Ayer fue uno de esos días donde por la mañana tienes un nudo en el estómago, una ilusión exacerbada… y por la tarde muy mala leche…
Me tocó un año más la Lotería… pero la otra… la de las carreras, los codazos y las prisas…
… la de las ilusiones cumplidas, los abrazos sinceros, las miradas cómplices, los periodistas pesados, los comerciales generosos, los loteros sorprendidos, las envidias “sanas”…
Enhorabuena a los premiados. Y mucha salud y trabajo para el resto…