Cuestan 10.000 euros, tienen diamantes cosidos a los bolsillos y son una horterada.
Para justificar su elevado precio te explican que vienen provistos de cristales de Swarovski, están hechos y pintados a mano y que tienen botones de oro blanco.
En la web de la marca de los jeans (Key closet) explican que el 30% de lo obtenido por la venta de los carísimos pantalones irá destinado a ayudar a construir una escuela en Uganda. Un fin benéfico, que yo lo veo como una forma de limpiar conciencias por dar esa cantidad de dinero por unos vaqueros.
Vía: She konows best.