”.

Flores

(Magda Barceló)

Jose a quién acompaño a través del coaching, estuvo a punto de morir dos veces. Su talante es directo, alegre y perspicaz. Tiene la inconfundible presencia desnuda del que estuvo a punto de irse y no lo hizo, transformando por completo su personalidad después de ello. “Le he visto las orejas al lobo y esto lo cambia todo”, me decía.

La enfermedad – la conozco bien – nos obliga a hacer cambios de carácter que no podríamos hacer de otro modo. Si la dejamos, suaviza las afiladas aristas de nuestros egos. También lo consiguen la tragedia y todo lo que nos rompe y que preferiríamos evitar. Lo indeseable te acerca brutalmente a lo extraordinario de simplemente ser. ¡Es tan jodidamente efectivo el mecanismo!

“Tenemos la tendencia a pensar en términos de hacer y no en términos de ser. Creemos que cuando no estamos haciendo nada, estamos perdiendo nuestro tiempo. Pero eso no es cierto. Nuestro tiempo es primero de todo para que nosotros seamos. ¿Para ser qué? Para estar vivo, para ser pacífico, para ser alegre, para ser amoroso. Y esto es lo que el mundo necesita más. Todos tenemos que entrenarnos a nosotros mismos en nuestra forma de ser, y ese es el terreno para toda acción. Nuestra calidad de ser determina nuestra calidad de hacer.”

Gracias por tanta sabiduría Thay, tu legado resuena en nosotros.

Y tú, ¿De qué forma te vas a entrenar en el ser? ¿Cómo vas a simplificar tu vida para hacerlo? ¿Qué vas a abrazar? ¿Qué superficialidad vas a soltar?

Te puede interesar:

·      No es la muerte, es el miedo. ¿Cómo segar el miedo a morir?

·      La responsabilidad radical es la solución: ponla en práctica con cinco pautas

 

Encuéntrame en FacebookInstagram y Twitter.