He de ser sincera, Jaime Ostos no me ha caído nunca demasiado bien. Desde su profesión de torero a su soberbia en los platós de televisión han hecho que mis sentimientos hacia esta persona no sean los más bonitos del mundo, aunque he de reconocer que las últimas imágenes de Ostos me han hecho preocuparme.

Jaime Ostos se encuentra hospitalizado desde hace un tiempo y gracias a las fotografías que su familia ha compartido de manera inexplicable con el programa Socialité, hemos podido comprobar el desmejorado estado de salud en el que se encuentra el torero.

Como consecuencia de su débil estado de salud Jaime Ostos habría perdido 15 kilos. «Jaime está mal, ya lleva dos meses y medio, casi tres y ahí está. Ha perdido 15 kilos y no tiene fuerza para sujetarse en muletas. Está muy delgado y, de hecho, está tomando los mismos batidos de proteínas que tomaba yo. A día de hoy tiene que caminar con un andador, como un anciano» decía ante las cámaras su esposa la doctora Grajal, quien no se separa de su lado, como su hijo menor Jacobo Ostos.

A sus 88 años, la última vez que recuerdo haber visto a Jaime Ostos fue este verano en Marbella en un acto al que también acudió Aznar. Entonces ya caminaba en muletas por culpa del lumbago, pero ha sido recientemente cuando su situación ha empeorado al sufrir un edema agudo de pulmón. Desde entonces ha tenido que ser ingresado varias veces en el Hospital Montepríncipe de Boadilla del monte (Madrid).

Deseándole una pronta recuperación, me gustaría dar también desde aquí un toque a la familia. No entiendo demasiado bien el sentido de compartir unas imágenes en las que claramente se ve a una persona anciana, pese a que su mujer parezca no asimilar que ya lo es, en un gravísimo estado de salud postrado en la cama de un hospital. No sé, llamadme loca, pero no lo veo bien.

imágenes: Socialité