¿Cuestión de sensibilidad?
«Al 90% de las personas que inician un proceso de transexualidad no se les renueva el contrato laboral», explicaba Carla Antonelli, activista (casi dinamitadora, en el mejor sentido) del partido al que está adscrita (PSOE), días antes de desconvocar su huelga de hambre.
¿Cuestión de genitales?.
«El paro afecta a casi todo el colectivo, los empresarios consideran que somos gente problemática, cuando en realidad no somos más que un fiel reflejo de la sociedad: gente buena, gente mala, gente regular…»
El lunes había un soplo en el aire. Se sabía en los pasillos (sabíamos) que el Gobierno iba anunciar la ley de identidad sexual el miércoles, con la promesa de sacarla antes del verano…Era una promesa electoral atascada en los bajos.
Nosotros íbamos a dar el reportaje con huelga o sin huelga, por encima o por debajo de las promesas, por nuestros cojones o por nuestros ovarios, porque nuestros cojones se convertían en ovarios, o algo así…
«Existen países a los que no podemos viajar, está castigado con la pena de muerte; nos cuesta hasta alquilar una casa, los rechazos, una vez nos ve la cara el arrendador, son infinitos: lo siento teníamos el piso comprometido»
Rechazo infinito…
«La Guardia Civil te para en la carretera y entonces ven que tu aspecto no concuerda con tu documentación y te tratan como si fueras un terrorista, te perciben como una amenaza»
Transterrorismo. Rechazo infinito…
¿Cuantas veces utiliza una persona un DNI? ¿Cuantas lo utilizas tú?
«Incluso Turquía tiene regulada esta situación»
Parece que en esto llegamos tarde…
¿Pero sigue la huelga en pie, o no? ¿El colectivo está de celebración o en lucha?
«Habrá gente que me odiará en mi partido. Pero espero que vean que hemos salido ganando todos, que antes que la ideología se encuentra lo que es de justicia, y que si tuve el arrojo de anunciar una huelga de hambre para el día 15 de mayo, ahora tengo la valentía de pedir disculpas al Gobierno, espero que con el tiempo se comprenda que mi acción fue necesaria…»
En esto de Internet, que tiene la cualidad de superar a veces las barreras espacio tiempo, se comprende ahora mismito…
¿Cuestión de genitales o de personas?
¿Cuestión de la verdadera identidad o de la que marcan las normas?
Javier Rada
Desgraciadamente todavia hay ciertos tabues sobre lo diferente, la sociedad te educa para casarrte y tener una familia y cuando eres distinto, sobre todo, en sexualidad, ya sea homosexualidad o transexualidad ya te miran mal, la homosexualidad poco a poco se esta superando pero no aún no la transexualidad, a mi me da igual que pepe sea luego pepa o victoria y luego victor, aunque reconozco que si veo a una mujer con rasgos masculinos me quedo mirando (solo un rato) pero no por prejuicio. ¿Creeis que algun dia dejara de haber tabues?
11 mayo 2006 | 15:33
A mi también me da igual que se llame pepe o pepa. Lo que importa es que son personas. ¡Que manía con querer que seamos todos iguales! Dijo alguien más listo que nosotros, uno de los padres del psicoanálisis: una sociedad sana es aquella en la que sus individuos están en desacuerdo… Y no sólo en la forma de pensar; sino en la de escribir, bailar o llevar a cabo su identidad y naturalmente su sexualidad. Negarlo, querer que seamos todos iguales, es por lo tanto la auténtica enfermedad mental.
11 mayo 2006 | 16:20
La igualdad de todos los seres humanos, es la clave para la paz. Muy buen articulo, felicitaciones y saludos.
11 mayo 2006 | 22:27