El otro día llegamos a un acuerdo por casa. No tengo bien claro de donde partía la idea o quién salió palmando o ganando del pacto. El asunto es que hemos creado un blog para la (ficticia) productora de monigotes de mis hijos. Ellos se hacen llamar Neurona en Acción. Así reza una pegatina de las cuantas que convierten la puerta de su cuarto en un tablón de la facultad (solo faltan anuncios de fiestas en el césped).
En definitiva. Subiendo a la red los más desternillantes monos pintados en escasos segundos por mis chavales, presentamos Neurona en Acción. Ansiosos están los autores por responder los comentarios en su blog. Todo bajo supervisión parental, si bien esto puede ser una desventaja teniendo según qué padre.
Ahí teneis las aventuras de Kiko, el superhéroe más pequeñín, y un repaso a lo que surge de una mente de 7 años (MundoNeurona).
«si bien esto puede ser una desventaja teniendo según qué padre.»
Te prometo que estaba pensándolo mientras leía.
Si algún día hago algo parecido con mis bastardos ¿intentarás sangrarme a lo Ramoncín?
Es una pregunta retórica. Corres más que yo.
Salud.
19 mayo 2010 | 09:04
¿Adelante con el patrocinio, Antoñito!
19 mayo 2010 | 09:36