Guerra en Pasaporte a la isla: Las madres tróspidas se hacen mobbing

María José, una de las madres tróspidas de Pasaporte a la Isla, que es a los programas de televisión lo que los feos/as en las discotecas a las seis de la mañana con 20 copas de más (el último recurso), parece buenina pero es más mala que hincharse a micralax y luego meterse en un jacuzzi.

Es como un puñetero Gremlin, adorable en apariencia, pero como lo bañes y le des de comer después de media noche te haces caca encima.

Resulta que María José se aburre y ha encontrado por divertimento putear a Maricarmen, a la que le hace todo tipo de trastadas, lo que le sienta a Maricarmen como beber lejía en copa fina y con rodaja de pepino.

La última fue que estaba Maricarmen lavándose como podía con la manguera (en esa casa la higiene se cita como si fuera Voldemort: «tenemos falta de lo que ya tu sabes», «te haría falta un poco de la que no debe ser nombrada») cuando a MJ le pareció divertido cortarle el agua.

«Me he quedado a medio lavar«, decía Maricarmen a sus compañeros, cabreada como un jubilado llegando a la playa después de las ocho de la mañana. Esperemos que la mitad a medio lavar fuera de la de arriba.

«Ha apagado el agua«, les decía. Sí y ha dejado correr la luz y ha encendido el gas.

«Va a despertar lo que llevo dentro«, les dijo, como si fuera el mutante que lleva en la tripa a Kuato.

Mari Carmen, líder de los rebeldes.

Mari Carmen, líder de los rebeldes.

«Otra vez se va a llevar mi cuerpo un calentón«, añadió, como Josefina cuando a Napoleón le dio un gatillazo después de los preliminares.

Sí, que Maricarmen es muy de cogerse unos disgustos del quince por una tontería, pero es que mientras ella estaba histérica como una Miss a la que le pregunten por la macroeconomía, MJ se descojonaba del espectáculo.

Cuando el resto de compañeros intentaron consolar a Maricarmen, ella hizo un símil cinematográfico: «Ni que Angelina Jolie yo fuera, que está llorando en la peli y se limpia y luego se ríe«. Hay dos referencias en esa frase. Por un lado, la de Angelina y su capacidad para cambiar de registro y por otro la construcción de la frase tipo Yoda.

«Me está haciendo la vida imposible», concluía Maricarmen, al más puro estilo mobbing laboral e incluso carcelario. Hay prisiones en Panamá donde cortarle el agua a un compañero se consideraría una cosa fea y muy mal vista.

Peeeeero, al final son inseparables, como así lo reconoció Maricarmen, al afirmar de MJ que va «detrás de ella como un perrillo» y que ella «la perdona».

Ya veremos cuánto dura.

1 comentario

  1. Dice ser Sonia

    ¿Y qué me decís de esto? ¿os gusta?: http://goo.gl/1gZBnB

    03 agosto 2015 | 15:04

Los comentarios están cerrados.