En el post anterior te invitaba a recordar tu muerte. Lo hacía argumentando que no es la muerte lo problemático, sino el miedo a ella. Y es precisamente ése miedo el que hay que afrontar si queremos evolucionar.
LA MUERTE DE SOSLAYO
Existen dos formas de relacionarse con la propia muerte. La primera y más habitual es mirar la muerte de soslayo, así como quien no quiere la cosa. Sabes que existe, que tendrá lugar pero prefieres no pensarla, no nombrarla, no considerarla. ¡Quien sabe, a lo mejor al final no te toca! El problema con este enfoque, a menudo inconsciente es que alimenta el miedo a la muerte y aumenta el apego a lo que tienes y a lo que eres. El miedo te contrae desconectándote del momento presente y el apego aumenta tu sufrimiento.
MIRAR LA MUERTE A LOS OJOS
La segunda y a la que te invito es la de mirar a la muerte de frente, llevándola a tu consciencia a menudo, sin obsesionarte con ella. Imagínate que estás dormido, te levantas y te das una ducha de agua fría. ¡Te despertarás en seguida! Pues llevar la consciencia de la muerte tiene el poder de desarticular el miedo a ella y despertarte a la vida. Una vez atravieses el portal del miedo a morir, te darás cuenta de cuán insustancial es y podrás paradojalmente volver a la vida. Disipado el miedo, puedes relajarte y orientarte hacia aquello realmente importante para ti. La conciencia de la muerte es un aniquilador rotundo de neuras sin importancia, procrastinación y otros patrones sin sentido.
DESARMAR EL MIEDO A MORIR EN DOS PASOS
Te presento dos formas para desarmar el miedo a morir.
1- LOS CINCO RECORDATORIOS
La primera es recitar los cinco recordatorios1 tres veces una vez al día durante ocho semanas. Luego observa lo que ocurre.
- Estoy hecho de la naturaleza del envejecer. No evitaré la vejez.
- Estoy hecho de la naturaleza del enfermar. No evitaré la enfermedad.
- Estoy hecho de la naturaleza del morir. No evitaré la muerte.
- Todo lo que me gusta y todos los que quiero están sujetos a la naturaleza del cambio. No evitaré separarme de ellos.
- Mis acciones son mis compañeras más cercanas. Soy el receptor de mis acciones. Mis acciones son el suelo sobre el que me planto.
2- HABLA DE TU MUERTE
Hablar de tu muerte no tiene por que ser algo morboso. Lo puedes hacer con candidez y naturalidad. Considera estas preguntas para abrir un diálogo sincero con personas cercanas sobre tu muerte: ¿Cómo imaginas tu muerte? ¿Cómo te gustaría? ¿Qué sientes al respecto? ¿Qué te da miedo? ¿De qué te gustaría estar orgulloso en el momento de morir? ¿Cómo puedes incorporar estos aprendizajes en tu vida, ahora?
Una vea lo hagas, olvídate de ello.
Tu miedo a morir volverá crecer al igual que la maleza. Cuando lo haga, conocerás su naturaleza. Siégalo con estas prácticas u otras de tu cosecha y será tu aliado para vivir ;).
(1) Del Upajjhatthana Sutta
Al morir no existen nuestros pensamientos.
Ni siquiera recordamos nuestras vivencias.
Pasarás por un momento de pánico horrible como jamás hayas sentido nunca antes y ni siquiera entiendas su origen, incapaz de comprender su tremenda profundidad. Pero antes también lucharás con las nubes intentando agarrarlas para salir de la pesadilla psicológica en la que te vas hundiendo. Puede que veas también cómo asciendes por una espiral de luz mientras las paredes se vaporizan, se transparentan, entre neblina, y vuelas hacia arriba suavemente si tienes suerte y superas el terror primero. Puede que sientas y veas también cómo tu rostro se va separando del resto de tu cabeza y se prolonga dejando atrás filamentos de plata, como si una careta se alejara de tu conciencia. Ahí puede que te des cuenta de que vas a morir. Puedes ver entonces un túnel cuya luz final se acerca.
En esos momentos no existe ninguna creencia, ninguna bandera, ninguna familia, ningún amigo. Vas en soledad hacia alguna parte y algo te mira por dentro, como un escáner muy silencioso que te examina por dentro. Ni siquiera tu pensamiento de esta realidad es igual. No hay secretos, ni hipocresías. Se desnuda tu alma fuera de tu control y se somete a las de otro control que no necesita de lenguas, ni de gente, ni de banderas ni fronteras, ni aficiones. El lector busca sin tener en cuenta esos principios nuestros del día a día sujetos a cada cultura. Lo que haya más allá, sea o no sea sensorialmente sentido, seguirá siendo en esta realidad un misterio.
07 enero 2022 | 10:56 pm
Los que tienen miedo a morir, tambien tienen miedo a vivir por la incertidumbre que les produce no saber que les deparará el mañana.
09 enero 2022 | 12:59 pm