Me marcho a Colmenar Viejo. Dentro de 24h debería estar por aquí contando algo sobre las experiencias místicas de un corredor a la baja en una prueba de 100 kilómetros. El prontuario del día:
Suerte para los que la necesiten.
Vivan las cebollas.
La iglesia que más luz da es la que más arde.
Más. Me voy a lanzar, definitivamente, a la ehunmilak, la más cafre de las aventuras inventadas por los vascos (aparte de viajar a ciegas a las indias). Hasta ahora era un deseo, luego ha ido creciendo como una expectación casi juvenil, pero visto lo que se ve por aquí… esto va a ser el cambio definitivo. Hace años, en pleno embarazo y crianza de los enanos, me tenia que conformar con organizar cosas para que corriérais, y veía con envidia los cachondeos a los que os embarcábais. Pues ha llegado el momento de ser parte de la excursión del cole.
Muy bonito, hombre, tu anima a quemar iglesias, a ver si nos ponemos otra vez como en 1936… escribe algo similar sobre quemar negros o maricones, y ya me diras las respuestas que te llueven…..
hala…
17 junio 2009 | 16:41