A estas dos imágenes les separan 365 días. El acto y los personajes son los mismos, es decir la Pascua Militar y la ministra de Defensa, Carme Chacón, rompiendo el protocolo llevando pantalones.
El año pasado su esmoquin negro de Purificación García fue tachado de inapropiado y corrieron ríos de tinta criticándolo. Yo dije en su día que me parecía que iba espectacular, y a día de hoy creo que no he visto más guapa a la ministra que aquel día. Desde Defensa se aseguró entonces que el atuendo había sido consensuado con la Casa Real, pero chocó mucho ver a Chacón con ese pelo engominado y recogido en una coleta, y con la raya de los ojos muy marcada.
Esta vez Chacón se ha cortado. Una pena, la verdad. Se ha maquillado mucho más discreta y natural; el pelo lo ha vuelto a recoger, pero con un peinado de coleta baja y sin estiramientos; y por último, el traje es más clásico, muy diferente del look moderno que quiso mostrar el año pasado.
Yo desde aquí le digo a Chacón que siento mucho que los comentarios le haya hecho replantearse su estilo. Me gustaba mucho más la Chacón ‘voy a por todas’ que transmitía el otro estilismo. Éste se ha quedado en un: ‘este año no meto la pata, que Zapatero ya tiene bastante con lo suyo’.