Carlos Lozano, destrozado y llorando en Supervivientes y aparece un unicornio… no preguntéis

Carlos Lozano y un unicornio. Lo normal, vemos. (FOTO: CUATRO)

El surrealismo se inventó, desarrolló y cobró fama sólo para poder referirnos a la gala de anoche de Supervivientes, en la que, para paliar un cabreo y una crisis existencial decorativa, se empleó un unicornio deforme con trastorno de la personalidad.

A Carlos Sobera se le ha colmado el vaso y no con una gota, precisamente. Se le ha colmado con un puto camión cisterna entero. En fin… vamos por orden porque la gala de anoche dio para mucho.

Y ya sabéis que aquí estoy para lo que gustéis mandar:  Instagram: @GusHernándezGH | Twitter: @realityblogshow | Facebook: Gus Superviviente Hernández.

«A lo mejor hemos empezado un poco fuertes«, dijo Sobera, porque se puso a presentar a los colaboradores con unos berridos que le habríamos oído con un tren de mercancías pasando por el plató.

Sobera se mata explicando lo que es la transversalidad que, básicamente, es lo de cambiar de Telecinco a Cuatro, pero el pobre hombre lo explica como si estuviera haciendo un esquema sobre el misterio de Fátima.

Pues una cosa os digo: tengo el mando de la tele jodido (o está rota la tele) y tengo que cambiar los canales en la tele, directamente en el aparato. Levantándome. He ido al pasado. Lo siguiente ya es ponerme sanguijuelas y hacerme sangrías cuando me duela la cabeza.

Qué gusto ver las galas los martes con Carlos Sobera, de verdad.

La gala de anoche era la gala en la que Miriam Saavedra llegaba a la isla. «La llegada del fantasma del pasado llega con ganas de repartir amor, mucho amor…«, dijo Sobera. Lo que llegaba era con ganas de repartir unas hostias como panes de hogaza de tres kilos. De las de la corteza dura.

Lara iba de nueva muy guapa, si no fuera porque le habían colgado del biquini una rueda de molino. El proceso de diseño de sus biquinis pasa por ver si los accesorios son capaces de partirle el cuello a un buey. Si le ponen al bicho el biquini de Lara y se le desplazan las cervicales, lo usan en una gala.

Ya casi al inicio del sarao nos pusieron un vídeo de Carlos Lozano cabreado, decepcionado, con el corazón roto. Pero roto tirando a triturado.

«Ha desmontado el palafito que con tanto cariño y esfuerzo había construido«, nos contó Sobera antes de ver a Carlos quitando cosas de decoración del Palafito, que parecía el vídeo de una compra en IKEA pero puesto del revés.

Aunque en los Cayos Cochinos no hay IKEA, hay un COCHIKEA.

«Mes y medio sin hablar con nadie, no he tenido ni una recompensa, me han castigado ya tres veces, me han hecho un infeliz», se quejaba amargamente Carlos. Todo es culpa del programa. Carlos se pilló un testículo con la cremallera del pantalón cuando tenía 4 años y eso fue culpa del programa también.

Justo les dijeron que les levantaban el castigo y él se puso a tirar todos los adornos que él mismo había puesto en el palafito.  Eso sí, las plantas las trasplantó en la arena de la playa. Esas plantas están tan bien ahí plantadas que la próxima cosa que se podrá hacer con ellas será oficiarles el funeral. Eso es lo que se llama sembrar vientos. Literalmente.

En el lado de los señores hubo bronca. Estaba lloviendo y Mónica trató de acoplarse en el refugio donde estaban Colate y Omar, sobre todo porque Omar la invitó, que este chaval con tal de frotarse con una fémina es capaz de invitar a la caseta a una gallina muerta. Y no creo que la respetara.

A la mañana siguiente Mónica reivindicó sitio en el refugio para ella y para su esterilla. No sin mi esterilla. Mónica Hoyos va con su esterilla a todas partes. Si va al aeropuerto y le dicen que la tiene que pasar por el escáner, pasa ella por la máquina acurrucada con la esterilla.

A todo esto, Colate gusta en la isla como un bocadillo de chorizo en una convención de veganos.

Mónica se ha cambiado de bando y ahora es súper amigui de Isabel Pantoja. «¡Venga arriba, so tonta!», le dijo Pantoja mientras la abrazaba y la aceptaba en el lado Pantojo. No es nadie la Pantoja haciendo sentir a la gente que es aceptada.

–  Mamá, mira, éste es mi novio.

– ¡HIJO DE PUTA, ARRIBA, OLEEE, BASTARDO DE LOS COJONES, SO TONTO, VAMOOOOS, OJALÁ SE TE PUDRA LA NARIZ, ASQUEROSO! Bienvenido.

Y así.

La mujer de Chelo nos confesó en el plató que Chelo es la que lava los platos en su casa. No me jodas. Qué obsesión por limpiar. Chelo paga a la asistenta para que le revuelva y manche y tener cosas que hacer.

– MÁS, TÍRALO TODO, ENSUCIA, JODER, ESCUPE EN EL SUELO, NO QUIERO NI UN VASO LIMPIO.

Vídeo: Violeta tenía la potestad de pedir cosas para que se las llevaran los demás al palafito. Y ella decidió ponerse a joderles pidiendo de todo, sobre todo agua.

«Mañana voy a beber todo el día, voy a hacer pipí todo el día«, declaró. Menuda es Violeta haciendo planes para pasarlo bien. Beber y mear. Beber y mear. Violeta va a acabar Supervivientes con los riñones de una señora de 90 años.

«Son los vagos, los ninis de Supervivientes«, dijo Violeta de Dakota y Oto. Ella, que ha tenido que pedir un permiso en la Universidad de Harvard y en su trabajo en la NASA para ir a Supervivientes, no te jode.

Violeta echó de menos que Fabio fuera a verla por la noche al palafito. Pero es que claro, Fabio vivía muy tranquilo sin Violeta. Fabio estaba sin Violeta más a gusto que en el vientre de su madre. Lo raro es que Fabio no aprovechara la noche para escapar.

Conectamos con Miriam, que estaba en la playa con una naturalidad de lo más natural, naturalosa, en una tumbona, en biquini, con una sombrilla que parecía una araña con malformaciones y con una postura que retorcía la columna vertebral de forma que era capaz de enseñar a la cámara la cara y el culo a la vez.

¡Miriam, mira, una cámara!

the exorcist GIF

Y fueron llevándole uno a uno a los concursantes, para que se la encontraran en la playa.

El primero en verla fue Albert. «Qué… qué ocurre… por qué me han traído a mi…«, dijo Albert desorientado como si se acabara de bajar de una furgoneta blanca con un riñón menos y una cicatriz en el costado.

El siguiente fue Colate. «Hola, te saluda Miriam, más conocida como La Princesa Inca, podéis llamarme La Princesa Inca», le dijo Miriam, ja ja ja. Ella, sencilla. Colate, ni puta idea tenía de quien era Miriam. Le llevan a la pescadera del barrio de la lado y la reconoce igual.

Pantoja llegó después. Miriam le dijo que ya habían coincidido en Perú, porque ella se acercó a saludarla después de un concierto. La Pantoja se acordaba como si la hubiera ido a saludar el hombre invisible.

«Solo quiero saber si todo está bien», preguntó Pantoja por enésima puta vez. No, Pantoja, todo no está bien. Hay guerras en el mundo, hambre, paro y gente que usa riñonera y se piensa que va a la moda.

Omar vio a Miriam y se quedó lejos de ella. Yo creo que le daba miedo. Dijo que guardaba buenos recuerdos de ella, pero su cara decía lo contrario. Hasta que vio la posibilidad de que fuera un objetivo.

«Yo encantado de convivir con la muchacha«, dijo cuando le hicieron la broma de que iba a dormir con ella. Omar está más salido que el cabo de Hornos. Lleva un calentón que para hervir agua sólo necesita meter la cola en un balde lleno.

«¿Qué tal que esté ahí Mónica, Omar?«, preguntó Sobera, confundiendo a Miriam con Mónica por segunda vez. «La próxima vez que lo haga me quito un zapato y me lo como», dijo Sobera. La gala que viene:

Animated GIF

Y llegó Chelo. «Chelou», dijo Miriam para saludarla. JA JA JA Y se puso a tocarle el culo para ver cuánto ha adelgazado. Le dio con tanta fuerza las palmadas en el trasero que ahora Chelo tiene las nalgas cóncavas.

Mónica desembarcó después. «Ha llegado un ser querido tuyo«, le dijo Omar. JA JA JA JA Qué mala leche. Todos la miraban como el que mira a un condenado a muerte.

«Ha venido Miiiiiriiiiiaaaaaaaaaaaaaaaaaam», le dijeron sus compañeros, regodeándose. Si esta gente se dedicara a dar diagnósticos sería tipo «es una apendiciiiiitiiiiis, apendi-di-di-di-dicitis. Trá trá». «Ah, por cierto, ¿a que no sabes quién se va a morir de apendicitis?».

«¿Quién es Miriam, Miriam Díaz Aroca?», dijo Mónica haciéndose la sueca que hasta se puso rubia.

Vídeo del castigo de Omar. Le pusieron unas gafas oscuras que le impedían ver. «Que nadie me ponga el culo en la cara ni cosas así«, dijo él. Joder, no des ideas, Omar. A mí me dice eso y antes de que acabe de decir la palabra culo tiene la nariz entre mis nalgas.

«Es el castigo más duro que me han puesto en mi vida», dijo el muchacho. ¿A Omar qué castigos le han puesto que ponerse un antifaz es el mas duro?

– ¡Omar, has roto el jarrón de mamá! ¡Castigado a comer pastel y recibir masajes en los pies!.

A Omar le pones de cara a la pared y se traumatiza.

PRUEBA DE RECOMPENSA:

Era una catapulta con la que se lanzaban bolas que contenían premios. Para cogerlas, los concursantes tenían unas cestas en la cabeza.

Albert ganó unas pinzas de depilar (y las perdió después). Colate ganó un plato de calamares y un plato de aceitunas y… y ya. Porque los demás, nada.

Omar cogió dos bolas y las dos eran bombas, o sea, no se llevaba nada. Nunca echéis la lotería con Omar. Este chaval es capaz de gafar a la mala suerte. Los espejos tienen miedo de romper un Omar y las escaleras no pasan por debajo del chaval. Los gatos negros directamente cambian de camino si le ven.

Pantoja no cogió nada, pero cuando acabó la prueba tenía la cesta llena de latas, un jamón, turrones, vino de Rioja y una criada filipina para que la atienda cuando Chelo libre. Pero nadie sabe cómo acabó en su cesta. Ojo.

Turno para los abandonados.

Fabio consiguió un cortauñas y un plato de aceitunas. Oto se llevó un «robo», con el que le quitó las aceitunas a Fabio. Pero Fabio sacó otro robo y recuperó sus aceitunas. De mierda.

«Es que tengo fuerza de maricón, no es mi culpa«, dijo Oto cuando le recriminaron que tiraba flojo. Vaya por Dios. Ser gay te hace flojucho. Según Oto, si Jason Momoa sale del armario y se queda esmirriado como Pablo Motos.

Cuando le tocó lanzar a Fabio le dio tan fuerte que la pelota la cogió una señora de Cuenca que llevaba una bolsa en la cabeza porque estaba lloviendo.

Y llegó el encuentro de Carlos Lozano con Miriam. Pero antes, vimos a Carlos venido a bajo, llorando. No podía ni hablar. Daba mucha pena, pero mucha. Si le pones un disfraz de perro no vuelve a abandonar nadie a un animal en España.

Y Carlos le dijo lo que los teléfonos móviles le dicen a Instagram: «Me habéis hecho perder la energía«.

«Te queremos», le dijo Sobera para animarle, pero Carlos replicó: «Pues no se nota, me lo habéis quitado todo, ya no disfruto«. OH, EL DRAMA

sad classic film GIF by Film Society of Lincoln Center

A Miriam la habían disfrazado de Unicornio. Lo que pasa es que era un unicornio con problemas al nacer. Joder. Ese unicornio tenía problemas de tiroides, por no hablar de que la cabeza se le movía como si hubiera sufrido una decapitación parcial.

Miriam, que era la que estaba dentro del unicornio, estuvo a punto de morir asfixiada por la máscara de plástico. Si tardan un poco más Carlos le quita la máscara y se encuentra con la momia de Nefertiti.

Miriam le llevaba un plato de comida.

Y SE SALVÓ DE LA NOMINACIÓN… ¡¡VIOLETA!!

Ojooooooooo sorpresaaaaaaaaaaaaaaaa.

Volvamos a Mahi… «cuando yo hago vídeos de mi cagando son mucho más dignos que discutir con ella«, dijo la muchacha. Estaban los grandes genios de la literatura haciéndose sus memorias, que no es precisamente Espinete.

Dakota estaba feliz. JA JA JA JA Se le saltó uno de los cristales de las gafas, pero muy feliz por Violeta. Se le abrió una hernia en el esófago del reflujo que le dio, pero de buen rollo.

Oto es malo. O por lo menos lo parece.

Por tres motivos:

  • Carlos Lozano. Le ha puesto a parir en la isla se ha reído de él y de Carlos Lozano  se rió diciendo «ya no presenta nada, voy a verle en la tele.
  • Dolor de ovarios: Oto se rió del período de Violeta como si fuera algo malo. Omar vive en el siglo XII
  • Usar la transfobia. «El abanderado feminista se ríe del dolor de ovarios. En la puta vida vas a tener dolor de ovarios», le dijo Violeta cuando se burló de ella por sus dolores menstruales. «Cuidado con la transfobia, diciendo que nunca voy a poder sentir lo que tú», replicó Oto, usando una casa justa para tratar de ganar una discusión de mierda.

FALSOOOOOOO, FALSOOOOO, FALSOOOOOOOOOOOOOOOOO

FALSOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

FALSO, FALSO, FALSO, FAAAAAAAAAAAAALSOOOOOOOOOOO

Les gritaba en otra ocasión Violeta desde el palafito. Yo soy Carlos y arrojo las piedras del palafito, pero metidas en mis bolsillos, para no sufrir más. Perra vida, tete.

Isabel Rabago dijo que a Mahi nunca la ha visto limpia. Aneth dijo que iba hablando por detrás… Mahi es limpísima. Mahi es la mejor. Y vosotras unas reventadas.

EN PLATÓ HACE FALTA ALGUIEN QUE DEFIENDA A MAHI, MALDITA SEA.

Ah y Oriana, a la que le joden las «bienquedas«, no como ella, que se ha ido en días de tres realities, haciendo de ser malqueda todo un arte.

El problema es que Violeta reparte hostias a cualquiera que se acerque, sea con buenas o malas intenciones. Violeta llega a nacer en el portal de Belén y cuando llegan los Reyes Magos los recibe a escupitajos.

– Falsooooooooos, que queréis vídeos a mi constaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa. ¡Metos la mirra por el culo! Y ¿qué cojones es la mirra?

Hablando de Mahi…

HA CAGADO.

Ojo.

«He hecho caca y me siento una persona renacida, dispuesta a comerme el mundo, porque le he hecho hueco»

Vídeo: Chelo y Pantoja mirando al infinito, esperando a que Colate encienda el fuego con una cerilla. Porque ellas son incapaces de levantarse, coger la cerilla y hacer el fuego ellas. Si fuera por la Pantoja y Chelo, el ser humano aún se comería las cosas crudas. Si ellas hubieran vivido en la prehistoria en lugar del fuego habrían inventado el despelleje.

En otra baza, fue Mónica Hoyos la que hizo el fuego. Sí, con una cerilla. Pero ella estaba orgullosa como si hubiera hecho fuego debajo del agua con un mechero gastado.

De momento, bien. Y con ese zurullo, acabamos esta gala.

2 comentarios

  1. Dice ser Unodelacalle

    Se queja el que escribe esta cosa de la falta de literatura que encierran las frases de Dakota y Mahi… Vamos que él también habrá abandonado su trabajo en la Universidad de Harvard o en la NASA para escribir esto…

    05 junio 2019 | 11:20

  2. Dice ser Ser o no ser

    Gus, mi querido Gus. Eres de lo poquito que me hace reír a carcajadas. En los malos momentos siempre estás tú. No cambies nunca por mucho que te critiquen por estos lares.

    05 junio 2019 | 20:43

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